HACKE 34

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El castillo estaba sumido en un silencio desagradable, el aroma a cítricos y tabaco era fuerte se esparcía por algunos pasillos del castillo.

Las omegas nivel seis que estaban en el castillo fueron retiradas del mismo y las omegas de la selección seguían en sus habitaciones, lamentablemente no pudieron salir a tiempo, los guardias de las omegas ahora estaban en la sala común ya que el Rey dio la orden de abandonar sus puestos.

Jungkook fue el ultimo en dirigirse a dicha sala, con el corazón bombeando al mil, por su pelinegra, no pudo hacer nada ante la orden y la voz de mando del Rey Namjoon.

Jungkook chasqueo la lengua y se recriminaba por haber dejado a Lisa sola.

El Rey y el príncipe Taehyung quedaron solos en el pasillo de las habitaciones de las omegas, exactamente delante de la puerta de Lisa, mirándose uno al otro, Taehyung con los ojos en dorado, el Rey lo miro con desdén, sin mostrar su alfa.

-Si entras en esa habitación Taehyung, ella se va... ¿me entiendes? – Dijo el rey a manera de ultimátum

No era justo, para nada justo, el príncipe estaba bajo los efectos del Celo, su alfa estaba dominándolo y lo único que quería era estar con su omega.

Lisa estaba recargada en la puerta con su corazón a mil por hora escuchado la discusión entre el príncipe y el Rey, no, no era justo, ella no quería entregarse al príncipe de esa manera, no lo atendería en su celo como si fuera una cualquiera, no lo merecía.

Se dejo caer hasta que quedo sentada, con la espalda recargada en la puerta y sus rodillas pegadas a su pecho.

-¿Y bien? A tu habitación ahora o entra y ella se va... -advirtió el Rey

El alfa de Taehyung gruño con fuerza, miro a la puerta de Lisa y se encamino a ella, tomo el pomo de la puerta y en el rostro del rey se dibujo una sutil sonrisa.

-Veo que has tomado tu decisión... me iré ahora, puedes estar aquí los tres días de tu celo, pero al cuarto día ella se va... -El rey dio media vuelta y salió por el pasillo

Taehyung cerro los ojos con fuerza y trago el nudo que se había formado en su garganta.

-¡Taehyung! -dijo el Rey desde la distancia -Cuidado y la marcas, porque de ser así, te arrepentirás...

El rey termino de doblar en el pasillo para dirigirse a sus aposentos, ahí una Jisoo preocupada lo esperaba

-Namjoon! Diosa Luna ¿Qué pasa? -Pregunto de inmediato la Reina, mientras Namjoon se despojaba de su bata para regresar a la cama. Tomo a Jisoo por la cintura y la encamino a la cama

-No es nada amor mío, una simple revuelta entre los guardias, parece que necesitan a su Rey para todo

Jisoo, se le quedo viendo aun preocupada, no le creía mucho, pues en todos los años que llevaban juntos jamás los habían interrumpido en medio de la noche por un simple revuelo de guardias

-Estas... estas seguro? -Dijo Jisoo entrando ya en la cama. Namjoon la cobijo y le dio un beso en los labios

-Claro que si mi amor, anda, descansa... -Jisoo se recostó aun angustiada y el Rey se metió del otro lado de la cama, esperaba que a estas alturas Taehyung ya se encontrara en el cuarto de Lalisa. Apago la única vela que alumbraba el cuarto y se giro para abrazar a Jisoo por la cintura, pegándola a su pecho.

Lisa se removió de la puerta, ya que un leve empujón la movió, trago duro y las lagrimas ya bajaban por sus mejillas. Aun en el suelo de rodillas vio cómo se abrió la puerta, dando paso a Taehyung con las mejillas rojas, los ojos brillando en dorado y un fuerte aroma a cítricos y tabaco.

Lisa tembló en su lugar y solo agacho la cabeza a modo de sumisión, su omega seguía dormida en su interior, aun que no faltaba mucho para que el efecto de la infusión pasara.

-Pequeña Lalisa -dijo el príncipe en cuanto entro y la vio ahí de rodillas, dio dos pasos mas hacia ella y cerró la puerta detrás de el

-Por favor, no me hagas nada -Fue lo que dijo Lisa aun con la cabeza agachada y las lagrimas bajando por sus mejillas.

Taehyung llego hasta ella y se arrodillo enfrente de Lisa, la tomo por la barbilla para levantarle el rostro. Lisa Jadeo de sorpresa al ver al príncipe así de cerca con esos enormes ojos penetrantes en dorado, jamás había visto algunos ojos así de intimidantes.

-Mi amor... no soy capaz de hacer nada que tu no quieras, estoy en celo, pero aun sigo siendo yo -Le dijo Taehyung susurrándole al oído y hablándole con la voz un poco mas rasposa de lo normal. -Mi alfa te reconoce y por eso mismo no seriamos capaces de dañarte

Taehyung enterró su nariz en el cuello de Lisa, ahí un leve olor a sandia se hacia presente.

Delicioso

Los vellos de Lisa se erizaron de pies a cabeza al sentir al príncipe aspirar en su cuello. Tenia miedo, pero de alguna manera las palabras de Taehyung la tranquilizaron, confiaba en él, confiaba en que no le aria nada en contra de su voluntad, pero tenia miedo que cuando su omega despertara por completo ella misma le pidiera estar juntos.

Taehyung se puso de pie y levanto a la pelinegra del suelo, la cargo a modo princesa y la llevo hasta la cama, la dejo ahí suavemente, la cobijo y le dio un beso en su frente. Para después ir al otro lado de la cama y meterse el entre las sábanas. Lisa observaba todo con ojos muy abiertos

Una vez dentro de las sábanas, atrajo a lisa a su pecho pasando su mano por debajo de la cabeza de la pelinegra

-Duerme, pequeña Lalisa, prometo que no te are nada -Le dijo suavemente el príncipe, mientras besaba su coronilla.

Lisa no dijo nada, simplemente se acomodo un poco mas y puso su mano en el pectoral del príncipe, era cálido más cálido de lo que podía imaginarse.

Cerro los ojos y trato de dormir como el príncipe se lo había indicado.

Un jadeo en medio de la oscuridad hizo que Lisa abriera los ojos, recordando que no estaba sola en la habitación y en su cama, Taehyung estaba sudando y con el cuerpo hirviendo.

El aroma a cítricos y sandia de Lisa ya era mas fuerte y Lisa pudo sentir a su omega removerse.

-Alfa... 

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GRACIAS POR LEER


HACKE AL REY -LA SELECCIÓN- [TAELICE] [LIZKOOK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora