Decir

39 5 0
                                    

Siempre había sentido muchas sensaciones cuando el me besaba, y aunque esta vez tampoco era excepción se sentía de alguna manera diferente pero agradable. Desde la primera vez que lo hicimos sentía aquella conexión, una pequeña electricidad que recorrió por mi cuerpo al tener la oportunidad de poder saborear de sus labios.

Era poco común pero lo disfrutaba mucho cuando las cosas se ponían de su parte inicial. Sus labios se entregaban perfectamente a los míos y no es que no supiera como era, pero la sensación se sentía de manera agradable. Sus manos se posaron por detrás de mi cabello tomando de este por veces y podía sentir nuestras respiraciones siendo erráticas por lo que estábamos haciendo, y si alguien nos vería, eso no podría ser más que otro escándalo de parte mía, pero que más da, si es con mi esposo.

—Hyun...hyun...— el me observó parando mis acciones, se notaba agitado. —Debemos parar, estoy un poco...

—Oh, lo siento...si, debemos parar antes que alguien venga y...

—Muy tarde.— escuchamos por detrás.

No supe en qué momento fue donde el ascensor finalmente había parado hacia el piso final y en efecto era Seungri y Ji a quienes pude ver al girar un poco mi rostro hacia ellos; Jiyong mantenía sus brazos cruzados elevando una ceja con una sonrisa sorna observando hacia nosotros. Dae inclinó su cabeza al escucharlos, viendo a los otros dos, mientras que por mi parte me di la vuelta observando a ambos. Seungri fue el primero en acercarse llevando un maletín que supongo sería de Ji.

—Señor Kwon...no debió interrumpir...

—Ah, Seungri tu eres muy ingenuo.—apretó una de sus mejilla sonriendo.— Debemos bajar.

—Lo siento hyun.— expresó Dae de un tono colorado.

—No te preocupes, aunque...pueden hacer eso en casa.

Dae simplemente desvió la vista hacia el frente. Cuando finalmente habían subido Seungri se dispuso a apretar los botones para bajar.

—Hasta abajo Seungri y luego quiero que tengas preparado todo para solo irme.

—Si señor Kwon.

Durante unos segundos hubo un silencio incómodo mientras mantenía la mano de mi esposo en mi bolsillo tocando de sus dedos y el riendo mientras me veía.

—Oye Seungri.— el me volvió a ver ante la mirada de Ji.— ¿Cómo te ha ido con Ji?

—¿Por qué le preguntas a él y no a mi?— el ceño fruncido de Ji se hizo presente al igual que tomó sin discreción de su mano.

—Seungri es más abierto a hablar que tu.— sonreí. —Además no le veo nada de malo preguntarle, tu estas aquí.

—Ha estado bien por ahora. —Seungri sonrió al responder. Tapó con una de sus manos descubierta de su boca ante la mirada de Ji que con el ceño fruncido seguía viendo.

—Ya Ji, no seas ridículo, no te voy a quitar a Seungri solo con preguntarle algo.

—No lo sé Seung.— se acercó dejando la mano de Seungri.— La última vez lo estuviste tocando de su cabello y lo despeinaste.

—Pero...¡¿Qué?! —Reí ante su mirada.—Solo fue molestarlo un poco, no es nada.

—Lo sé, Seungri me ama solo a mi.— hizo su cabello hacia atrás cerrando sus ojos y sonriendo victorioso.

—Eres un drama.

—Gracias.

—Lo mismo le he dicho.—añadió Seungri sonriendo.

Nuestro Matrimonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora