Thomas, el chico intocable de la preparatoria. Pero su puesto no será exclusivo.
Una chica llega y toma ese puesto junto a él.
Sus dormitorios son vecinos, pero ellos no tanto al principio.
Con el tiempo descubrirán, que no son más que un reflejo d...
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Thomas Sangster:
-¿Lavaste mi auto? -Preguntó Theo.
Ya había pasado una semana y ya regresábamos a clases.
-Si, lo mande a lavar. -Repuse.
-¿Por qué? No estaba sucio.
-Créeme que lo estaba. -Me miró con el ceño fruncido y sólo pude sonreír.
Me llegó una notificación, saqué mi celular y sonreí. Beth quería salir esta noche, Hannah la había invitado a una fiesta.
-¿Tan malo es? -Mire a Theo. -Tú obsesión por Beth. No sé cómo nunca me di cuenta de que te gustaba.
-Ni yo. Hasta que me besó. -Comenzó a reírse.
-Lo siento. Eso sonó muy cursi.
-Si, bueno. Es lo que hace el amor. -Dije sarcástico para seguir el juego y di una media sonrisa. Él solo rio.
-Jamás dirías algo como eso.
-¿Quién sabe? Tal vez.
-¿Lo dirías?
-No. Pero si sería un tonto cursi, creo que ya lo soy un poco.
-Bueno. Es Beth Sallow. Lo puedo entender.
-¿Aún no superas tu amor platónico?
-Por eso es platónico.
-Exacto. Porque jamás pasará porque está conmigo. -Él rodeo los ojos sonriendo.
-Thomas Sangster en una relación seria. Difícil de creer.
-Es que Beth... -Sonreí pensando en ella. -Sé que suena muy estúpido. Pero ella es... -Me puse a pensar en cómo describirla sin encontrar las palabras. Hasta que me llegó un ejemplo. -Ella es como el tipo de música que escuchas con los ojos cerrados.
-Eso de hecho es muy lindo. Hazlo un poema. ¡Hey! Hazle una canción.
