[Hanabira]
Una de las cosas que me comenzaron a fastidiar es el cambio de temperatura. El tiempo se pasa muy rápido. Uno de los pasillos donde se encuentra la biblioteca, con un monton de libros que considero una exageración, un rechinante ruido que me inflo los poros, se encontraba alguien. El unico que puede entrar sin permiso de nadie es ese hombre. ¿Vidrio o porcelana?. Un choque entre si, lo relacione a un jarrón. Había un tipo alto cuidando la puerta. Podría usar ese poder que adquirí hace no mucho. Podría distraerlo. No hay que usar la fuerza pero en mi caso, no es mi último recurso. Con esta gente se maneja de esta forma. Un golpe en la nuca lo dejaría inconsciente durante veinte minutos. Esconder al guardia en la cocina no es una opción. Si aventara un objeto a la pared, el guardia como el cabrón de Adan escucharían y no podría saber nada. La cocina como la biblioteca, estaban a cuatro puertas del pasillo por lo que si podrían escuchar. Una sensación de curiosidad me decía "Intenta entrar a esa habitacion". Hay que dejarse llevar en ocasiones. La puerta estaba abierta. Recorde que la biblioteca tenía dos puertas (salida izquierda y entrada derecha) Por obra de los milagros pude entrar ocultando mi presencia contra sus ojos. La puerta no rechinó. Supongo que la puerta no estaba cerrada porque se encontraba un guardia cuidando, pero eso fue pasado.
Adan estando frente a un grande librero café, buscaba un libro con el indice y el dedo medio, para saber cual era cual. Uno le fue importante. Lo abrió con tanta confianza de saber donde estaba la página que se quedo pendiente la ultima vez que terminó de "leer". Dirigiendose a el sillón rojo de piel, no pudo verme, ya que pude bloquearme de su vista. Ese libro rojo con detalles dorados e importados y grabados. La pasta frontal golpeó la mesa con el peso de las demas hojas apiladas entre ellas como las ansias de saber o buscar algo. Sobre la altura de su hombro derecho no pude alcanzar a ver lo que había sacado. El libro de demaciadas páginas, que apenas la pulgada de nuestros dedos llegaría a el borde donde inicia y termina la mitad del libro antes de golpear entre si y volverlo a dejar en su lugar. El libro donde acomodado y apilado en la esquina, en medio del volumen VII y VIII (siete y ocho) Paso muy rapido y no pude ver que escondió en su bolsa café. Tomo mas de la mitad de la taza llena de té sin humo caliente. Sorbo sus cosas y se largo. Cerro la puerta sin prisas pero se sorprendera que no estaba su guardia, cumpliendo con la orden que le ordenó. Aguantar la respiración es muy dificil para éste protector. Me es urgente cambiar ese defecto. Un liston ó separador de color rojo marco la diferencia en el instante. Una abertura en medio del libro en una forma de frasco ancho me dejó como el filosofo que aún no encuentra la respuesta de su investigación. Con la confusión, apenas note mi fruncir de mi rostro y arrugas entre y sobre las cejas. Un sentimiento me golpeó el pecho. Estaba confundido. Un estiramiento de mi cara fue la velocidad de dejar el libro en el mismo lugar e irme sin dejar rastro de que estuve ahí. Tenía que estar a lado de Sayuri, pero este sentimieto me obligaba a ir detrás de éste imbecil. Esa imagen en mi cabeza no la he olvidado desde hace dos semanas que la tuve, antes de llegar a España. No la tengo clara en la mente ni en mis pensamientos. Es una sensacion sin peso ni preocupación pero si de curiosidad. Esa curiosidad no me importa ahora. Me importaba saber que sucedía con este asesino de mierda. Que quiere en realidad.
