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Nos alistamos para salir a buscar a Rocío -Nos vamos a ir en tu auto o en el otro-

-No es mi auto- sonrió -Vamos en el que nos dieron-

-Yo vi que el jefe te lo dio a ti-

-Pues se quedara en tu trabajo….tal vez lo puedas tener de nuevo- negó

-No soy el agente García- rodé los ojos -Eres muy bueno debo de admitirlo-

-Lo se-

-Andando- reí, tome las llaves y salimos rumbo a la dirección que tenia el expediente, tardamos una hora en llegar -Espero que siga viviendo aquí- al tocar el timbre esperaba con ansias que fuera ella quien abriera

-Buenos días- no era -¿En que les puedo ayudar?- mujer en sus setenta

-Somos los agentes Méndez y García- nos miró con confusión -Buscábamos a Rocío Rumas-

-¿Se encuentra bien?- empezó a angustiarse

-Queremos saber su ubicación- sus manos comenzaron a temblar

-Señora, venimos para que de su testimonio sobre el robo de un supermercado donde ella estuvo presente, no pasó a mayores ya que un compañero se encontraba como civil, es el protocolo- mencione

-¿Dio esta dirección?- asentí -Ella ya no vive aquí desde hace 5 años, se independizó- algo se le vino a la mente -De seguro fue porque tenía dañadas las tuberías y se quedaba aquí, ahorita les daré su dirección- sonreí y ella entro a la casa

-¿Ubicación?, enserió Méndez-

-Lo lamento no supe que decir- sonreí y le di un pequeño golpee en el hombro

-Aquí tienen, en este momento debe de estar trabajando, sale en una hora- asentimos

-Gracias y disculpe las molestias- entro a la casa y nosotros al carro

-¿Qué hacemos?, tenemos que esperar una hora-

-Ir a mi departamento- asintió, al ver la dirección mencionó que estaba algo cerca de su casa, me estacione en mi lugar, mi camioneta la había dejado en el estacionamiento interno y el carro lo usaba Mar

-Te espero aquí, no quiero incomodar- lo miré, antes le tomaría la palabra pero ahora es diferente no me incomoda

-Vamos- sonrió, bajamos del carro, fuimos directo al elevador

-Se ve lindo el barrio-

-Lo es, algo primordial que busque fue estar cerca de mis padres están a 10 minutos, además que tuviera buena seguridad, después de la ruptura comencé a sentir que me seguían que en cualquier momento me volverían atrapar- entrelazo mi mano con la suya dando un ligero apretón

-Lo siento-

-No fue sencillo, pero con mi gente lo supere- acaricio con su pulgar mi dorso, las puertas se abrieron, abrí mi puerta -Bienvenido a mi casa- entramos y no podía dejar de sonreír -Te dolerá la mandíbula-

-Me alegra tanto que has alcanzado cada meta que te has propuesto-

-Soy terco-

-Lo se-

-Siéntate, no tardare- se sentó en el lugar que siempre tomo yo, entre en mi habitación, busque alguna ropa que me había olvidado llevarme, extrañaba tanto mi casa pero debía seguir necesito encontrar las, al salir mire que observaba con detalle la sala

-Aun juegas videojuegos-

-Si, sabes que me gusta jugar…..Aun tenemos tiempo- asintió

-Sigo siendo pésimo- habíamos jugado por media hora y en todas las partidas le gane como los viejos tiempos

-Méndez por lo menos lo aceptas- reímos, la puerta se abrió

-Llamare a la policía- Gaby entro asustado y su “arma” era un baguette, al verme dejo salir todo el aire que contuvo -Me asustaste, pensé que se habían metido a robar- se sentó en medio de los dos

-Ammm puedo pasar a tu baño-

-Claro en el pasillo la primera puerta- asintió y se fue

-¿Qué haces aquí?-

-Sigue siendo mi casa-

-Lo se pero no se supone que tu vida real no existe mientras estas en misión-

-Necesitaba algo, sigues dándole de comer a Tara- asintió

-Doña Lulu se fue a visitar a su hija, solo vino por una semana y se fue, se fue la luz antier por la noche, viene a desconectar algunas cosas para que no se te dañaran-

-Gracias….espera ¿que estabas haciendo aquí por la noche?-

-El nieto de doña Lulu se esta quedando en su casa, trabaja por las mañanas, él cuida de Tara por las tardes noches, vino una mañana porque olvidó algo y casi muero de un infarto por el susto, me invito a cenar como disculpa- sonreí -Flaco quita esa sonrisita, solo es mi amigo- él se merece a alguien que lo quiera, yo no puedo quererlo más allá de la amistad

-Veremos-

-Cual veremos- reímos

-Lamento interrumpir pero ya es hora- asentí

-Debo de irme, me gusto mucho verte-

-A mi también Flaco, espero con ansias el fin del encubierto- al levantarnos me abrazo -De cerca esta pasable- me susurro en el oído, negué sonriendo, me abrazo fuerte y me soltó -Cuídalo-

-Siempre- ambos se miraban, ninguno de los dos bajaba la mirada, que carajo esta pasando

