BAD (Jenlisa)

Capitulo 16

Ahora eres mía.

Baby when I told you: "You're the only one I like", I meant to say: "I really wanna fuck tonight"

Lisa's POV

Normalmente Jennie solía darme igual y no causar en mi vida ninguna importancia. No me importaba si era feliz, si era infeliz... bueno, de acuerdo, me era placentero que fuera infeliz, pero realmente me era placentero que cualquiera fuera infeliz, entonces ella era totalmente irrelevante. Era cuando veía a alguien más cerca de ella cuando mi instinto de "macho" territorial saltaba a la luz, cuando la Cobra se enojaba y comenzaba a salir. No sé porqué, pero desde la primera vez que la besé supe que no dejaría que nadie más lo hiciera. Jennie no tenía nada en especial y la verdad ni siquiera era completamente mi tipo, pero ver a otra persona cerca de ella me enfurecía y las ganas de matarlos a ellos y a ella, aparecían.

Y eso fue exactamente lo que pasó cuando la vi hablar con Tom Miller. Él le estaba contando alguna mierda barata de esas que las mujeres aman escuchar y ella sonreía como idiota. Claro, no me sorprendía que en vez de ir a rogarme que dejara de ignorarla, se fuera de puta por otra parte, era igual a todas. Y lo que más me molestaba de ella era que no lo aceptara, que fingiera ser santa e inocente.

Al final tuve que tomar una decisión dada mi situación, si no quería a ningún hombre cerca de ella, tenía que hacer algo.

Y aquí estaba, esperándola en su habitación. Había salido unas horas antes que ella y ahora debería estar en camino.

Pasaron unos minutos más y pronto escuché el carro de su padre estacionarse en la entrada.

-¡Hola, Rosario! -reconocí su voz infantil y nasal desde el piso de abajo.

Unos cuantos cometarios más seguidos de pisadas en las escaleras.

Ya venía.

De pronto la puerta de su habitación se abrió revelando su rostro.

No parecía sorprendida de verme parecía estar esperándome ahí.

-Cierra la puerta. -ordené en voz baja.

Ella bajó la mirada como si mi voz la acobardara y asintió levemente. Cerró la puerta y se quedó recargada en ella, como si tuviera miedo de acercarse.

-No hay nada que temer, princesa. -dije mis líneas tal como las había ensayado. -No quiero lastimarte.

Me acerqué a ella lentamente temiendo que cualquier movimiento brusco pudiera hacerla correr lejos de mí.

Tomé su pequeño rostro entre mis manos y me acerqué a ella.

-Jennie debemos hablar. Ven. -dije tomando su mano y jalándola a la cama.

Me senté en su cama y la senté sobre mi regazo, me encantaba tenerla ahí, completamente controlada y vigilada, sin oportunidad de ir de zorra con otros. Además podía imaginarme lo que sería follarla así.

Ella me miró a los ojos, eso era lo que más me gustaba de ella, en realidad creo que si no tuviera ese par de tetas y ese culo, sería lo único que me gustaría de ella. Me miraba a los ojos, como casi nadie hacía.

Y las palabras salieron casi solas, pero eso sólo se debía a que las había ensayado mucho.

-Me gustas, princesa. Lamento tratarte mal siempre, pero es la única manera de controlar lo que empiezo a sentir por ti. -dije con voz de idiota.

Sus ojos brillaron. Sus carnosos labios se entreabrieron y yo me pregunté qué podría hacer con ellos. Sonreí internamente imaginando lo que podría hacer si esto salía bien.

-Lisa, yo...

-Sé que no soy suficiente para ti, pero nena, ¿quién va a serlo? -la interrumpí.

-Pero, ¿qué hay con Nancy? -preguntó en susurros, como si temiera hacerme enojar.

-Nada, Nancy no significa nada para mí. -dije por primera vez sin mentir.

En su mirada brilló la incredulidad y el deseo.

¡Venga Lisa, tienes que hacerlo mejor!

-Princesa, eres la única que me interesa. La única que me gusta.

Jamás había dicho tantas estupideces en mi vida, pero la verdad era que en mi idioma todo eso significaba: En verdad quiero follar esta noche.

Pero su mirada brilló con más intensidad y supe que había caído.

-¿Quieres estar conmigo princesa? -pregunté nerviosa por primera vez en toda mi vida, no había pensado en eso y no sabía si lo había hecho bien, además su respuesta me interesaba sólo un poco más de lo que creí que haría.

Ella asintió y las ganas de besarla fueron demasiadas. Así que lo hice.

Nos separamos después de un rato y yo recargué mi cabeza entre su cuello y su hombro. Le di un beso casto en la carne descubierta y dije lo que había venido a decir:

-Ahora eres mía Jennie.

*****

-¿Están juntas? Como... ¿novias? -preguntó Jisoo confundida y un poco (demasiado) impresionada.

-Sí. -dije sin darle importancia, pues realmente no la merecía.

-Pero... ella... tú... -dijo sin sentido y yo supe a qué se debía tanta pregunta.

-¿Qué? ¿La querías para ti? -dije un tanto a la defensiva.

Jisoo abrió tanto los ojos que creí que se saldrían.

-¡No! Es sólo que no lo entiendo. Creía que te caía mal

-Me cae mal, es una estúpida niña malcriada.

Ella guardo silencio unos minutos.

-Lisa, ¿qué mierda estás planeando?

Yo sólo sonreí sabiendo que no podría engañarla.

Abrí la puerta de la bodega y fui con Yoongi.

-¿Tienes algo para esta semana? -pregunté.

-Sí, Mark Tuan. Sólo quieren que le des un susto, nada permanente, Cobra.

-¿Cuánto?

-€1200-respondió dándome el dinero, saqué unos cuanto billetes y se los entregué.

-Bien. -dije y sin más salí en busca de Mark.

Pobre Mark.

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Voten.