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-¡Oh!, lo siento, lo siento no queria molestarlos...- Felix hizo una reverencia a su majestad y a su hermano, sin embargo no se retiró- Su majestad necesito informarle sobre un hecho que acaba de suceder cerca de las caballerizas...-

Minho miró a Felix y luego a Jisung quién también volteó a ver al mayor.

-Ve si quieres...- dijo amablemente a lo que el menor negó abrazando más fuerte a Lee.

Este por supuesto, no se negó y lo abrazó todavía más fuerte.

Felix por otro lado no hacia caso omiso a lo que veia, sabia cosas con solo ver acciones.

-Puedo decirle más tarde si gusta su alteza...-

Jisung no respondió solo abrazó más fuerte a Minho y se ocultó en el hueco de su hombro.

Felix tomó aquello como un si, a lo que inmediatamente le sonrió calidamente a Minho y se retiró.

Segundos más tarde Minho decidió romper el silencio tan cómodo que se había formado.

-Necesito que confies en mi, mi niño...- sintió que habia suficiente confianza ya como para tomar entre sus fuertes brazos al menor, lo apretó tan fuerte que sentía que podían ser una persona- cuéntame que te hace mal y que te hace bien, te prometo que cuando tus dias se vuelvan grises- se separaron del abrazo y el mayor colocó sus manos en las mejillas del menor mientras Jisung pegaba su frente con la de Minho y mantenia sus ojos cerrados disfrutado del tacto- estaré yo con todos mis colores-

-Gracias Honnie...-

El corazón de el arquero se detuvo por unos largos segundos, sentia que podía levitar con solo volver a oír aquellas dulces palabras saliendo de aquellos dulces labios.

Cerró sus ojos y se dejó llevar por el aroma del menor.

-Debes dormir, pasaste tres días en cama y aunque debes salir y tomar aire, sigues débil y debes alimentarte bien antes de salir-

Jisung se levantó del regazo de Minho rápidamente y lo veia con terror.

-¿Tres días..?- intentó sonar alto pero era, por obvias razones, imposible.

El arquero sonrió compresivo levantándose de la cama y caminando hacia Jisung para volver a abrazarlo, el príncipe no se negó en ningun momento.

Es como si su cariño seguía ahí, su necesidad de seguir juntos.

-¿Recuerdas que de niños anhelabamos ser adultos?- preguntó acariciando la cabellera del menor mientras este abrazaba su cintura.

-Lo recuerdo...- rió por lo bajó.

-Y ahora solo deseo volver a ser aquel niño inocente que no sabia nada del am...- se asustó por lo que estuvo apunto de decir- de lo duro que seria ser adulto...- "corrigió".

El abrazo se deshizo cuando el menor caminó hasta su cama para tomar su pequeña libreta y escribir.

-"¿Entonces iniciamos con nuestra amistad de nuevo...?"- luego escribió algo al reverso de la hoja, la entregó al mayor.

Minho la comenzó a leer y sonrió asintiendo.

-Antes necesito que me hagas una promesa-

Jisung mordió su labio superior nervioso mientras dudaba si debía prometer algo que talves no pudiera cumplir.

-Claro...- se arriesgó.

-Jamás finjas estar bien para mi, a mi cuéntame todo lo que te este causando dolor.-

Jisung bajó la mirada, sentia de pronto inmensas ganas de llorar y cómo no, si le mintió a Minho, le a mentido desde el día en que llegó.

-Esta bien...-

𝑬𝒍 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆 𝒔𝒊𝒏 𝒗𝒐𝒛 [Minsung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora