Un Trato Por Conveniencia.

Capítulo 12.

La verdad, creí que sería una pelea cuerpo a cuerpo, no está estupidez.

Una carrera ilegal de autos, en un lugar donde la policía no pasa, fácilmente puedes hacer cosas ilegales aquí en la calle y nadie te dirá nada. Por eso es que está carrera está tan bien organizada y tan llamativa. Vaya, no perdieron el tiempo con estar con malas compañías. Un auto de carreras para cada uno. El suyo, es un Corvette C7 CABRIOLET 2015 azul, el mío es un McLaren 675 2015 gris.

Bien dicen, que las miradas significan demasiado y más si se tiene un significado fuerte. Vi a mis dos exs, no cambiaron mucho, siguen igual, al parecer fueron al gimnasio y tienen forma, una mejor que la última vez que estaban conmigo. Bueno, igual no les pensaba dirigir la palabra, no tengo porque.

La carrera dio inicio, cada uno de nosotros, nos colocamos en la línea de salida. Los chicos estaban a mi lado, apoyándome, Dylan por supuesto, tomo fotografías de mis mejores ángulos.

Un momento de tensión entre él y yo. Javier es un niño fresa que le tiene miedo a enfrentarse a mi. Por lo que Roger, es más valiente, así que por eso me va a enfrentar a mi en una carrera de 200 metros, ida y vuelta. Siento mi corazón que late de prisa, las manos las tengo muy agarradas al volante, pero respiro profundo, controlo mi respiración, mientras veo los metros de carera que tengo en frente. Eso me calma. Así que, vamos a vencer a estos idiotas.

Una chica muy hermosa se para en medio de los dos autos, con una bandana roja. Los autos están encendidos, dando su mejor rugido. Esperando la señal, tomando aire y con una sonrisa de victoria, voy a ganar está carrera.

Alzó la bandana hacia arriba con su mano derecha y con la izquierda señaló a cada uno
– ¡¿Listo?! – Señalo a Roger, aceleró su auto, mirándome con odio
– ¡¿Listo?! – Me señaló a mi, aceleré mi auto, yo lo mire con una sonrisa de victoria
– ¡Fuera!

Metí primera y pise el acelerador con fuerza. Inmediatamente todos gritaron de emoción.

Había un bote de basura al final del camino, en ese momento le di la vuelta, metiendo el freno de mano y girando a la derecha. Roger estaba lejos de mi, así que fácilmente pude dar la vuelta. Seguí corriendo y logro alcanzarme. Estábamos a la par, faltaban cincuenta metros para la meta, estaba a punto de ganar Roger, pero vi que estaba a punto de hacer trampa, pero fui más rápido y lo esquivé antes de que golpeara mi auto. Le gane por unos centímetros. Estaba en la línea de meta, salí del auto, él estaba mirándome molesto
– Te gane justamente – Le dije victorioso
– Si, claro, justamente – Lo dice con ironía
– Tu ibas a golpear mi auto, tú ibas a hacer trampa primero
– Cobarde
– Tramposo
– Te gane y punto final. Ahora se van a tener que largar de mi casa
– No nos vamos a ir
– Será por las buenas o por las malas
– No me amenaces
– Entonces, largense

Me di la vuelta, fui a mi motocicleta que amablemente Oscar fue por ella con mi casco y mi traje. Mire a Christopher y con mi mano le di una señal para que viniera, cosa que hizo muy obediente, porque se subió a la motocicleta y se puso el casco. Pero antes de que arrancará, Javier gritó
– Algún día, te vamos a ganar
– Si, como no
– Ya lo verás
– A Roger yo le gane por una carrera y a ti te gano por algo que jamás vas a tener, no importa que tantos cursos tomes, que tantas clases asistas, nunca vas a llegar a mi nivel
– ¿Y qué es eso en lo que nunca te ganaré?
– Tu no puedes hacer esto – Aclaré mi garganta –
I'm dangerous, I'm warning you
But you're not afraid of me
And I can't convince you
You don't know me

And the longer that you stay
The ice is melting
And the pain feels okay
It feels okay (Hey)

You push me back, I push you back
You scream at me, I scream at you
Louder, louder, louder, louder
Louder, louder, louder, louder
Louder

Después de que cante la nota alta de un pequeño fragmento de una canción de un programa de televisión que le gustaba a mis exs, todos se asombraron y me aplaudieron. A lo que respondí
– ¿Puedes hacer esto? Claro que no, no importa que tanto te esfuerces, tu jamás podrás cantar

Luego me puse mi casco y me fui a dejar a Christopher a casa. Algo bueno de todo esto, es que les gane y ahora se irán de la casa, podré vivir en paz.

Llegamos a la casa de Christopher, se bajó y yo me quite el caso. Lo mire, noté en su mirada algo diferente
– ¿No te gusto lo que viste?
– No es que no me haya gustado, es solo que, no sabía que tenías una bonita voz – Se mordió el labio, está mintiendo
– Dime la verdad
– Esa es la verdad
– ¿Me tienes miedo?
– No, eso no es cierto
– ¿Y por qué actúas como si me tuvieras miedo?
– Claro que no
– Okey, me rindo. Voy a creerte, te veré otro día, descansa
– ¿Ya te vas?
– Tengo cosas que hacer
– Está bien, bueno, adiós
– Adiós
Antes de que me pusiera el casco, le di un leve beso en la mejilla, se puso rígido al momento en que me acerque a él. Es obvio, no le gusto lo que vio. No fue nada malo, pero para él, que es un niño si lo fue.

Lo mejor es que, procese bien lo que pasó hoy, después tomara la decisión de seguir conmigo o dejarme. Cualquiera de las dos opciones, está bien, mientras no me engañe con otra persona, todo estará bien.

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Presente Actual

Es lo que todo el mundo cree cuando está con su pareja y siente que le falló o cuando cree que está a punto de romper contigo.

Pero en mi caso, fue más difícil de lo que pensé y lo que pasó después, es que yo me convertí en otra persona, una que no sabía que tenía y que al final, termine por romperle el corazón a alguien que tal vez no tenía la culpa, y teniendo a otra persona que le gustaba esa parte de mi, por alguna razón, que no entendí, pero, hasta la fecha, nunca me sentí feliz cuando lo hice.

Continuará...