Encerrados

Cap. 12

- Dante -Carina se separa con sus manos en el cuello de Dante.

- No -la besa de nuevo.

Ella sonríe- No, ¿qué?

- Vas a arruinar el momento -la toma del mentón y profundiza el beso.

- Eso no es cierto -se separa.

Alza una ceja- Apuesto a que inicia con tenemos y termina con hablar con el resto.

Carina sonríe divertida- Tenemos que hablar de lo que hemos descubierto.

- No quiero -frunce el ceño.

- Tenemos que contarles lo del cartel -alza las cejas y Dante suspira sonoramente.

- "Tenemos", solo sabes decir eso -apoyan sus frentes.

- Eso no es verdad -murmura fingiendo que está ofendida.

- Vaaale, avisemos a los demás -une sus labios antes de separarse de nuevo.

Deciden llamar a Beatrice porque es la que más sabe del tema. Por alguna razón piensan que ese cartel tiene algo que ver con el asunto del psiquiátrico, o del pueblo tan misterioso.
Entonces Beatrice responde a la llamada desde muy lejos y con la voz agitada.

- Soy Carina, tenemos que hablar de...

- ¿Sí? ¿Qué? -le murmura algo a otra persona y no parece nada contenta.

- ¿Beatrice? -pregunta confusa- ¿Qué estás haciendo?

- Ordenar mi armario, ¿por? ¿Ha pasado algo?

- ¿Sabes de algún cartel que diga Rinchiuso vincula? -pregunta Dante y Carina se pega mentalmente porque Beatrice no quería que se acercara a él.

- ¿Ese es Dante? -Carina maldice en voz baja- ¿Carina?

- Ehh, sí sí... estábamos... -pero no se le ocurre nada y Dante sonríe divertido.

- Céntrate -dice este- ¿Sabes algo de un cartel así?

- Me suena haberlo visto escrito en alguna parte -murmura- Rebuscaré en los documentos de mi padre.

- Está bien, cuando sepas algo nos dices -se despide Carina.

- Vale, adiós -se despide también y de nuevo suena desde lejos riñendo a alguien- ¡Que eso no va ahí!

Carina cuelga sonriendo y negando con la cabeza. Pero se ha dado cuenta de que vuelve a estar a solas con Dante y se pone nerviosa otra vez porque literalmente se acaban de besar por primera vez.

- Bueno... yo debería de irme a casa -murmura la pelirroja y se rasca la nuca.

Dante sonríe- Sí, yo también...

- Ya nos veremos, por ahí... -se despide nerviosa.

Sin embargo Dante la atrae del cuello y la vuelve a besar- Hasta mañana.

Ella alza el dedo índice colorada- Me debes información.

Beatrice se había colado en la biblioteca de su padre para rebuscar en historia antigua. Así que ya sabía a qué se refería ese cartel. Y claramente tiene relación con el psiquiátrico y con toda la niebla que rodea el pueblo.

Así que todo lo que ha descubierto se lo cuenta a sus amigos en el recreo al día siguiente.

- Dinos, ¿qué pasa? -exclama Iván impaciente como siempre.

- Aún no, falta Adriano -le dice Beatrice justo cuando este hace acto de presencia a paso apresurado.

- ¡Por fin! -exclama Iván y el resto ruedan los ojos.