VIII

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1/3♡ disfruta la maratón.

Los extraños y nuevos pasillos que estaban frente a él eran realmente extraordinarios, extrañamente ese lugar se le hacia vagamente conocido.

Quizás alguna vez escuchó hablar de ellos o probablemente leyó algo sobre estos.

Se arriesgó a lo desconocido y decidio dar el primer paso.

Caminó y caminó por el largo pasadizo, en las paredes habian retratos de dos personas pero extrañamente estas no tenían rostros.

Es decir, tenían huellas de ¿garras? o más bien parecian espadas, partiendo las pinturas de esas dos personas abrazadas y otra parecia que se daban un beso.

Quería saber quienes eran aquellas dos personas pero no se veian sus rostros por los cortes en sus caras.

Con la yema de sus dedos acarició levemente las pinturas, parecian ser infinitas pues a lo lejos seguian y seguian las pinturas.

¿Por qué nunca había visto aquel lugar?

Estaba todo con un hilo de polvo, habia polvo por doquier.

-Bonito...- dijo para si mismo, en si el lugar se veia astral, con un aura amorosa pero a la vez se sentia pesado el ambiente.

Al terminar el pasillo había una pequeña puerta dorada.

Dudó si debería entrar, probablemente ese era un lugar que su padre mantenia en secreto, o talves su madre. No lo sabia.

Pero podia sentir que lo que estaba haciendo no le traería nada bueno.

Colocó su mano en la perilla, listo para abrirla.

Respiró profundamente...

Al girarla escuchó...

-¡¡Han Jisung!!-

"Y si muero...¿Cómo me recordarás...?-

(...)

-¡Llegue!-

Una hermosa doncella que vestia un vestido color rosa luciendo su hermoso vientre de cinco meses.

-¡Amor!-

Nancy sonrió anpliamente al ver a Minho llegar.

Caminó hasta el mayor y ambos se recibieron con un fuerte abrazo y un beso en la mejilla.

-Te extrañe mucho- dijo el arquero, luego miró el vientre de la jóven y sonrió hablándole a este- y a ti también te extrañe mi bebé- beso el vientre de la jóven, esta sonriendo por lo tierno del acto.

-¿Cómo estuvo tu día cariño?-

Nancy caminó delante de Minho para guiarlo a la cocina y que pudiese cenar.

-Creo que no estuvo tan mal...fue...-hizo una leve mueca- extraño...

Nancy sirvió la comida mientras asentía con la cabeza a lo que decia el mayor.

-Gracias, linda-

Tomó asiento frente a su gran amor.

-¿Y Felix?- preguntó.

Minho se encogió de hombros comenzando a comer.

-Creo que esta en el castillo, sabes que debe servir al nuevo rey.-

Nancy entre cerró los ojos.

-Claro, al nuevo rey.

Minho dejó la cucharada que llevaba hacia su boca a la mitad. Con mirada retadora observo a la dama frente a él.

𝑬𝒍 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆 𝒔𝒊𝒏 𝒗𝒐𝒛 [Minsung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora