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Ambos se encontraban acostados en la cama king size de Jungkook. Jungkook recostado en el respaldero y Jimin desparramado cómodamente en su pecho.

Aún tenía demasiadas dudas y preguntas sobre todo, así que después de un tiempo pensándolo, decidió compartir aquello con Jungkook.

La comunicación en una relación era esencial.

— Mhm, ¿Jungkook? —inquirio.

— ¿Si cariño? —casi casi le agarra un ataque de ternura al escuchar el mote, pero se limitó a sonrojarse furiosamente.

— Uhm, yo... necesito aclarar unas cosas.

— Oh, estaba esperando a que estés listo para hablarlo. —Jimin asintió lentamente, pensativo. Eso ponía más fácil la cosa.

— ¿Qué soy? Antes estaba muy seguro de ser humano pero ahora... con todo éste cambio todo es muy raro.

Jungkook se quedó callado un momento, pensando en sus siguientes palabras.

— Eres un lobo, un omega; los lobos tienen estatus, el alfa; quien guía y protege a la manada, son más fuertes y grandes que el resto, el omega; quien se encarga de la tranquilidad y la toma de desiciones importantes, ayudan a calmar y a traer paz, y los betas; lobos que no pueden distinguir aromas como los dos primeros pero son casi tan fuertes como los alfas, son su mano derecha.

— Es... un poco complicado.

— Todo es muy complejo, pero hay muchas cosas que han cambiado con los tiempos, pero es más fácil comprenderlo si lo vives.

— Y... ¿lo de hace rato?

– ¿A que te-, oh.

Oh.

Jungkook carraspeó y se sonrojó, aunque estuviese avergonzado era su deber informar a su pareja acerca de estas cosas. Era inaceptable dejarlo en la ignorancia.

— Bueno, como te dije, tu eres un omega. Los omegas tienen la capacidad de embarazarse sin importar el género, sea mujer u hombre, ambos poseen uteros y cómo resultado de esto... ambos lubrican al estar excitados.

Ambos se quedan callado después de esa breve explicación. Jimin estaba en un semi estado de shock.

SE PODIA EMBARAZAR.

UN BEBÉ.

ESO ERA IMPOSIBLE.

Bueno, hasta ahora.

Un bebé.

No sabía por que era, pero el tan solo pensar en eso hacia que algo dentro de él se removiera. Eso... ¿esa imagen mental era de un lobito blanco moviendo su colita?

Qué.

— Creo que estoy loco, esta sería la primera etapa de la esquizofrenia.

— ¿Eh?

— Estoy sintiendo algo parecido a las mariposas y veo a un lobo blanco en mi mente.

— Ees tu omega, es tu espíritu animal. El cambiaformas no es sólo el humano, también es el lobo, son uno sólo.

— ¿Cómo dices que dijiste? —Jungkook rio y atrajo a Jimin hacia su pecho nuevamente, recostándolo.

— Creo que han sido suficientes preguntas para tu cerebrito, date un tiempo, no te fuerces a entender todo de una ¿si, cariño?

Y con eso último Jimin no se pudo negar, literalmente se derritió como mantequilla en sus brazos y se dejó llevar por el arte de los mimitos y besitos.

Destiny ©Kookmin auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora