𝓑𝓪𝓭 𝓛𝓾𝓬𝓴 🦋 𝓶𝓲𝓷𝓵𝓲𝔁

[✐]Capítulo 23

『Minho』

—¡Amigo! ¿A dónde vas? — me preguntó Chan tan pronto me encontré con él a las afueras del edificio de medicina.

Me fue imposible ignorarlo por lo que me detuve y esperé por él.

—¿Qué te sucedió?

—Nada...

—Sé que algo pasó porque tu ceño está fruncido y tu mirada no brilla como siempre lo hace— me interrumpió —Sabes que puedes contar conmigo, ¿cierto?

No hay duda sobre el amor de persona que es Chan. Él siempre ha sido una buena persona conmigo al igual que el resto de mis amigos, sin embargo, la conexión que tengo con el extranjero es bastante única.

—Me enteré de algo que me dolió mucho— confesé —Pensaba que podía tener una relación seria con una persona que realmente no estaba interesada en mí. Ese chico solo estaba en busca de tener un amorío con otro chico para no sé qué cosa en la que deseaba tener éxito. Fui un completo estúpido.

—¿Le preguntaste acerca del motivo que lo orilló a desear tener un amorío contigo?

—No. No lo hice porque no me interesa— aseguré. —Él me atrajo bastante y a pesar de no haber pasado muchos momentos con él, no pude evitar sentir una atracción que nunca antes había experimentado con nadie más— admití —Realmente quería darnos una oportunidad, pero todo fue una mentira.

—Quizá entendiste mal...

—Channie, yo mismo lo escuché hablando con su amigo en una ocasión que lo fui a buscar para pedirle salir a comer.

—Me parece muy difícil aceptar el hecho de que Félix sea esa clase de persona porque yo lo conozco bien y nunca antes se ha visto involucrado en problemas— aseguró —De hecho, tengo entendido que siempre tiene mala suerte en las relaciones por lo que decidió buscar ayuda.

—¿Qué clase de tonterías son esas? — no pude evitar preguntar.

Chan se encogió de hombros y dijo—: Cada cabeza es un mundo. Yo creo que lo ideal es que hablen sobre lo sucedido porque será peor alejarse sin siquiera saber lo que realmente sucedió y lo que pudo haber sucedido. ¿No lo crees?

—¿Por qué siempre dices cosas tan acertadas?

—Es un don que tengo.

"¿Será buena idea volver a buscar a Félix para dejarle explicar lo que realmente tenía en mente desde el primer encuentro que tuvimos?", no pude evitar preguntarme en silencio mientras caminaba al lado de Chan hacia el estacionamiento.

Evidentemente, nos hizo falta hacer uso de la comunicación y honestidad a ambos y, de eso no hay ni un poco de duda por lo que considero que lo mejor es aclarar todo para evitar arrepentimientos innecesarios en un futuro no muy lejano.

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Esperé dos días para tomar las fuerzas necesarias y fui en busca de Félix al edificio de ingeniería porque ya no puedo perder más el tiempo ya que me siento peor con cada segundo que transcurre.

Me detuve a las afueras del edificio y esperé con paciencia hasta que me encontré con el chico llamado Hyunjin, el amigo del pelirrubio, así que, caminé hasta él y cuando se percató de mi presencia, se detuvo en seco y me miró con curiosidad.

—¿En dónde está Félix? — le pregunté tan pronto me detuve frente a él.

El chico se encogió de hombros.

—No he venido para discutir con él, sino al contrario— le aseguré —Necesito que aclaremos todo esto por el bien de ambos.

—Félix es un chico extremadamente tierno, amoroso, tímido en algunas ocasiones, amigable, humanitario, humilde y no terminaría de hablar sobre lo bueno que es, así que, iré directamente a hablar sobre las malas decisiones que tomó y que lo llevaron hasta a ti. ¿Tienes tiempo para ello?

—Por supuesto. Soy todo oídos.

Hyunjin asintió y señaló una de las bancas que se encuentran libres por lo que decidimos ir hasta ella y tomamos asiento.

—Él estaba cansado porque siempre ha tenido mala suerte con todas sus relaciones y es por ello que fue en busca de una adivina que le ayudaría a mejorar su pésima suerte en el amor. Estaba muy convencido de que haría todo lo que le había sido dicho para poder ser libre y entonces emprendió la búsqueda del chico ideal que le fue dicho por la adivina. Te conoció y tan pronto se encontró con tu presencia, me quedó claro el hecho de que apareció un interés verdadero en ti que él confundió y no supo exactamente cómo manejarlo porque...

—Porque quería acabar con su mala suerte y también quería intentarlo conmigo, pero no podía simplemente terminar con todo sin antes llevar a cabo todo lo que le había dicho la adivina para poder ser libre. ¿Estoy en lo correcto?

—Es correcto. Félix se encuentra muy confundido en estos momentos— admitió —Me duele verlo en ese estado, pero no puedo hacer nada más que escucharlo, apoyarlo y estar a su lado puesto que debe entender que eso ha sido el resultado de los caminos y decisiones que tomó.