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20 Abril 2022
(1 mes después)

—¿He vivido engañado?—asentí.

—De verdad perdóname, yo no quería engañarte, nunca fue mi intención—bajé la mirada.

—¡Me encanta!—me abrazó efusivamente—¡Eres aún más preciosa!—reí.

—¿Enserio te gusta?—asintió con una sonrisa.

—Lo adoro, tu cabello es perfecto, ¿Por qué lo ocultaste todo este tiempo?—me encogí de hombros.

—Ya era llamativa, no podía venir aquí con el cabello rubio, casi blanco—reí. Mi hermano y yo teníamos de diferente color el cabello, él tiene el cabello oscuro como mi madre y yo lo tengo rubio como papá.

—Te ves increíble, por favor no lo cambies otra vez—sonreí.

—De acuerdo—me devolvió la sonrisa.

Gon estaba más que feliz al ver mi color natural de cabello, todo este tiempo utilicé un tinte castaño oscuro desde antes de conocerlo, y ahora que he decidido dejar de teñirlo, está encantado con mi color natural, y así lo dejaré.

—Majestad—miramos al capitán Jo entrar, al verme se detuvo, pero al mirar mis ojos supo que era yo.

—¿Qué sucede Young? ¿La encontraste?—asintió.

—Ella y los traidores se ocultan en una casa que está sobre el muelle—le entregó unos papeles y ahí estaban las fotografías de esta misma mañana.

—Prepara un escuadrón de cuarenta hombres, veinte estarán contigo y los otros estarán a los alrededores, por si intentan escapar. Traigan a la ministra con vida y si el traidor Lee Rim está con ellos, también—ordenó.

—Sí, majestad—hizo una reverencia y salió del estudio.

—Iré con ellos—negué.

—Por favor no, espera a que ellos regresen. Esto podría ser peligroso—tomó mi rostro y sonrió

—Nadie es más peligroso que yo en estos momentos—besó mi frente.

—Solo te pediré una cosa—asintió—Usa el chaleco, por favor—me abrazó.

—De acuerdo—me soltó y salió del estudio.

Mis nervios comenzaron a carcomerme, el simple hecho de saber que estaba a nada de atraparlos me resultaba preocupante, podía suceder cualquier cosa y este no era el momento para ser negativa. Solo me quedaba rezar y esperar lo mejor.

Busqué a la señora Noh por todo el palacio, la encontré rezando con las mujeres de la corte real.

—Katya, ¿Quieres unirte?—sonreí.

—Seré lo más respetuosa—hice una reverencia.

Y así era, no conocía sobre su religión, pero le rezaría a lo que yo le tuviese fe. Pedí por la seguridad de Gon y todos los guardias, que regresaran sanos y salvos, también era obvio, que finalmente pudiesen detener a todos los traidores.

Se llegó la noche y Gon no aparecía, no quería molestar llamándolo, pero me moría por saber que estaba pasando. Llamé al capitán pero no respondió.

—¿Sabes algo?—negó.

—No majestad, no tenemos contacto con ellos—respondió.

—Si sabes algo, por favor, házmelo saber—asintió.

—Sí, majestad—hizo una reverencia. Tan pronto me giré para regresar a mi habitación, mi teléfono sonó, era el capitán.

—¿Qué ha pasado? ¿Están bien?—

THE QUEEN -A NEW MONARCH- LEE MINHO (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora