Love's Bet | Jenlisa

Parte 9.

Resignada caminé hacia mi auto.

"Al menos Yeri y Sana no pasarán una linda noche". Reí en mi interior.

Seguía caminando entre la oscuridad del enorme estacionamiento, hasta que logré visualizar mi auto. Pero antes de llegar, me sujetaron de la muñeca tirándome fuerte y tan rápidamente que no pude ni gritar.

ㅡ¿Por qué me fastidias? ㅡpude reconocer ese rostro en medio de la oscuridad, era Lisa la que me agarraba del cuello y me miraba con toda la ira del mundo

ㅡ¿Yo? ¿Fastidiarte? ㅡafortunadamente la situación es algo que se me daㅡ ¿Ahora qué hice?

ㅡVolverte porrista. Ese grito ㅡsentía su respiración mezclándose con la míaㅡ entiéndelo, no me interesa nada relacionado contigo, ni amistad ni mucho menos tu apoyo ¿entendido? ㅡliberó mi muñeca pero mi cuello seguía siendo prisionero.

ㅡ¿Segura? ㅡsusurré sobre sus labios mientras subía mis manos a su cuello, sólo que yo al contrario a ella, la acaricié suavemente.

Tragó saliva, aunque lo disimulara discretamente, ella estaba nerviosa. Detuve mis manos en su nuca, para lentamente eliminar los escasos centímetros que nos separaban.

Capturé su labio inferior succionando de este para iniciar el beso, ella permanecía quieta, pero al rozar mi lengua por su labio inferior, esto cambió.

Su mano que sujetaba fuertemente mi cuello, redujo la presión con la que lo hacía, al mismo tiempo que presionaba su otra mano libre en mi cintura. Me siguió, sus gruesos labios se rodaban con los míos de una manera increíble. Había perdido el control, ahora ella llevaba el ritmo del beso, mientras que yo la seguía.

Sus dos manos se encontraban en mi cintura, sus brazos estrujándome hacían aún más fascinante el beso, comenzó a avanzar hacia mí y por inercia comencé a caminar hacia atrás. Seguimos retrocediendo, hasta que chocamos con el que seguramente era mi auto.

"¡Rayos!" Pensé al escuchar que la alarma se había activado.

Lisa se separó bruscamente de mí, dejándome completamente aturdida.

ㅡSabía que eras fácil ㅡsusurró en mi oído, sacándome del estado en el que estabaㅡ pero no creí que tanto... ㅡme miró despectivamente y se dio la media vuelta.

ㅡTodos saben que es más fácil conseguir ver al presidente en persona, que obtener una cita conmigo ㅡpodía decirme lo que quisiera, falso, hipócrita. Pero fácil. Nunca.

ㅡPues ya te lo dije ㅡvolteé y se acercó nuevamente a míㅡ No me interesa conocer en persona al presidente, y mucho menos una absurda cita contigo ㅡal decir eso, Lisa puso su dedo índice en mi pecho.

ㅡHablas... ㅡle dije sacando su dedo de mi pechoㅡ hablas como si realmente me conocieras ㅡme había dicho mentirosa y fácil en sólo dos veces en las que hablé con ella.

ㅡNo necesito conocerte para saber cómo eres

ㅡ¿Eres psíquica o bruja tal vez? ㅡsolté una carcajada y ella seguía con su fria mirada hacía míㅡ no... Ya sé, eres una adivina ㅡcontesté y volví a reír

ㅡMira...

ㅡAdivina qué número estoy pensando ㅡbromeé sin poder parar de reír.

ㅡ¿Ves? ㅡdijo con su fuerte forma de hablarㅡ no necesito conocerte para saber que eres una tarada, igual A Yeri y el par que la sigue siempre ㅡmi risa cesó.

¿Me estaba comparando con Kim Yeri?

ㅡ¿Yo igual que Yeri? ¡Já! ㅡme burlé.