Capítulo 11: Encerrados.

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Kaidan y Alexa habían pedido un montón de comida, el camarero quedo atónito cuando vio que en la habitación solo estaban ellos dos.

Parecía que ninguno de los dos había comido en días pero para sus cuerpos la sensación era la misma, los bióticos tenían que comer más y más a menudo, sobre todo si usaban sus poderes tal y como habían hecho esta mañana.

-Bueno ¿y el trago que mencionaste antes? - pregunto Alexa.

-Supongo que estaremos aquí encerrados durante un buen rato - dijo Kaidan mientras sacaba una botella de whisky del mini bar.

-Bueno son las 8 de la noche y no creo que en 4 horas peinen toda la estación espacial - dijo Alexa.

-Mierda - maldijo Kaidan en darse cuenta que no había podido ir a firmar su ascenso.

-Kaidan ¿ocurre algo? -

-Tenía que haber firmado mi ascenso a teniente hace una hora -

-Bueno Hackett lo solucionara, tranquilo y por cierto felicidades -

-Gracias, por cierto el Almirante te llamo Comandante -

-Mmm sí, me ascendieron ayer mismo - le respondió Alexa con una sonrisa - así que creo que tenemos algo que celebrar.

Kaidan lleno dos vasos y le entrego uno a ella.

-Por la Alianza - dijo Shepard.

-Mejor por nosotros - respondió el.

-Pues por nosotros, para que sigamos ascendiendo y pateando culos - dijo Alexa chocando con cuidado su vaso con el de Kaidan.

Alexa se sentía cómoda cuando estaba Kaidan a su alrededor, siempre había sido así des de que se habían conocido en la academia. Estuvieron hablando de los destinos que les habían dado des que habían salido de la academia pero ella realmente no pudo contarle mucho, era todo alto secreto.

-Dime como te hiciste esta cicatriz - dijo pasando sus dedos por la mejilla de ella.

-La hija de un embajador había sido secuestrada, nos asignaron a Mark y a mí para su rescate - empezó a contar Alexa - Mark era un buen ingeniero y yo necesitaba sus habilidades para colarme en la guardia de los secuestradores. Hackett creyó que siendo la hija del embajador una biótica yo podría conectar fácilmente con ella.

Kaidan la escuchaba atentamente siempre le había encantado el sonido de la voz de ella, era calmante y la sensación de sus bióticos en sintonía con los de él era una sensación maravillosa.

-Pero ella sufría el síndrome de Estocolmo y nos atacó cuando vio que habíamos matado a su amor -dijo haciendo un gesto con las manos para indicar comillas en la palabra amor - disparo a Mark y yo lo envolví con una barrera biótica pero descuide la mía y una bala me paso rozando.

-¿Qué hiciste con ella? - pregunto Kaidan.

-Cargue con toda la energía biótica que pude, intento inmovilizarme con un campo de estasis pero lo atravesé y la deje inconsciente - le respondió ella.

Kaidan recordaba lo que era ver Alexa cargar en medio de un campo de batalla, era algo realmente digno de ver, era aterrador y terriblemente sexy a la vez. En ese instante se acordó de Jordan cuando la había nombrado diosa dentro y fuera del campo de batalla y realmente ese hombre tenía razón.

-Me encontré con Jordan hace un par de meses - le dijo Kaidan.

-¿Cómo le va? - pregunto ella.

- Va a casarse con Ruth y ha pedido destino en una base cerca de Londres - le conto él.

-Me alegro por los dos -

Mass Effect: SummitatemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora