𝗦𝗘𝗖𝗥𝗘𝗧𝗢𝗦 | "La delgada línea entre el bien y el mal se pierde cuando has sufrido incontables veces."
Donde 𝗖𝗢𝗥𝗬 𝗕𝗬𝗘𝗥𝗦 tiene pesadillas constantes y Hawkins sería la clave de su rompecabezas.
Donde 𝗕𝗜𝗟𝗟𝗬 𝗛𝗔𝗥𝗚𝗥𝗢𝗩𝗘 se si...
◸───────────────◹ ┊"Capítulo 10" ┊Billy x Cory ┊1984 ◺───────────────◿
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Hᴀᴡᴋɪɴs, Iɴᴅɪᴀɴᴀ.
Divisé a Eddie en la entrada del instituto cuando Jonathan bajó del auto rumbo hacia la misma chica pálida de siempre, él tiene una postura coqueta. Noto como le guiña el ojo a unas señoritas y estas se sonrojan al verlo. Sonrío hasta pararme frente a él. – Así que tenías tus encantos. – sostengo las pequeñas correas que tiene mi mochila. El perfume extravagante me invade con brevedad, sus ojos avellana me observan de forma divertida.
Carraspeando pone la voz un poco gruesa. – La verdad es que me cuesta creer como aún no te has babeado por mi, Byears.
– Ajá. – ruedo los ojos ante su comentario.
Pone sus manos sobre mis hombros y decidimos pasar. Aún no veo a Robin por lo pasillos pero pienso que es porque llega muy temprano para sentarse al frente.
– ¿Te pintaste las uñas? – me agarra de la muñeca para inspeccionar. – Se ven cool, yo también me las quiero pintar pero de negro.
– ¡Te las puedo pintar yo misma!
Ambos sonreímos sin dejar de mirarnos cuando asiente en una afirmación pero alguien pasa por su lado bruscamente haciéndolo soltar mi mano en el proceso. Eddie maldice por lo bajo siguiendo con la mirada al rubio de ojos azules que ya conocía. Lo quiero saludar pero él solo nos mira de pies a cabeza, tiene un cigarro entre sus labios, como siempre. Ni siquiera se disculpa porque segundos después sigue caminando hasta encontrarse con Vicky.
– Si pudiera golpearlo... – Eddie hace una mueca un poco graciosa con sus puños. – Pero me da miedo porque es como una bestia descontrolada.
– ¿Por qué lo dices?
– Ayer golpeó a dos de su grupo de amigos, fue en la parte de atrás. No había casi nadie, salvo yo. Es un tipo de temer.
¿Ayer?
Suspiro internamente, Billy me había mentido, vaya. Creo ni siquiera me sorprende.
– ¿Qué hacías atrás del instituto? – prefiero esquivar mis pensamientos con una pregunta.
Me mira de reojo y se cruza de brazos. – Ese no era el punto. – su expresión queriéndome reprender es algo graciosa. Veo como algunos alumnos ya van entrando a sus salones, de manera resignada, acomodo los libros de hoy.
