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El concepto del plan aparentemente parecía sencillo: Salir de esta ratonera de uniformes aburridos y soldados con cara de haber pisado una mierda. El problema es que no sabemos en qué lugar del planeta tierra nos encontramos y eso iba a ser un gran inconveniente una vez que estuviéramos fuera. Pero improvisaremos sobre la marcha.

Mi parte estaba hecha: coger las armas necesarias para poder salir y encontrar una vía de escape. Ahora tocaba la parte de Coco: robarle la identificación a Mery. No nos sentíamos cómodas con esta segunda parte del plan, pero nuestra amiga lo entendería tras leer la carta que habíamos escrito entre las dos donde la explicamos la necesidad de salir de aquí. Además no dudaba de que en cuanto estuviéramos fuera nos encontraría.

Espero con impaciencia en el cruce de pasillos en el que habíamos quedado. No tengo reloj y aunque lo tuviera no podría ver nada en la oscuridad.

Su voz me llega en un susurro y suspiro de alivio al ver su silueta aparecer.

—¿Lo tienes?

—Si...Mery nos va a matar por esto.

—Lo entenderá. Puede que nos cancele la suscripción a DoramasFlix por un tiempo pero lo entenderá.

Veo a Coco encogerse ante la mención de nuestra página favorita para ver las series de romance Koreano que tanto nos gustan.

—¿No te preocupa que pongamos en nuestra contra a esta organización?, no necesitamos más enemigos —dice Coco.

—Me preocupa más el tiempo que estamos perdiendo aquí metidas y la imagen que estamos dando de cobardía.

—No todo se trata de Leo, Lina. ¿Quieres recuperar tu vida o ir tras él en una estúpida lucha de meadas heteropatriarcales? Porque sé que eso es precisamente lo que pretendes. A mí no me engañas amiga, y déjame decirte que la venganza no es la solución.

—No me vengas ahora con el heteropatriarcado por favor. No se trata de eso.

—¿A no? Pues parece que lo que quieres es medir quien la tiene más grande, si tú o Leo. Y déjame decirte que poco podemos hacer tu y yo frente a él y todo el apoyo que tendrá de su organización.

—Baja la voz Coco, y por cierto ¿a dónde nos dirigimos?, la salida no es por aquí. —La conversación que estábamos manteniendo me había distraído del camino que debíamos recorrer, pero mi amiga parecía dirigir sus pasos con decisión y de pronto me di cuenta de la ubicación en la que estábamos.

—No...ni hablar. No pienso sacarle.

—Por favor Lina. No puedo dejarle aquí.

—¿Estas loca?, si te preocupaba poner a todos en nuestra contra, así es como lo conseguirás. ¡Él es un preso de guerra, joder!

—No duraríamos ni cinco segundos fuera de aquí sin él, y además sabes que nos puede ayudar contra Leo.

—Nos conduciría hacia Leo, no contra Leo —le espeto.

—Eso no lo sabes. —Hace una pausa sabiendo que no vamos a llegar a ningún lado con esta discusión. —Por favor Lina...confía en mí. Le conozco, sé que no nos hará daño, antes era tu amigo.

Lo valoro unos segundos cayendo finalmente en la aceptación de que su ayuda para salir de aquí y ubicar a Leo sería una gran ventaja para nosotras.

—Está bien —digo finalmente, viendo la sonrisa que se instala en su expresión. —Pero te juro que como nos traicione, le diré a Mery que cancele de por vida todas las suscripciones a los doramas.

Cuando me encuentres (II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora