Marcada: Atrapada con Klaus Schmidt.

Capítulo 16- "Banm"

Amar, entregarlo todo por ese ser especial, amar incluso tu vida si fuese necesario, esa era mi definición de amor.Sabía perfectamente lo que se sentía pero no estaba segura de sentirlo al nivel que merecía por Klaus. Me gustaba, lo quería y me preocupaba por él pero me daba miedo llamar a aquello amor. Entonces llamarle "mi amor" había cobrado un significado distinto, palabras cariñosas sin ningún trasfondo real.
-Klaus...yo... sabes bien que...- era incapaz en ese momento de articular palabras adecuadas.
-Esta bien, no tienes que decirlo si no quieres- dijo Klaus al ver que no decía nada con coherencia luego de su sorpresiva pregunta. Me acurruque a su lado y él me estrechó entré sus brazos. Se quedó dormido rápidamente a diferencia de mi. Comencé a rememorar momentos, momentos en los cuales sentí el más puro amor y cada uno de ellos había sido junto a Leo Stewart. No era la primera vez que él cruzaba mi mente en esos días. Publicó en su perfil de IG una invitación a un recital de ballet. Su nueva pareja tenía una pequeña escuela de danza para niñas y jóvenes en Sydney. No pensaba en Leo de manera romántica pero si debía admitir que era probable que fuese el único hombre al que amaría profundamente al menos de forma platónica pero Klaus era real, estaba a mi lado, me protegía y cuidaba de mí, era justo pronunciar la palabra amor?

A la mañana siguiente desperté sola en su habitación tuve miedo de que estuviese molesto así que bajé a buscarle, encontrándo lo en el comedor hablando bajo con Irina, ambos al verme guardaron silencio y yo decidí que había sido suficiente de tanto secreto.
-Vas a estar bien no te...- decía Klaus a Irina.
-Me dirán en este preciso instante todo. De quien está huyendo Irina que los tiene a todos tan tensos. No me gusta sentir que me ocultan cosas- dije molesta.
Klaus suspiró, me miró y supo que si no me daba la respuesta que quería se la sacaría a Irina fuese como fuese. Caminó hasta mí y tomando mi mano entre la suya dijo;
-Se llama Paolo Cinquepalmi...-
-Paolo Cinquepalmi, dónde he escuchado ese nombre?- me pregunté, me sonaba pero no recordaba de donde.

-Paolo esta obsesionado conmigo. Tenía negocios con mi padre y me obligó a casarme con él pero me golpeaba y me aleje y por eso le declaró la guerra a mi familia- dijo Irina. El corazón se me detuvo, algo en las palabras de Irina sonaba tan cercano y familiar, obligada a casarse con una persona que la maltrataba, hullendo por su vida, era una copia a carbón de mi martirio junto a Drake Jacobs. Me sentí algo mareada e incluso me tambaleé un poco.

-Sam?- preguntó Klaus al notar que me había ido lejos a ese lugar en mi mente donde vivían los horrores que Drake me hizo experimentar con su "amor".

-¿Por qué no me lo contaron antes? -pregunté.

-Porqué sabía que te pondrías así...- respondió Klaus.

-Así cómo?- pregunté dándo me cuenta de que hacía ya mucho que había comenzado a llorar. Solté la mano de Klaus y me acerqué a Irina.

-No te va a tocar un pelo ese tipo. Eso te lo juro- le dije y por un breve instante vi como Irina se transformaba en mi yo de veinte años y quise protegerla de todo mal a pesar de nuestras diferencias que se veían insignificantes y olvidables ante aquel enorme problema.

Ese día pasé la mayor parte del tiempo en el campo de tiró y unas cuantas horas practicando mi combate cuerpo a cuerpo junto a Yuri.

-Debiste decirme cuando te lo pregunté- le reclamé mientras lo derribaba al piso.

-El señor Klaus no la quería alterar con eso- contestó. Me senté a su lado en el suelo.

-¿Quién es el tal Paolo?- pregunté.

-Es el líder de la Hermandad Cinquepalmi-

-Una especie de mafia italiana cutre?- pregunté riendo.

-No. Una verdadera organización ilícita italiana. Máximo, Lució y Paolo. Dirigen todo Italia, parte de Grecia y han querido entrar a Rusia y Alemania a través de acuerdos- explicó Yuri.