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Regresaban a su época actual, de vuelta a su hogar, despidiéndose de todas esas pasadas aventuras. Estaban en casa, finalmente, a volver a como todo era antes con su familia. Como siempre debió ser.

Pero, oh, sorpresa. No hay un hogar, quizás nunca existió uno.

- ¿Quiénes son los que están arriba? - Preguntó el kraken.

- Son los Sparrow. Mis hijos. - Respondió Reginald, calmado.

Los había reemplazado. Tras haber hablado con ellos en los 60, los vio ser un verdadero fiasco. Un asco. Así que adoptó a otros siete completamente diferentes, excepto por ese muchacho de ojos rasgados y mirada fría que tenían en frente a quien Klaus no podía dejar de ver y sonreír como un idiota. Hace unos días, su hermana Vanya le había entregado el último mensaje de su fantasmita antes de que se haya ido a la luz. Pero ahora lo tenía en frente, vivo. Ben estaba vivo.

- Benerino, de verdad te extrañé. – Entonó Klaus en su sonrisa.

- ¿Quién... mierda eres tú? – Hizo énfasis en cada palabra.

- ¡Beni! ¡Soy yo! ¡Klaus, tu hermano! - Alzó sus brazos emocionado, queriendo abrazarlo.

Diego posó una mano sobre su hombro, sujetando con cierta fuerza, deteniéndolo.

- Klaus.... No es nuestro Ben.

Klaus chasqueó la lengua, soltándose del agarre de su hermano y acomodándose su chaqueta.

- Sigue siendo Ben, dentro de él sigue siendo nuestro Benerino. - Siguió avanzando, acercándose a quien en otra línea temporal fue su hermano.

Este Ben lo miró con cierto nivel de desconfianza y desagrado. ¿Acaso este tipo loco y de aspecto drogado sabía siquiera quien era en verdad? ¡Número dos de la academia Sparrow! ¿Debería sacar a su monstruo interior o escuchar sus estupideces?

- Beni mío, mírate, estás vivo.

- ¿A qué se refieren con "estás vivo"? ¿Qué insinúan? - Preguntó con cierta molestia, tensando su mandíbula.

- Mira esa cicatriz, te hace ver.... muy macho~

- Cierra esa maldita boca.

- ¡No! ¡Tú cierra la boca y abraza a tu hermano!

Antes de poder tocar siquiera a Ben, este le plantó un puñetazo al contrario que lo hizo salir volando y rodar dramáticamente por encima de la mesita de centro del salón.

Klaus se quedó en el suelo por unos segundos, teniendo el leve deja vu de cuando su Ben lo golpeó por primera vez siendo un fantasma. Estaba tan shockeado como en ese momento.

Escuchó a sus hermanos quejarse contra el Ben y luego el otro negro, que parecía ser su número uno, involucrarse y separarlos. Klaus se quedó en el suelo, sin planear moverse. Y es que sentía un extraño sentimiento, quizás sea por no haberse despedido de su verdadero Ben.

- Klaus... ¿Estás bien? - Vanya se acercó para ayudar a su hermano a levantarse.

- Estoy perfecto, hermanita. Estoy acostumbrado a que me golpeen, no te preocupes.

Vanya intentó sonreírle, pero solo logró crear una mueca. Allison se acercó a su hermano, con la misma preocupación.

- ¿Estás bien?

Klaus asintió.

- Les voy a pedir de forma amable, que se retiren de nuestra casa ahora. - Pidió Marcus, el número uno de Sparrow Academy.

Klaus se sintió indignado, habían salvado el mundo dos veces y nadie los había felicitado, y ahora que por fin volvían a su época, unos.... intrusos impostores los reemplazaban, en especial ese impostor de Ben. No quería ni mirarlo de nuevo.

I'm Not HimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora