𝕄𝕪 𝕥𝕣𝕒𝕚𝕟𝕖𝕣 | JHS (Adaptación)

ᴘᴀʀᴛᴇ xxɪx

HOSEOK:

–Oh esto es una idiotez. –exclamé disgustado. –¿Qué no puedes preguntar algo mejor?

–No, vamos responde o ¿Es que llevas tiempo sin follar?

Fruncí un poco el ceño y procedí a responder.

–Con Misuk. –dije sonriendo.

–Uhh. –abucheó Kook al unísono con Suga.

–¿Misuk?. –repitió Tae en forma de pregunta.

–Eso oíste.

–¿Mi prima? –preguntó observándome con ganas de ahorcarme.

–asentí. –¿Recuerdas la semana ante pasada cuando vino de New York? Pues esa semana.

Tae apretó la mandíbula observándome, volteó la vista unos segundos más que disgustado. Él me había hecho esa pregunta, no era mi culpa y ni por un demonio mencionaría a Lyssna.

–Maldito ¡Te haré mierda! –exclamó parándose frente a mí.

–Oye tranquilo viejo. –dije alzando mis brazos al aire. –No me le insinué en ningún momento, ella vino a mi ¿Qué querías? ¿Qué me negara? Joder bro, eso es algo que ni siquiera tu harías. Después de todo fue tu pregunta.

–Tiene razón. –intervino Kook –Olvídalo bro, igual sabes bien de qué está hecha tu prima, si sabes de qué hablo.

–Pero... –lo interrumpí.

–Sabes que es así. –me encogí de hombros. –Pero no es para tanto, tu estuviste con Hana unos meses después de que termináramos y no recuerdo haberte querido partir la cara, no es mi prima, pero es algo parecido ¿No?

–De acuerdo... –dijo deshaciendo su puño, sonreí ante eso pues mi argumento había ganado.

Lyss me observó sonriente con una expresión de agradecimiento, aunque era de esperárselo, debía saber que no sería capaz de delatarla.

El juego de la botella acabo luego de la explosiva reacción de Kook ante mi respuesta, Suga sugirió ver al fin la película ya que por suerte todos optaron por la misma y nos situamos en los sofás. No me sentaría en el mueble amplio junto a Lyss y Kook, así que me recosté en un sofá individual, dejando que Hye se sentara al lado de ella.

–Pon la maldita película Jin. –exclamó Suga

–Si esta cosa la pudiera leer, tal vez lo haría.

–Déjame ver. –dije levantándome y tomando el CD. –Estaba al revés chico listo. –reí luego de conseguir que leyera.

Tae soltó una carcajada falsa y se situó en uno de los sofás. En el transcurso de la película podía oír como Lyssna reía en voz baja para no molestar a los demás, me causaba gracia ver cómo abrazaba el cojín para contener la risa y aunque no le veía divertido a aquella película, me causaba ternura ver cómo Lyssna si le causaba. Aunque todo desaparecía al mover la mirada unos centímetros a la derecha, viendo a Kook rodearla con su brazo mientras le decía "Hey amor, respira" y aquello lo arruinaba todo para mí.

Para ser honesto, desde esa noche la idea de que nuestros encuentros hubiesen acabado no me dejaban en paz, la verdad logré acostumbrarme con facilidad, ya que había resultado interesante y el hecho de que dejase a Kook de un lado para verse conmigo, no me desagradaba en lo absoluto. Pero luego de la última lección una parte de mí se aferró a ella... Y era confusa toda aquella impotencia que comenzaba a invadir mi cabeza al ver como ella estaba allá sentada a su lado, observándolo con una hermosa sonrisa dibujada en su rostro, con sus ojos iluminados y que una voz en mi cabeza no paraba de preguntarme:

¿Quisieras que ella te mirara de esa manera, cierto?

No trato de irme a tan apresurados extremos, pero puede que simplemente el haberme acostado con ella hubiese despertado en mi cuenta atracción. Me levanto del asiento hacia la cocina por una soda y también para ordenar un poco mis pensamientos.

–¡Déjate de mierda Hoseok!. –me dije a mismo pasando las manos por mi cabello.

–Hey. –dijo Hye detrás de mí.

–Hey. –dije volteándome hacia ella. –No sabía que venías detrás.

–Me di cuenta. –rió. –¿Con qué Misuk, eh?

–Pues si...

–Fue bueno que mintieras.

–Espera ¿Qué?

–Ya sabes.

–¿Cuánto sabes?

–Lo suficiente ¿No te molesta?

–No, no lo hace y la verdad no mentí...

–¿Cómo?

–Mentí al decir que Misuk fue la última.

–¡Oh! –sonrió. –Es lindo que la salvaras de esta y no la delataras.

–No sería capaz de hacerle algo como eso, Kook la dejaría.

–También es lindo que te preocupes por una relación que no te agrada.

–¿Qué?

–Sabes de qué hablo Hoseok –dijo abriendo el refrigerador.

–No tengo problema con ellos. –dije de manera indiferente encogiendo mis hombros.

–negó con la cabeza. –Pues pareciera que si.

–Digamos que... Tan solo no me agrada la idea de que... –me interrumpió.

–Que ahora vuelva a ser Kook con el único que ella esté.

–¡Pues bien, precisamente es eso lo que no me hace feliz!

–Respóndeme algo Hoseok. –dijo en un tono intrigante.

–Claro. –cruce mis brazos.

–¿Te gusta Lyssna?

–No. –dije.

–¿No?

–No. –repetí. –Bueno, no del todo...

–Tu manera de responder me confunde ¿Lo sabías?

–reí. –Es que no estoy muy claro con respecto a lo que me preguntas.

–Pero... ¡No parabas de observarla! Por eso vine hacia acá.

–La observo porque... Joder no lo sé, solo lo hago.

–suspiró. –Bien ¿Qué tal si te doy una ayuda?

–¿De qué hablas?

–No sé qué efectos tiene ella sobre ti ahora, pero, sé que no quieres quedar fuera de esto así que ayudaré.

–¿A qué?

–A hacer que Kook deje de ser el único para ella.

–¿Quieres hacer que lo engañe?

–Algo así.

–Yo... –fui interrumpido.

–¿Quieres entrar de nuevo al juego Hoseok o quedarte observando cómo finge que no ocurrió nada?