Capítulo 5.

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Recordar algo que te tomo mucho tiempo olvidarlo es difícil. Pero a veces esa cosas, son las que más están grabadas en la memoria, tal vez muy en el fondo, olvidadas, pero están ahí.

Esa noche que conocí a Omar, estaba punto de tenerlo entre mis piernas, pero le llamo su novio, regañandolo con una toxicidad tan fuerte. Se tuvo que ir muy a prisa, pero no fue impedimento para que me diera su número.

Días después seguí entrenando en la escuela preparatoria. Christopher apenas si me ve a los ojos, cuando cruzamos miradas, su rostro se ruborizó una manera muy adorable.

Pasaron unas semanas y por fin Christopher tuvo un respuesta, me la dijo al final del día en el salón de deportes
– Hola – Entro al salón frente a mi, yo estaba recargado en el escritorio con mi teléfono – Necesito hablar contigo
– ¿Qué pasó? – Lo mire a los ojos
– Estuve pensando mucho en lo que me dijiste hace semanas
– Okey, ¿Cuál fue tu respuesta?
– Quiero estar contigo, en una relación con sexo
– ¿Lo quieres todo?
– Así es, con calma, pero si
– Muy bien, ¿Ya habías estado con otros hombres antes? En una relación
– Dos, ¿Tu?
– En una relación – Desvíe la mirada, pensando en cuando fue la última vez que estuve con un hombre – Siete
– ¿Y en el sexo?
– Doce o tal vez más, ya perdí la cuenta, pero no pasa más de treinta. Exacto son al menos unos quince
– Wow, eres un experto en el sexo
– Por supuesto, yo soy muy bueno en el rol de activó y pasivo
– ¿Y cuál rol vamos a ser tú y yo?
– Yo, activo. Tu, pasivo
– Okey
– ¿Lo aceptas?
– Si, totalmente
– ¿Otra pregunta?
– Ninguna
– En ese caso – Tomé su cintura con mis dos manos y lo atraje más a mi, hasta quedar muy juntos – Dame un beso
– ¿Ahora?
– Si
Sus ojos me miraron, puso sus manos en mis hombros y luego acercó su rostro poco a poco a mis labios, juntamos los labios, pero no los movía, sus ojos estaban cerrados, su rostro sonrojado. Luego se alejo para verme a los ojos
– ¿Qué?
– ¿Sabes besar?
– Claro que se besar – Frunció el seño y se alejo su rostro unos centímetros de mi – ¿Por qué lo dices?
– Estás sonrojado, no estabas movimiento los labios y estás temblando – Inconscientemente bajo su mirada a sus manos, seguía temblando – ¿En tus antiguas relaciones, no besabas a tus parejas?
– A veces
– Entonces, yo te voy a enseñar

Tomé su mentón y lo besé, lento, suave, probando el sabor de su boca. Moviendo mis labios, ladeando la cabeza. Cómo cualquier adolescente que está con su primer pareja. Así lo estoy besando. Sus labios y su lengua juegan con la mía, intercambiando saliva, degustando el sabor de nuestros labios. Perdimos la noción del tiempo, separamos nuestros labios hasta que sonó mi celular. Un hilo de saliva estaba en nuestros labios, yo le sonreí satisfecho y él me sonrió como bobo enamorado
– Disculpa, tengo que contestar, es del trabajo – Saque mi teléfono del bolsillo delantero del lado izquierdo, al ver la pantalla, el nombre quien me llamo era de Yair, mi jefe
– Está bien – Se separó un poco de mi y luego yo salí del salón a la puerta
– ¿Hola?
Hola Andrés, ¿Tienes un minuto?
Si, ¿Qué ocurre?
Habrá una junta de trabajo, una hora antes de abrir el bar, es para discutir el tema de la nueva contratación
Entiendo, estaré ahí en el bar temprano
Gracias, Andrés
No de que, adiós
Adiós

Colgó el teléfono, volví con Christopher.
– ¿Todo bien? – Preguntó Christopher
– Si, no te preocupes, nada malo
– Okey, yo ya me tengo que ir
– ¿En serio?
– Si, mi mamá ya me quiere en casa, así que me voy
– Bien – Volví a acercarme a él, poniendo mis manos en su cintura, Chris rodeo mi cuello con sus dos brazos – ¿Cuándo volveré a verte?
– Podemos salir un fin de semana
– Okey, ¿Cuándo?
– Sábado en la tarde
– ¿Dónde?
– ¿Te gustaría ir a mi casa?
– ¿Ya quieres que conozca a tu familia? Solo llevamos unos diez minutos de novios
– Los sábados sale mi familia, yo me quedo en casa, cuidando a las mascotas
– Ah, ¿Si? ¿Eso haces los sábados?
– Básicamente si
– Está bien, iré a tu casa el sábado en la tarde
– Te estaré esperando

Sonreímos y luego nos volvimos a besar. Salir con un niño es interesante.

Llegué al trabajo, me cambié de ropa y luego fui a la sala de juntas en el bar.
Primero hablo el jefe, levantándose de su silla
– Los cité aquí una hora antes porque quiero discutir sobre el tema de la nueva contratación de personal del bar. Por el momento, las contrataciones van a ser para este bar, ya después será para el bar elegante, ¿Okey?
– Si – Hablamos al mismo tiempo
– Muy bien, publicaré los anuncios en nuestras redes sociales del bar, también afuera en la pared del bar, a partir de la siguiente semana. Otra cosa, para la contratación de la barra quedarán a cargo de poner a prueba a los nuevos candidatos y ver si son lo suficientemente buenos para la barra. Son Andrés, Julio y Marisol, ¿Están de acuerdo?
– Si – Aceptamos los tres
– Bien, para los meseros serán Fabián, Sofía, Roxana, Julián, Gabriel y Ashley
– Okey
– Muy bien. Les avisaré cuando lleguen los candidatos y las entrevistas, yo me encargaré de todo y les daré la información
– Muy bien
– Entonces eso es todo, vuelvan al trabajo
– Okey

Volvimos al trabajo, yo me encargue de la barra. Aunque al principio estaba muy aburrido el ambiente, una hora después llegó alguien que no creí que apareciera. Un chico un poco más alto que yo, apariencia ruda, peinado tipo punk de color café oscuro, vestido de chaqueta negra y playera blanca, con voz grave y un poco ronca. Se acercó a la barra, con mirada penetrante y molesta 
– Hola, ¿Tu eres Andrés?
– Si, soy yo, ¿Desea algo?
– ¿Conoces a un chico llamado Omar?
– Muy poco, ¿Por qué?
– Quiero que te alejes de mi novio
– ¿Perdón?
– He visto que tú estás en contacto con él y quiero que eso acabe, él es mi novio
– Uno, no tienes permitido hablarme así. Dos, me alejaré de tu novio. Y Tres, no vuelvas a estar bar
– Te aseguro que no lo haré
– Más te vale
– Estás advertido, no me hagas volver a amenazarte

Se dio la vuelta y se fue. No es la primera ni la última persona en amenazarme con alejarme de su pareja.

Continuará...

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