-Vámonos- empuje a Méndez, Gaby iba detrás de mi, los tres salimos, me di cuenta que no tomé la bolsa iba a volver a entrar cuando vi que la tenia entre su mano, ¿Cuándo la tomó? -Nos vemos- sonrió, fue  al final del pasillo y entro al departamento de doña Lulu

-Tenemos 20 minutos para llegar-

-Andando- esta vez él manejo, tardamos 15 en llegar, esperaríamos en el auto, nos estacionamos justo enfrente de la casa

-¿Es muy cercano?-

-¿Quién?- gire a verlo pero su mirada era directo a la casa

-El chico del departamento-

-Si-

-Pensé que te besaría de nuevo-

-Solo fue un pico-

-Yo no….-

-Llego- salí del auto, cruce la calle -Hola, disculpe Rocío Rumas-giro a verme, detrás de mi ya estaba él

-Si- dijo dudosa

-Somos los agentes García y Méndez-

-¿No entiendo?- 

-¿Podemos pasa?- mencionó, asintió

-Siéntense-

-Gracias- nos sentamos juntos y ella enfrente -Hace seis años desapareciste, tus padres levantaron un acta y te encontraron dos meses afuera…-

-Afuera de un restaurante- menciono, su mirada se poso en las flores que estaban al centro de la mesa -Lo se-

-¿Qué pasó en realidad?, sabemos de Bucio- me miro

-¿Bucio?-

-El hombre que te capturo-

-¿Lo recuerdas?- le cuestione

-Lamentablemente si….es casi de la altura del agente Méndez, test blanca, ojos azules, cabello negro- era él a excepción del cabello ahora lo tenía café -Estaba comenzando la universidad, siempre me llamó la atención el modelaje, una amiga llegó con un folleto que se abría inscripciones para una escuela de modelaje al principio no quería, mi familia no podría pagar otra escuela, me insistió tanto que al final acepte lo cual me arrepiento tanto- sus lagrimas comenzaron a caer

-Lamentamos hacerte recordar- dijo él

-¿Podrías continuar?, no te sientas obligada hacerlo-

-Necesito hacerlo, no he hablado de esto con nadie, necesito decirlo- asentimos, suspiro -Fue el martes 17 de Marzo cuando nos tocó ir, la escuela esta en Pranc- es un pequeño pueblo a tres horas de aquí -Habían tres chicas antes que nosotras, iban pasando una por una a la oficina nunca vi que salieran según había una salida por detrás según era para tener orden, mi amiga entró y quedamos en vernos en la cafetería de enfrente, al entrar estaban tres hombres, Reynoso, Guyana y Flams es el tipo que llamaron Bucio- el cabron se había puesto otra identidad -Me pidieron estar en ropa interior, me dijeron que había pasado el filtro, que me llamarían para la segunda etapa, salí por la puerta que me dijeron y recibí un golpe- cerro sus ojos -Al despertar estaba atada y amordazada junto con otras chicas-

-¿Recuerdas cuantas eran?-

-Como 10, éramos 7 chicas y 3 chicos….el tiempo se me hizo largo no se cuanto tiempo estuvimos encerrados sin probar comida, una noche nos sacaran, nos vendaron los ojos pero pude observar por un pequeño espacio que estábamos como en un tipo granero, nos subieron en un camión, fue largo el tiempo al llegar nos bajaron y olía a pan, era como una pequeña casa-

-¿Era casa?- asintió

-Abajo en un sótano teníamos en un pie un tipo de bola de boliche estaba muy pesada casi no podíamos movernos, nos daban de comer un pan con agua, un día nos bañamos….bueno nos echaron agua con cubetas, nos dieron vestidos y maquillaje, nos tomaron fotografías y fue cuando empezó el trabajo, se iban de una en una, cuando me tocó a mi me dijeron lo que tenia que hacer y si se me ocurría hacer algo tenían a mi familia en la mira le harían daño-

-Pero escapaste-

-Si…cuando entró ese hombre me dio mucho medio, lo noqueé con la lámpara y salí corriendo hasta que mis piernas no pudieron mas-

-Hasta el restaurante- asintió -Recuerdas en donde te llevaron-

-Es un hotel que se llamaba “Honey”, corrí derecho hasta una farmacia gire a la izquierda llegue a una iglesia y corrí a la derecha hasta que llegue al restaurante, unas chicas fueron las que llamaron a la policía, estaba en shock-

-Las luces, el ruido, las personas fue mucho para ti, estar tanto tiempo encerrada- mencione

-¿Porqué no les mencionaste esto a la policía?- le dijo Méndez

-Lo único que quería era proteger a mi familia, si decía algo ellos me encontrarían por eso nos mudamos de país, tenemos un año en que volvimos-

-Muchas gracias Rocío-

-¿Lo están investigando?-

-Si-

-¿Por qué yo?-

-Eres la única que ha salido-

-Por favor atrapen a ese bastardo-

-Te lo prometo que lo haremos- ahora más que nunca voy hacer que pague todo el daño que ha hecho.

Salimos de su casa, nos dijo que si recordaba algo más nos mandaría correo, ya en casa pusimos toda la nueva información comenzando hacer rutas de los posibles caminos que hizo Rocío desde su captura.

HelsinkiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora