Un Pueblo Maldito, donde Dicen que si Entras y Intentas Salir la Maldición de las Sombras Recaerá en ti, ¿Podran ellos Combatir Con los Mounstros que te observan Desde las Sombras? O ¿Ellos Son los Mounstros? Nadie lo sabe Aún o Talvez Ella Si.
Solo...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Isobelle
Pasan los días, entreno un poco, con los debidos cuidados que me dijo el Dr.
Cuando salgo del Gimnasio, voy a la cocina por un vaso de agua.
Me volteo y dejo el vaso en la encimera y veo entrar a Adam, Se acerca por detrás y me Abraza por la cintura teniendo cuidado por la herida.
- Queremos enseñarte unos Lugares. - Dice mientras respira en mi cuello.
-Me daré una Ducha y Bajo.
Hablo volteandome hacía el dejando un par de besos en su cara, Sonríe al recibir los besos y esto hace que me carcajee un poco haciendo que voltee los ojos.
-Ve y trae las tarjetas que te dimos en la Cabaña -. Salgo y Asiento, encaminandome hacía mi habitación.
Algunos Recuerdos invaden mi mente y sacudir mi cabeza hace que los olvide rápidamente.
Dejo que el Agua recorra mi cuerpo completo para hecharme el gel de baño, esparciendo por completo, dejándome Limpia y con el suave olor a cereza en mi piel.
Me visto con unos vaqueros algo rotos y un top algo suelto pero con escote, me pongo unos Nike y bajo con las tarjetas después de pasarlas trayendo por la caja fuerte de mi oficina.
Los Davies me esperan al pie de la escalera para irnos, les sonrío y quedo dos escalones arriba para estar casi a su tamaño, dejandoles un beso en los labios a cada uno, Theo aparece y cierra los ojos rápidamente.
-!No se cuando me acostumbrare a esto! - Chilla.
- Ojalá y Pronto. - Dice Abel con Malhumor.
- Vamos.
Salimos y nos montamos a la Camioneta de Abel.
Me recuesto en el asiento dejando que la carretera y los grandes Árboles inundan mi vista.
El tiempo se ve nublado como siempre en Jacksonville, pero este es algo diferente, parece que esta por nevar próximamente, haciendo que el pueblo se vea aun más siniestro.
Nos adentramos a las calles del pueblo y si eres observador verás como en algunos callejones se pasean sombras, algo que me da curiosidad pero no les temo, Ya que algo me hace sentirme parte de ellas.
Doblamos y una pequeña calle Abel aparca la Camioneta, salimos de ella y el Frío me hace estremecer algo que Adam, nota sacando una chaqueta de adentro y me la pasa, Me la coloco sin pensarlo y le agradezco.
