𝑬𝒍 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆 𝒔𝒊𝒏 𝒗𝒐𝒛 [Minsung]

XXII

"Pase mucho tiempo pensando en que hacer cuando te sintieras triste, quiero protegerte...déjame protegerte"

-¿A dónde vas querido?-

Minho se dio la vuelta y caminó hasta Nancy besando su mejilla en forma de despedida.

-Iré al palacio para que Jisung sepa que Dorie esta bien, quien sabe- se encogió de hombros sabiendo que lo que haría daría resultados- talves y hable con el rey para decirle que este gato es un obsequio de mi parte para su hijo y pueda dejar que lo tenga- dijo decidido.

Sabia que Kim no negaría una petición suya, al menos así haría feliz a su niño con ojos color miel...

Más tarde el arquero iba llegando en su corcel al palacio, bajó con el felino en brazos.

Pero algo extraño paso, vió a muchos de los trabajadores del reino a su hermano, y a sus hermano buscar quien sabe que por todos lados.

Dudoso pero preocupado decidió llamar a Felix quien corria de un lado a otro.

-¡Hey! ¿Qué sucede, por qué hay tanto movimiento?- Felix caso lloraba por lo nervioso que se veia, preocupando más a su hermano mayor.

-¡Es Jisung!-

Inmediatamente el corazón de Minho se aceleró y su alma abandonó su cuerpo.

-¿Qué...qué pasa con Hann...con el príncipe?-

-¡Desapareció Minho! ¡Jisung no aparece por ningún lado y lleva mucho tiempo fuera de casa!- El pecoso tomaba su cabello frustrado- ¡Sabes que él no es así, no se iría así por asi!-

-Él no es así...- dijo con su vista perdida en la nada, parpadeo múltiples veces levantando la vista- ¿Han buscado fuera del reino?- Felix asintió- ¿El bosque?-

-¡Hay caballeros buscandolo ahí...!- sonaba alterado.

Entonces como si una chispa de luz se hubiese encendido en su cabeza, recordó aquel lugar remoto y secreto que tenían ambos amigos...

Entregó el felino al menor y salió corriendo sin decir palabra alguna.

(...)

-¡Jisung!- corría desesperado por el bosque- ¡Jisung!- las gotas de agua provenientes del cielo comenzaron a caer una tras otra- ¡Hannie!-

Corria tan apresurado que no notó una roca en su camino la cual lo hizo tropezar y caer de frente.

-Mierda...- no duró mucho en el suelo pues buscar al príncipe era su único objetivo.

Sigui y siguió hasta que por fin había llegado al lago. Corrió por el puente y miró a su alrededor pero no habia rastro del menor.

-¡Jisung!- nada- ¡Principe Han!-

Entonces algo, algo lo hizo querer ver hacia el agua y pudo ver un trozo de tela rosa...era aquel pañuelo que recuerda de cuando era niño.

El pañuelo que la reina Mina habia dado a su pequeño retoño.

-No...mi niño...-

No se quitó nada de su atuendo y asi se lanzó al agua.

Ya dentro no lograba localizar al menor, su desespero era notorio que lo estaba haciendo inperventilar ocasionando la necesidad de subir a la superficie por algo de aire.

Nadó hasta lo profundo y pudo ver al fin un pequeño cuerpecito inmóvil.

Se puso feliz de haberlo encontrado pero a la vez temia lo peor.

Nadó y nadó hasta que tomó la mano del menor y cuando quiso jalarlo no pudo lo cual lo desconcertó, miró que podía ser y Jisung tenia atado un trozo considerable de metal al pie junto a una cadena...