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Sus descalzos pies avanzaban despacio sobre el frío piso, mantenía sus ojos cerrados y chocaba de vez en cuando con algunos muebles, pero los volvía a ignorar y seguía dando un paseo por la habitación, teniendo los ojos cerrados, intentando usar su poder de vidente, como el tercer ojo algo así. Ver el aura de las cosas, ser más espiritual y....

- ¡Oh! - Sus pies flotaron - ¡Son azules! - Exclamó Klaus, abriendo sus ojos y chocando con el techo.

- ¿Azules? - Su novio lo miraba atento desde hace rato.

El otro Ben se despertaba recién por el grito de Klaus y lo miró flotar.

- ¡Sus auras son azules! Aunque la tuya, Beni Berrinche es medio violeta o... no sé que color es ese, pero es bonito....

- Ah... Entiendo, brujito.

Número 6 se acomodó en la cama, tallando sus ojos.

- ¿Qué hora es?

- Son las 7.... Klaus se despertó como 10 minutos antes de las 6....

- ¿Por qué?

- Porque según él, en las mañanas hay más energía espiritual.

- Ah.... Claro....

Klaus cayó entre medio de ellos.

- Perdón.... Aún no controlo esto de las caídas.... levitar es complicado....

Su novio le desordenó el pelo.

- Hora de levantarse o nos van a echar. Solo pedimos una noche.

- Es verdad... - Klaus se estiró - Benerino, ¿cómo es vivir con Cinco?

- Trajo a su novia a vivir con nosotros.

- ¿Su novia? ¿Cinco tiene.... Ah... ¿Hablas del maniquí?

- Se llama Dolores.

El otro Ben se rió, número 6 frunció el ceño.

- Encantador. - Murmuró Klaus.

Al salir del lugar, ambos Ben no podían evitar mirar los descalzos pies de Klaus, preocupados de que fuera a pegar un resfriado.

- ¿Klaus, no tienes frío? - Preguntó su hermano.

- No. - Respondió.

- ¿Vamos a volver a casa?

- Si... Tenemos que arreglar eso.... - Murmuró Klaus.

- Adelántense, los alcanzaré luego. - Ideó Ben Sparrow.

Los contrarios se voltearon a mirarlo.

- ¿A dónde vas ahora? - Preguntó Klaus.

- Quizás debamos pensar por separado. Quiero.... tomar algo de aire, todo esto es bastante que procesar.

- Él tiene razón. - Su hermano ocultó sus manos en sus bolsillos.

- Yo ya he estado mucho tiempo pasando contigo. Tu hermano te extraña, tengan un rato juntos antes de tener que intentar unir nuestros cuerpos.... - Se volteó para irse.

- Oh, bueno.... Supongo que ahora sólo somos tú y yo.

Ben se puso su capucha y caminaron uno al lado del otro de regreso a casa.

- ¿Estás asustado, Benerino?

- Si. ¿Qué hay de ti?

- Petrificado.

- Confía en que todo saldrá bien.

- Siempre que lo hago todo se va al carajo. ¿Quién me puede asegurar que esta será una excepción?

I'm Not HimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora