Capítulo XXI: "Segundo Golpe"

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UN DÍA DESPUÉS

YANG PETROLEUM & CHEMICAL CORP

LISA'S POV:

Con una mano dentro del bolsillo de mi saco y con la otra sosteniendo mi maletín, caminé por el pasillo del último piso con rumbo a mi oficina, bajo la atenta mirada de todos los trabajadores, que me veían avanzar. A través de los lentes de sol que llevaba aquella mañana, pude verlos susurrarse entre si, seguro preguntándose la razón por la cual el día de ayer no me había presentado a trabajar.

Era una lastima que todos ellos se quedarían con la duda.

Seguí avanzando, manteniendo mi pose sería y llena de superioridad, demostrándole a todo el que me viera, que no era una simple empleada cómo ellos. Yo era Lalisa Manoban, la directora financiera y próximamente la dueña de este lugar.

Sentí el teléfono vibrar dentro del bolsillo de mi saco y sin pensarlo lo saqué viendo un mensaje en la barra de notificaciones.

"Está listo".

Sonreí de lado, volviendo a guardar el teléfono en mi bolsillo y apresuré mi paso tratando llegar lo más pronto a la oficina. Pero con lo que no contaba, es que recargado en el escritorio de Rosé, se encontraba el bueno para nada de Woo-shik. De nuevo, vestido con ropa que seguro algún vagabundo le había regalado.

— Vaya, siempre puntual. —dijo al verme.

— Buenos días para ti también, Woo-shik. —comenté, quitándome los lentes y observándolo directo a los ojos, al mismo tiempo en que abría la puerta de mi oficina—. ¿A qué debo tu visita un jueves por la mañana?.

— Necesito de tu ayuda. —comentó, entrando detrás de mi, a la oficina—. Te vine a buscar el día de ayer a la hora de almuerzo, pero me topé con la noticia de que no habías venido a trabajar.

— Tuve algunos asuntos personas que atender. —respondí, dejando mi maletín sobre el escritorio antes de sentarme en mi silla giratoria—. Le quise avisar a la señorita Kim, que no podría presentarme a trabajar pero me enteré del robo en su penthouse y decidí no molestarla.

— Oh, veo que estás muy enterada de todo.

— No entiendo por qué el tono de sorpresa. Salió en todas las noticias de Corea del Sur. —respondí, viéndolo fijamente—. Creo que incluso apareció en noticias internacionales.

— Lo siento, no quise sonar de esa forma, es solo que estoy pasando por momentos difíciles con Jennie y no puedo evitar celarla con todos. —dijo en modo de disculpa.

— ¿Estás insinuando que tengo algo con tu novia?. —alcé una de mis cejas. Woo-shik, era un idiota, pero tal parecía que no tanto—. Solo celas a tu pareja con la persona que crees que tiene algo.

— Bueno, ustedes de han vuelto muy unidas, pasan mucho tiempo juntas encerradas en su oficina. —comenzó, dirigiendo la mirada hacia sus manos, que jugaban entre si—. Pero yo sé que tú, respetas la amistad que hicimos en la universidad y jamás podrías hacerme una traición cómo esa. ¿Verdad?.

Retiro lo dicho. Si era una completo idiota.

— Por supuesto que no, amigo. Yo jamás sería capaz de hacerte algo cómo eso. —respondí, tratando de convencerlo con mis palabras, dándole una de mis sonrisa más falsas—. La señorita Kim, es solo mi jefa y si nos hemos vuelto cercanas es porque tiene que mantenerme al tanto de cada ingreso o retiro de dinero que se hace en la empresa. No hay otra intención entre nosotras. O bueno, yo no las tengo. No sé ella... Pero sabes que aunque así sea, ella no es para nada mi tipo.

The Plan [Jenlisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora