Lights in the darkness━━ Eleven.

Capítulo 2

"La pista de patinaje".

El avión había llegado a su destino. Lenora, California. Una rubia bajaba de el avión, arrastrando su maleta se dirigió hasta la puerta que daba a la sala de espera.

Los nervios le recorrieron todo el cuerpo, sus manos estaban sudando y su corazón comenzó a acelerarse. Cerró sus ojos y suspiró pesadamente, tratando de tranquilizarse.

El y Will, esperaban nerviosos la entrada de la rubia. No se encontraban solos, Jonathan y su amigo Argyle estaban ahí esperando junto a ellos.

La rubia finalmente entró por la puerta principal. Traía consigo unas gafas acomodadas en su cabello, con una de sus manos arrastraba su maleta y en la otra llevaba un ramo de flores, y su ropa era como la que siempre usaba, cómoda. Buscó con su mirada a los chicos, hasta que una voz la hizo dirigir su mirada hacía aquella castaña que tanto amaba.

—¡Maddie! —llamó El. La rubia dirigió su mirada hacía su novia que la veía con una sonrisa y saludaba con la mano. Ella le devolvió la sonrisa y las dos corrieron hacía la otra.

El lo primero que hizo fue recibirla con un beso en los labios. Maddie gustosa lo correspondió. Cuando se separaron El la abrazó con fuerza. Jonathan, Will y Argyle se acercaron a ellas, mirando la escena con una sonrisa.

—Cuidado, cuidado. —dijo Maddie como pudo. El estaba demasiado emocionada por verla de nuevo, por lo cual la abrazaba muy fuerte. —Estás aplastando tu regalo.

Eleven se separó del abrazo y miró el ramo de flores que traía Maddie en su mano.

—Para ti. —le extendió el ramo y El las tomó con una sonrisa en su rostro. —Las recogí una por una, en Hawkins. —El la miró aún sonriendo. —Sé que te gusta el amarillo, pero pensé que sería demasiado amarillo. Entonces busque una solución y cómo sé que también te gusta el morado, hice una combinación 70/30. —mientras la rubia decía esto, El miraba el mensajito que traía el ramo, que decía "Para El. De Maddie." La castaña dejó de sonreír al verlo, pero luego volvió a su sonrisa.

—Son perfectas, gracias. —contestó El, con una sonrisa. Maddie notó la presencia de su sonriente amigo.

—¡Will! —exclamó la rubia al verlo. Will tenía sus brazos extendidos para abrazarla, Maddie fue hasta a él y lo abrazó. —¿Cómo estas? —le preguntó entusiasmada.

—Bien. ¿Cómo estuvo el viaje? —preguntó.

—Dormí todo el vuelo para llegar con energías aquí. Pero, estuvo cómodo. —respondió con una sonrisa.

Maddie dirigió su mirada ahora hacía los otros dos.

—Hey, ¿que tal? —saludó a Jonathan.

—Todo bien. —respondió Jonathan sonriéndole a Maddie, y luego ella dirigió su mirada de nuevo hacía Will.

—¿Qué es eso? —preguntó Maddie, viendo un rollo que traía Will en sus manos.

—Es algo que estuve pintando. —respondió Will.

—Suena genial. —dijo Maddie sonriéndole.

—Qué buena camiseta, amiga. —habló Argyle con su vista en la camiseta de Maddie. La rubia lo miró un poco confusa al no saber quien era él.