GANGNAM, SEÚL
ROSÉ'S POV:
— 4 horas Jisoo, 4 jodidas horas son las que tuve que esperar para que me diera acceso a su penthouse. —me quejé, mientras seguía caminando por las calles de Gangnam en la oscuridad de la noche, siendo iluminada por la luz de las farolas. En mis manos sostenía varias bolsas del supermercado y mi teléfono se mantenía presionado entre mi hombro y mi oreja.
Era difícil caminar de esta manera, pero por nada del mundo me perdería una llamada de la mujer de mi vida.
— Todavía me duele el trasero por estar sentada frente al elevador, esperando a que lo desbloqueara. —continué hablando, viendo cómo solo faltaban un par de metros para llegar al edificio en el que Lisa vivía.
— Si decides aceptar mi invitación, podría hacerte un masaje para que se te quite el dolor. —el tono seductor que Jisoo, había utilizado en sus palabras, me hizo sonreír de lado con perversidad—. Sabes que soy muy buena usando mis manos.
— Lo he comprobado muy bien. —respondí, saludando con un levantamiento de cejas al guardia de seguridad que custodiaba la puerta y que amablemente la había abierto dejándome ingresar al edificio—. Pero tendré que rechazarte y soportar el dolor toda la noche. Lisa, sigue ahogada en alcohol y no me atrevo a dejarla sola en esas condiciones. Podría cometer una locura.
— ¿Has conseguido que te diga que fue lo que ocurrió dentro de la oficina de Jennie?. —preguntó ella, haciéndome soltar un suspiro cansado.
— Aún no. Lo intenté ni bien me dio acceso de subir a su penthouse, pero lo único que hizo fue ignorarme mientras bebía directo de una botella de vino. —respondí, extendiendo mi mano llena de bolsas hacia el frente y oprimiendo con dificultad el botón del elevador—. He decidido bajarle un poco la borrachera con un baño y comida, es por eso que salí a comprar algunas cosas al supermercado, pero si esto no funciona, no se qué más hacer.
— No tienes de que preocuparte, la comida será suficiente, solo procura que beba mucha agua. —me aconsejo, justo en el momento en que las puertas del elevador se abrieron permitiéndome pasar—. Y en caso que esto no llegue a funcionar, lo mejor sería no presionarla y quedarte a su lado hasta que por cuenta propia decida hablar.
— ¿Crees que ella lo haga?. —pregunté, viendo las puertas cerrarse y el elevador empezar a subir, marcando en la pequeña pantalla los pisos que dejábamos atrás.
— Rosie, eres su mejor amiga, la única persona que ella reconoce cómo familia, es claro que te contará todo, solo que lo hará a su tiempo.
Asentí lentamente a sus palabras dándole la razón. Siempre que Lisa, tenía un mal día o necesitaba ser escuchada, recurría a mi, así que estaba casi segura que esta vez no sería la excepción.
— Todo sería más fácil si hubiese estado allí, cuando todo sucedió. —respondí con desgano—. Créeme que ya me cansé de crearme escenas falsas en mi cabeza para intentar comprender porque razón cuando regresé a mi puesto de trabajo, vi a Lisa salir disparada de la oficina de Jennie y correr hacia el elevador justo minutos antes de que Woo-shik, saliera con el rostro ensangrentado, acompañado por Seong-min.
— Se lo difícil que es para ti, no tener una respuesta clara de lo sucedido; pero tranquila, estoy casi segura que pronto sabrás que pasó. —dijo Jisoo, con un tono de voz tan reconfortante que me hizo cerrar mis ojos unos segundos, sintiéndome realmente en paz. Solo ella tenía el don de calmar a mi mente y corazón.
El sonido del elevador, me hizo abrir los ojos y darme cuenta que las puertas empezaban a abrirse, dejándome salir de la caja metálica para adentrarme al penthouse que se mantenía a oscuras, iluminado únicamente por la tenue luz que emitían las lámparas a los costados del gigantesco sofá, en la sala.