Ojos de Luna [KNJ & KSJ]

CAPÍTULO 15

Canción para ambientar su lectura, recomendable que la escuchen en la segunda mitad, disfruten <3 

Las ultimas dos semanas habian sido las más dificiles que llegó a París, su mente le mandaba imagenes del bello gitano que lo hacian sonreir como un idiota, para que luego su conciencia lo matirizara recordandole que vivia en pecado y seria condenado al infierno, al mismo tiempo su corazón dolia y en las noches se tiraba a llorar sin razón alguna.

Para su llanto había dos razones, la primera era la confusión de todo eso que estaba sintiendo, no entendía nada de lo que le pasaba, también se sentía mal por sentirlo, pero por mas que quería no se iba.

Y la segunda, extrañaba a su compañero nocturno, no lo había visto en días, cosa que dolía, dolía mucho y no entendía porque.

—Señor Dios, tú sabes por todo lo que pasamos todos tus hijos— otra vez estaba ahí, arrodillado, solo. —Te pido perdon, con todo mi corazon, perdoname por esto que estoy sintiendo señor, tú sabes que soy un hijo fiel, por favor, perdóname, esto no está bien y lo sé, haré lo que quieras señor pero por favor— trato de contener sus lágrimas.—Quítame esto que estoy sintiendo por favor— agachó aún más su cabeza. —No me condenes al infierno mi señor.

Estaba asustado, desesperado, necesitaba aliviar su pobre alma, pero pese a todas sus súplicas la presión no se iba, al contrario sentía que se ahogaba más.

Yoongi por su parte estaba quizá peor, cuatro preocupaciones al mismo tiempo, era mucho para el joven de tez pálida, haciendo que cada día deseara su muerte, sentía que morir era mejor que eso.

Por un lado estaba Namjoon, parecía un alma en pena, ya no sonreía, pasaba prácticamente todo el día en el templo y parecía estar roto y vacío.

También estaba Jin, no había aparecido en días, días que casualmente el archidiácono había ido a hacer sus torturas, varias noches lloró pensando que alguno de esos gitanos podría ser su amigo, hasta que se decidió en ir a ver, cosa que no calmó su corazón.

Y la última, era lo mismo que la segunda, se había vuelto rutinario que el archidiácono fuera más seguido y la tarea de ocultarle a Namjoon la verdad se volvía más complicada, pues el moreno ahora sufría de insomnio y salir de su cama era imposible ya que Namjoon insistia en seguirlo.

Mientras que nuestro gitano, no se encontraba mejor, estaba peor que los otros dos.

—¿No piensas comer?— regaño Hoseok. —Vas a enfermar.

—Comeré más tarde, lo prometo— volvió a contar las monedas.

—No mientas, tu no haces promesas, llevas así días, no comes mas que manzanas ¿Que te sucede?— no recibió respuesta. —¡Responde!

—¡Déjame solo!— golpeo la mesa.

—Está bien, me llevaré a Tae conmigo— le dio la espalda. —No sé en qué momento dejaste de confiar en mí, pero recuerda que soy tu hermano.

El gitano suspiro, llevando su mano a su entrecejo, estaba cansado, demasiado cansado y abrumado, además de que estaba triste.

Mucha de su gente había desaparecido, la suposición más acertada, era que habían sido capturados por los de la superficie, lo que no hacía mejor la situación y solamente lo hacía sentirse horrible.

Pues mientras que él iba libremente a la superficie para traicionar a los suyos, otros eran asesinados como animales.

Empezaba a creer que Hoseok tenía razón, Namjoon y Yoongi podrían traicionarlo en cualquier momento, además que no faltaban más que días para que por fin pudieran irse y dejar ese horrible lugar atrás.