Hasta aquí llegamos.

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—No —sentenció la pelinegra—. Tu prenda es... es contestar sólo que sí —repitió mientras tomaba aire; ahora solo faltaba arrodillarse.

El cuerpo de la pelinegra comenzó a inclinarse cuando—

— ¡Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti!

_____ se incorporó rápidamente, volviendo a apretar la cajita entre sus manos. En cuanto se reincorporó del todo, observó a Scarlett y a Florence entrar con un enorme pastel entres sus manos. Cerca de ellas estaban Zach y Colin. Las velas del pastel estaban encendidas y detrás de ellos venían gran parte de los amigos de Lizzie y un montón de gente más a quienes la pelinegra no conocía.

— ¡Feliz cumpleaños, querida Lizzie, feliz cumpleaños a ti!

La pelinegra se hizo para atrás de inmediato, dando lugar a que Scarlett y Florence se acercaran para que Lizzie soplara las velas.

La castaña tenía una sensación rara, sus ojos iban de _____ a sus amigos y viceversa.

— ¿Tú sabías de esto? —preguntó a la pelinegra, tomando su mano. _____ negó rápidamente; eso no le gustaba nada, pero si su novia estaba feliz no había nada que hacer.

— ¡Es una sorpresa! ¡Sopla ya, castaña culona, que me estoy cansando de tener este estúpido pastel!

Por la música, ninguna de las tres chicas alcanzó a escuchar a _____ murmurar lo perfecto que es el trasero de Lizzie.

—Melissa llamó a Florence para pedirle tu teléfono y nos contó de la reserva de la rari en este lugar —dijo la norteamericana, mirando de costado a _____—. Tan solo un llamado y organicé todo. ¿Scarlett Johansson puede o no con todo? —Scarlett se sentía orgullosa mientras que _____ planeaba una forma de comunicarse con su empleada para despedirla.

— ¡Pide tres deseos, Lizzie! —la animó Florence para que soplara las velas.

Lizzie sonrió y tomó aire para apagar las veintiséis velitas. Todo el mundo en la sala aplaudió y _____ tuvo que soltar a su novia para que pudiera recibir los saludos de todas las personas que querían felicitarla.

Poco le molestaba todo eso mientras la sonrisa gomosa de la empresaria siguiera en su lugar, el problema comenzó cuando _____ vio al estúpido chico de peinado extraño acercarse con una sonrisa seductora y caminando como si se llevara todas las miradas del lugar. _____ detestaba a ese chico más que a ninguno, bueno, el otro alto tampoco le caía bien; Adam, pero al menos no se trataba de comer a Lizzie cada vez que la veía

— ¡Lizzie! —la saludó Boyd, abriendo sus brazos para abrazar a la ex rubia—. Que bueno verte y especialmente en tanto detalle —los ojos del chico se fueron hacia el escote de la empresaria y _____ tuvo que obligarse a clavar sus pies en el piso.

La pelinegra odió que la sonrisa de Lizzie siguiera allí aunque estuviera ese chico allí diciéndole esas cosas que _____ no aprobaba.

— ¡Boyd! —la castaña le correspondió el saludo y se dejó abrazar por el muchacho. _____ pudo ver que el chico quiso besar en la boca a Lizzie, pero ella lo esquivó con facilidad y le puso la mejilla. El chico se dio cuenta y rio en voz alta.

_____ pensó que el chico se veía bien. Era alto y tenía su físico marcado. Vestía con ropa costosa y moderna, y tanto su color de piel como su peinado hacían a la perfección el look de chico malo que atraía a casi todas las chicas. La pelinegra veía a su novia interactuar con el muchacho y veía a la pareja perfecta; pensó que ella no le llegaba ni a los talones a Boyd.

— ¿Cómo estás, Boyd? —la voz de Lizzie la sacó de sus pensamientos.

—Muy bien, Liz, aunque no tan bien como tú —dijo, mirando a la pelinegra que estaba oculta detrás de Lizzie.

No soy para ti - Elizabeth Olsen y tu (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora