I'm Not Him

Epílogo

Cuando se regresa a casa, se siente una paz, una tranquilidad. Pero existe un momento en el que vuelves a regresar. Vuelves a ese mismo lugar y entonces te das cuenta.... de que esa casa jamás fue un hogar.

Y te preguntas....

¿A dónde pertenezco entonces?

¿Cuál es mi camino?

¿A dónde se supone que pertenezco?

¿Es complejo descifrarlo? ¿O es tan simple como perderse en esa clara mirada?

Los pájaros volaban y entonaban una melodía, dándole la bienvenida a la nueva mañana.

Una mujer entra a la habitación para despertar con un cálido beso a su hijo.

- Oye, pequeño, levántate. - Pidió la mujer, acomodando sus lentes.

El menor, de 13 años se removió en su cama. Abriendo poco a poco sus ojos, frunciendo el ceño.

- ¿Mamá?

- Ya estás despierto. Levántate, tienes que desayunar y luego ir a la escuela, ¿lo olvidas?

El menor sonrió.

- Si. Tienes razón. - Se sentó en su cama. Mirando su habitación, una habitación normal para un niño de su edad, se miró en el espejo y suspiró aliviado.

Lo había logrado. Se había encargado de que sólo él recordara el pasado. Todos sus hermanos, donde sea que estén, tienen una buena vida y ya no sufren. Eso es lo importante.

Cinco estiró sus manos, sonriendo con emoción. Viviría su infancia, aquella que perdió, tendría una nueva familia y crecería con preocupaciones básicas de un ser humano normal.

- ¡Hijo, apúrate! - Regañó su mamá.

- ¡Voy! - Se vistió rápido.

Estaba seguro de donde fuera que estuvieran sus hermanos, ahora tendrían una muy buena vida. Aunque no fueran a conocerse nunca. Sabía que todos estarían bien.

Al ir camino a la escuela se topo con un hombre fortachon en la entrada a quien reconoció coqueteando con alguien más.

- Luther, has bien tu trabajo, los niños nos ven.

- Los niños tienen que saber que a las esposas se les ama.

Cinco sonrió, saludando al pasar.

- Buenos días - Saludo Sloane, volviendo su mirada a Luther -. Aún ni nos casamos.

- Pero lo haremos pronto.

- Nos conocimos hace algunos meses.

- Es suficiente para mí.

- Eres un tonto.

Cinco sonrió divertido. Quizás si era su destino estar juntos.

El dolor del pasado ahora simplemente se desvanecía.

Allison tenía a su hija, vivía sola con ella, pero era feliz, no necesitaban nada más que la compañía y amor de la otra. Diego y Lila vivían juntos luego de conocerse como un policía y una delincuente en una persecución, ahora esperaban un bebé. Viktor era un músico reconocido de orquesta, aclamado por muchos, conocido como el violín blanco.

Un muchacho corría por las calles mientras reía y se escabullía.

- ¡Jamás me atraparan con vida! ¡Jajajaja! - Reía mientras huía emocionado.

- ¡Detente o te voy a disparar! - Amenazó el oficial.

- ¡Atrévete, Diego, ni a una mosca le...!!! - El disparo al aire lo hizo detenerse.