OS Wandanat

Wandanat

Natasha.

— Wanda, el traje me pica— me quejé nuevamente.

— Debes aguantarte, cariño. Nuestros hermanos se casarán, debes verte bien— murmuró saliendo de la habitación al pasillo donde me encontraba— ¿Cómo me veo?

Oh, Dios.

Tiene un vestido negro pegado a su cuerpo con un gran escote en v que deja sus hombros descubiertos.

— Realmente eres una milf, con unos buenos lentes podrías aparentar unos cuarenta y tantos— comenté burlescamente.

Amo hacer enojar a mi esposa; es linda molesta.

— Tengo treinta, Nat. Tú eres la anciana aquí— bromeó.

— Lo sé, pero me veo más joven— murmuré con autosuficiencia falsa.

No me siento tan suficiente y Wanda lo sabe.

Giró sus ojos y caminó hasta la cocina ladeando sus caderas con cada paso.

Cómo me pone, joder.

Caminé tras ella, le di una nalgada y tomé hábilmente su cintura.

— Sabes que te ves increíblemente sexy con lo que sea que te pongas, brujita— ella sonrió y volteó para besarme.

Rocé sus labios con mi lengua y ella me cedió el paso para explorar su delicada boca, mis manos vagaron por su espalda hasta dejarlas reposando en su trasero. Apreté y ella gimió contra mí.

— Nat... Los niños— gruñó agitada sin separarse tanto.

— Tu madre viste a Liam, Elizabeth y Katie están listas desde hace un rato, Isabella ya sabe cambiarse sola y lo ha hecho, sólo falta Luna y estoy segura que mi madre la está vistiendo- contesté besando su cuello e inicio de sus senos.

— Vayamos al baño de visitas— propuso sabiendo que no me detendría.

— Vamos— concordé caminando de espaldas hasta llegar a la pequeña habitación y cerrar con seguro.

(...)

La decoración es hermosa, aunque muy marica. En la entrada hay un cartel con las iniciales "P" y "C".

Lo niños juegan, mi esposa socializa con personas que no conozco, Melina e Irina platican animadamente al igual que Alexei y Erik y Yelena habla con Kate Bishop, amiga de Clint. Están demasiado cerca, apuesto a que ya se conocían; parece que se comen con la mirada.

Sospechosamente homosexual.

Laura y los niños están con su padre ayudándolo con el traje. Clint y Laura lo dejaron hace cinco años y en muy buenos términos, se convirtieron en mejores amigos gracias a que mi ex cuñada ama a Pietro y sus bodoques también, incluso le dicen papá postizo.

Laura y yo seremos madrinas por parte de flechitas, muy moderno todo.

Aún recuerdo cuando mis muchachos dijeron que estaban saliendo. Irina pegó el grito en el cielo al darse cuenta que fue una fábrica de niños arcoíris que les gustan mayores y son pasivos, pero eso último no lo sabe por su propia salud mental. Mi madre amó al platinado desde el primero momento, no puedo negar que tiene cierto encanto el muchacho. Es cosa de los Maximoff.

Si yo fuera hetero me daría a Pietro sin pensarlo. Es un muy buen partido, pero me van más las pelirrojas llamadas Wanda y que son milfs.

Tony les consiguió el lugar y está pagando una parte y Wanda y yo les regalamos los trajes, cada uno de la banda les regaló algo para su boda como símbolo de unidad, o una mierda así dijo Wanda cuando me reusé a comprar los trajes.