[Shin]
Pude ver a mi familia en un plano que solo es para los Kensaku. Mi padre dijo:
"Esa persona no está con sus conocidos"
fue tan rápido que me desperte con un dolor de pecho. ¿Mi corazón estuvo latiendo demaciado? Veía un poco nublado y con dolor de ojos. El típico silencio se hizo presente. Sucede cuando ya no hay actividad o contaminacion acústica, es decir, ruido. El sonido "piiii" Un silencio temeroso. Levantandome con un tremendo sueño a por mi celular. Eran las 2:30 de la noche. Mi madre no quería despertarla. Revise la mensajería. La mayoría de los chicos ya no estaban conectados. Unos cuantos: (hace tres horas, hace dos dias, hace veinte minutos) el mensaje me interesaba era (hace seis horas)
- Su última conexión fue hace seis horas, eso quiere decir que a las ocho de la noche -- Murmure en voz baja -- ¿Para que estoy haciendo una revision de contactos...?
En primera, ¿Cómo no pude darme cuenta? ¿Cuánto tiempo paso aún estando dormido? Mi padre me explicó que el mundo de los demás se congela, ya que no son parte de este circulo espiritual familiar. Yo soy el único que está consciente. Las calles solitarias y con la poca luz de los peatones era lo poco que estaba cerca de mi habitación del segundo piso. Eran las dos de la magrugada del siguiente día (2:30 AM). Es común que la refracción de la luz de los coches estén presentes por la poca gente que trabaja, completando un día entero y un extra.
Las luces se detuvieron en el cielo, como apuntar una lámpara hacía alguien para poder interrogarlo en medio de una autopista por infracción por exceso de velocidad. Exactamente así, pero apuntando hacia las estrellas. Eso me asusto. No es la primera vez mirando tal extraordinaria experiencia. Ya pasaron dos minutos desde que abrí la mensajería, que revise y cerre la aplicacion. El reloj de mi celular seguia en (2:30 AM) Un portal se abrió. Uno frío y oscuro sin fondo, No sabia a donde tenia que llegar a pararme y ver a mi alredor. Estaba pensando en alguien, como el recuerdo vago de la infancia que pasa por tu cabeza de repente. No me llegó por la cabeza que sería en un lugar muy lejos de mi hogar. La mañana era cálida y con un poco de calorcito del sol a las primeras horas de la mañana.
Como si pareciera que mis ojos me estuvieran ordenando a donde debía mirar. Desde lo lejos, a unos diez metros, ví a una chica que mis ojos me hicieron centrarme en ella. Recordé que por el gobierno "bakufu" los japoneses estaban aislados de los extranjeros. Muy extraña experiencia. Quise acercarme mucho más para poder verla. Me llamo tanto la atención. Esa chica tan hermosa era la responsable de que mi sonrisa pueda mostrarla sin miedo. ¿Eres la Abi que conozco o alguna otra mujer siendo tu vida anterior en este universo?
NOTA: Shin aun seguía dormido. Inmediatamente llego una señal a su alma. Por ese susto, recibió un choque eléctrico de su cerebro. Su corazón palpitó rápidamente por lo que ese mismo choque eléctrico evitaría que muriera dormido. Shin guardaba un traje de época, que tuvo que permanecer en un maletero debajo de su cama por alguna razón. El portal estaba frente a sus ojos.
• El gobierno bakufu, comenzó en el siglo XVI. Fue empleado por los shogūn, de los cuales, el emperador estuvo de acuerdo que el país se aislará de los extranjeros, por el comercio de los portugueses y chinos a Japón. Es por eso que se aislaron del mundo tres siglos. La persona que se atrevieran a romper esta regla, sería asesinados o ejecutados por los Shōgun.
Historia hecha y escrita por:
Abigail Ruiz
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EL AMULETO CENTRAL DEL UNIVERSO - EL VIAJE A COIMBRA VOLUMEN II
Teen FictionLa época de la juventud de Sayuri la ha llevado por un camino borroso, que por un poco que trate de verlo se corta el camino. Ella intentará de encontrar las gemas que le faltan para completar la magia que está dentro de ella, de Shin y de su famili...