Helsinki

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-¿Qué tal con Chávez?-

-Bien-

-Chiquillo te veo decaído- quería decirle pero no quería poner en riesgo a nadie, Liz odiaba las injusticias, sabía que le importaría una mierda el encubierto y lo sacaría del lugar pero era peligroso para los tres

-Solo estoy cansado, eso de levantarse temprano para conseguir las frutas y verduras me esta pasando factura-

-Sabes que puedes confiar en mi-

-Lo se-

Paso rápido el tiempo dos semanas y cuatro días para ser exactos, llevaba la cuenta ya que la rata me preguntaba cada vez que le llevaba de desayunar sentía una impotencia de no poder ayudarlo, con el paso del tiempo se abrió más conmigo o fue porque soy su única opción para charlar

-¿Qué haces?- al abrir la puerta me encontré con el Tuerto buscando entre las vasijas que había separado específicamente para cocinarle a Joaquín

-¿Porqué tienes estas separadas?-

-Que te importa, este es mi trabajo no el tuyo-

-Dime imbécil-

-Lo que diré es que iré con el jefe a quejarme de su empleado inepto, no debes de meterte aquí, solamente cuando la comida esta lista, métete en tus asuntos que yo no voy de chismoso a los tuyos-

Desde ese día dejé de cocinarle a la rata ahí, no quería arriesgar que el imbécil del Tuerto haga algo con los sartenes de él, cocinaba en la pequeña casa, ahora preparaba la porción para dos personas

-¿Y porque no comes conmigo?-

Esa pregunta cambió todo, sentía que éramos más cercanos y dolía a la vez no poder hacer absolutamente nada

-Aquí estoy jefe-

-Siéntate muchacho- Chávez casi no era de llamarme, solamente lo hacía los lunes para checar los alimentos que faltaban

-Se ve bien el niño- asentí -Sabes que no durará aquí- trate de disimular que sabía perfectamente a que se refería

-¿Cómo jefe?-

-Muchacho, él niño no puede quedar con vida-

-Pero usted dijo que si cooperaba..-

-Él es un excelente agente, su padre también lo es, estoy seguro que no va a acceder, claro que se tiene otras opciones para darle un pequeño empujón para que lo medite, pero aun así aunque de verdad lo quiera de este lado nunca va ser parte……por otro lado si nos brinda información puede que le de un poco de libertad- Chávez tenía razón no traicionaria al FBI

-¿Qué haré?-

-Tu lo mataras- no podía hacerlo -Es la única manera para que te quedes dentro del equipo, yo te diré el día de tu iniciación- sonrió el hijo de puta

-De acuerdo jefe-

Puse un pretexto para faltar los tres días siguientes, le avise a rata que faltaría, los primeros dos días no pude llevarle de comer, Liz y yo estábamos escribiendo los avances de lo que ha sucedido en este tiempo que ha transcurrido, fue extraño que ya nos los pidiera ya que siempre eran al cumplir un mes más, podría ser que quieren asegurarse que no valla a fallar

-Toma asiento Emilio- como siempre estaba su porte impecable -¿Cómo ha ido…-

-Lo van a matar- iba ser directo -Debo hablar con los superiores para crear un operativo de emergencia-