Soulmate| jjk. ✓

𝚍𝚒𝚎𝚌𝚒𝚜é𝚒𝚜

JungKook podía sentir como su sangre se congeló al momento de escuchar la tarde de YoonGi, en la que su padre había estado involucrado, y ahora entendía porqué se había ido así de la mesa cuando él mintió. Su padre lo sabía, sabía que su hijo no había pasado la tarde con TaeHyung. De igual manera, el menor pensaba hacerse el idiota y pensar una mentira aún más grande para cubrir la mentira anterior, mientras tanto, no pensaba ir a hablar con su padre y decirle que había mentido.

A él y sus hermanos les enseñaron que las mentiras estaban prácticamente prohibidas en esa casa, sus padres detestan las mentiras, más que nada su madre, y sabía que eso podía llevarlo a un gran castigo. Por ese motivo JungKook no era un experto en mentiras, sus hermanos estaban igual, hasta MinGan, que por muy malo que parezca, mentía pésimo.

De por sí no hay familia que le gusten las mentiras, ningún padre le enseñaría a su hijo cómo mentir cuando es algo que, de cierta forma, es malo. Sí, de vez en cuando una pequeña mentira, una mentira blanca te puede salvar, pero el mismo JungKook sabía que en cualquier momento se le irían las cosas de las manos. Lo que comenzó siendo una mentira de "iré a pasear solo por el bosque" quién sabe en qué se convertirá dentro de meses o años, tampoco quería llegar al punto de ocultar su familia o algo más extremo.

Esa noche el alfa durmió poco y nada, pues la culpa le estaba matando la cabeza, haciendo que sus sueños se relaciones a lo que estaba viviendo últimamente. En todos esos sueños sus padres descubrían las mentiras y querían hacerle daño a Valery, por lo que JungKook se despertaba asustado y sudando, hasta que escuchaba los pequeños ronquidos de YoonGi a su lado y se daba cuenta que no le harían nada a ella.

Por parte de Valery, ella había aprovechado la tranquilidad y el silencio que habitaba su castillo en las noches para leer un poco acerca de los licántropos, si estaría con uno quería saber cómo tratarlo y demás, porque así como hay mitos de los vampiros también los había de los hombre lobos. No sabía si el mito de la luna llena era real, mucha gente decía que sí, pero ninguno se acercó a uno del otro lado para confirmarlo, y podía existir la posibilidad de que sea falso, al igual que esa estupidez que el ajo le hace mal a los chupasangre.

Se enteró de varias cosas de la raza de su alma gemela, como que podían llegar a ser muy posesivos y agresivos cuando tenían momentos íntimos, lo que la llevó a ponerse nerviosa con las mejillas sonrojadas cuando su imaginación voló un poco, así que tuvo que detener su lectura por unos minutos hasta que volvió a abrir el libro, pero en otra página. Continuó su lectura hasta que llegó a algo que le interesó.

"El celo de los licántropos es un suceso que se da una vez por mes y dura entre cuatro días a una semana, varía por persona. En esos días lo escencial es otorgarles supresores, los cuales calman sus ansias de mantener contacto íntimo entre alfa-omega, alfa-beta, beta-omega. Su fertilidad aumenta un 80%, por lo que es normal que una pareja busque hijos en ese lapso de tiempo.
Los primeros síntomas son; sudoración, pupilas dilatadas, colmillos más notorios, excitación, entre otros."

La vampira no tenía miedo a eso, pero sí le atemoriza saber que JungKook quisiera pasar un momento así con ella, puesto que su experiencia es nula, y tampoco quisiera que él la lastimara por no estar en todos sus sentidos. Terminó negando con la cabeza mientras dejaba el libro a un lado y se preparaba para dormir un poco, agradecía que no era una necesidad dormir, porque sino hubiera perdido horas valiosas para conciliar el sueño.

Cerró los ojos y el momento de esa tarde le llegó a la mente, sonrojandose al instante. No sabía lo que hacía, parecía fuera de sí marcando el cuello de él en el medio del bosque, sin importarles que alguien podía verlos, o peor, que los padres de JungKook vean esas marcas y lo manden al calabozo. Su idea principal era que el acompañante de celos de su alma gemela vea esas marcas, para que sepa que ya tiene a alguien más, pero no comprendía de dónde salió esa actitud tan posesiva de ella. De verdad estaba avergonzada y no sabría con qué cara ver a JungKook al otro día.