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Capítulo 7: Mizukage

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Capítulo 7: Mizukage.

Mei esquiva el ataque con dificultad, su mente formulando una estrategia. Calcula la distancia necesaria para atacar en la brecha de la defensa de su padre. Cierra los ojos y utiliza el Shunshin no jutsu. —Elemento fuego: ¡Disparo de las flamas voladoras! —, exclama. Sasuke esquiva el ataque mientras su hija aparece nuevamente frente a él. —¡Chidori!

Sasuke desvía el ataque, notando un mayor alcance y fuerza que las veces anteriores. —Chidori Nagashi—, invoca, la técnica comienza a rodear a su hija mientras él utiliza el Sharingan para desviar sus ataques.

—¡Tramposo! —, lo acusa ella.

Sasuke le sonríe de lado. —Sé que dije que no lo usaría, pero no pensé que perfeccionarías ese ataque sin el Sharingan.

Mei activa su Sharingan de tres aspas. —¿Nos ponemos serios? De acuerdo, no hay problema. Chidori: Raimei.

Una tormenta eléctrica comienza a formarse con corrientes eléctricas que atacan a Sasuke. A pesar del orgullo que siente por su hija, ya está un poco agotado por su resistencia. Ambos dan un salto hacia atrás mientras utilizan el jutsu de la gran bola de fuego, que termina fusionándose y destruyendo todo a su paso a algunos metros.

—Tomemos un descanso—, dice Sasuke buscando una botella de agua y dándole una a su hija. —Es increíble que a tu edad puedas mantenerte en pie después de usar los Chidori. Mi límite eran dos.

Los ojos de Mei brillan. —¿Quiere decir que soy mejor que tú cuando tenías mi edad?

—Tienes el mismo rango que yo tenía cuando tenía 13 años—, responde él, enfocando su mirada en la persona que se acerca a ellos.

Mei se deja caer de rodillas mientras unas lágrimas salen de sus ojos. —Eres un monstruo, realmente me estoy esforzando—, gimotea desde el suelo. Su padre sonríe. Unos pasos llaman la atención de los Uchiha. La pelinegra reconoce a la persona al instante y mira a su padre con reproche.

—¿Algo que decir, padre? —, pregunta.

Sasuke se lleva las manos a la nuca mientras el Mizukage comienza a reír. —Vaya, sí que es parecida a ti. Un placer, mi nombre es Chojuro, pequeña Mei—. Extiende su mano y ella la estrecha sin quitar la mirada de su progenitor.

—La aldea de la Hoja tiene una excursión en la aldea de la Niebla—, explica él. —Iba a acompañarte hasta Konoha, pero surgió un problema. El Mizukage me hará el favor de escoltarte hasta donde se encuentran Shino y Anko.

Ella resopla con molestia. —¿Por qué te gustan tanto las sorpresas? ¿No podías decírmelo para que no me hiciera la idea de que me seguirías entrenando?

—¿Quién dijo que no te seguiría entrenando? Además, ha pasado un mes. ¿Crees que Naruto no me ha escrito porque tengo una de las mejores kunoichis a mi cuidado y necesitan personal?

Mei Uchiha. | Shikadai Nara. EN EDICIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora