CASADO CON LA MAFIA [KOOKMIN]

07

*Jungkook *

Llegamos a la media noche a Jeju, tuve que manejar como demente por la carretera ya que el efecto del supresor estaba cediendo y nuevamente mi omega pedía ser aliviado, Jimin sufría en esos momentos y todavía faltaba un poco más para llegar a la casa, media hora después llegamos a la casa, fue todo tan caótico que ni equipaje llevamos, pero eso era lo de menos, recordé que en ese lugar había dejado ropa y con eso nos debería bastar de todos modos ni saldríamos en al menos una semana; el primer celo es siempre el más difícil, más cuando lo has estado evitando tanto tiempo.

Jimin era un Mar de jadeos con solo sentir mis manos, con el más mínimo toque se sentía excitado, los efectos de evitar tanto tiempo su celo le pasaban factura, poniéndole más sensible de lo normal.

_ ¡Alfa! - gimió excitado.

acaricié su cabeza para calmarle un poco, pero lo único que logré fue que soltará más feromonas a niveles exorbitantes, sentí un fuerte mareo mi omega estaba haciendo que mi lobo quisiera tomar el control de mi cuerpo y no podía dejarlo, lo conozco y podría hacerle daño si lo dejo que haga lo que quiera.

Finalmente llegamos a la habitación principal, lentamente dejé a mi omega en la cama para sacarme toda la ropa porque estorbaba, cuando ya había sacado toda mi ropa hice lo mismo con Jimin, dejando un rastro de besos húmedos por cada parte de su suave y dulce cuerpo.

Jimin era solo gemidos con cada beso que dejaba, rápidamente terminé de sacar su ropa deleitándome con la hermosa vista debajo mío, mi omega es el ser más hermoso de este mundo, sus ojos, su boca, esos labios de miel son lo más delicioso que he probado, no he podido dejar de pensar en ellos desde la última vez que los tomé sin el permiso de mi omega y hoy pareciera que están más dulces que como los recordaba.

Simplemente caí por ellos chupándolos de manera necesitada, besar sus labios tenía la misma sensación cuando se come algodón de azúcar, podía sentir la suavidad en ellos y su sabor increíblemente dulce; sentí como un calor Invadía mi ser, necesitando estar dentro de mi omega, mi cuerpo lo pedía a gritos, mi lobo rasguñaba mi pecho por salir y reclamar a su omega.

Pero yo no podía dejar que eso pasara, debía mantener el control, Jimin se retorcía de placer con solo mi toque, empecé a bajar besando su hermoso cuello concentrándome en aquel lugar donde su aroma se hacía más fuerte y donde dejaría mi marca reclamándolo como mío.

Dejé un par de lamidas y pequeñas marcas en su cuello, haciendo que sus gemidos fueran aún más fuertes que antes, seguí bajando hasta detenerme en esos rosados botones en su pecho acaricié uno y el otro lo lleve a mi boca haciendo que Jimin arqueara su espalda Inconscientemente, debido a la atención que estaba dando a sus hermosos botones rosa.

Jimin cada vez pedía más contacto, cada vez arqueaba más su espalda y acercando más su pelvis a la mía, sus gemidos eran tan fuertes que en varias ocasiones, estuve a punto de perder la poca cordura que tenía, nuevamente seguí mi camino hacia abajo llegando a su pene que chorreaba líquido pre seminal en grandes cantidades, con mi mano tomé su pene y empecé a darle atención a su ya muy crecida erección, mi mano subía y bajaba lentamente provocando que abriera su boca y soltará gemidos y suspiros, Jimin estaba dándome el concierto de mi vida, sus gemidos eran la más grande obra de arte jamás escuchada.

Dejé de masturbarlo y lo escuche gruñir en queja, sonreí y me lleve su pene a mi boca, más líquido preseminal empezó a salir y lo trague gustoso todo, nunca imagine que pudiera ser aún más dulce hasta que probé su semen, mi hermoso omega había acabado en mi boca; Todavía podía sentir como su falo palpitaba dentro de mi boca, me tragué todo y nuevamente ataque sus labios un tanto hinchados y rojos de tanto morderlos al tratar inútilmente de callar uno que otro grito de placer.

Pero todo esto apenas es el comienzo de su celo, quiero que esto sea realmente memorable para él, ahora empecé nuevamente a descender llegando a sus testículos sorprendentemente su pene estaba nuevamente erecto, una completa obra de arte, su cuerpo es realmente lo más maravilloso que he podido tocar, podía ver como su piel reacciona a mi toque es algo realmente fascinante.

Sinceramente a este punto yo ya no podía aguantar más y empecé a prepararlo lleve tres dedos a mi boca para lubricar su apretada y rosada entrada con ellos, lleve el primer dedo a su entrada y empecé a frotar suavemente provocando más gemidos y que de su entrada empezará a salir más de su lubricantes natural metí el primer dedo simulando una suave envestida; su boca se abrió levemente dejando escapar un sonoro suspiro, cuando creí que se había acostumbrado a la incómoda intromisión metí el segundo dedo y le saque un gemido y una pequeña lágrima cayó de sus hermosos ojos, me acerque para besar sus labios y distraerle del dolor mientras simulaba nuevamente suaves embestidas.

poco después su dolor desapareció y con voz entre cortada me pidió que lo hiciera suyo, saque mis dedos con delicadeza de su entrada y me posicione entre sus piernas, tome suavemente su cadera y levantarla solo un poco para tener más acceso, alinee mi miembro a su entrada y empecé a meterlo suave y lento sin prisa para no lastimarlo.

con éxito entró todo, estuve a punto de volverme una bestia cuando sentí como todo dentro de él, abrazaba mi pene provocando que se pusiera aún más grande de lo ya estaba; sentía como estaba próximo al orgasmo con solo estar dentro suyo, una experiencia sin precedentes, esperé que se acostumbrara a mi tamaño para poder moverme.

_ kookie, por favor muévete... ¡aaah!

En ese momento mi cordura se fue a la mierda, empecé a penetrarlo una y otra vez sacándole sonoros gemidos que hacían que sólo le dieran aún más profundo, tocando su punto dulce una y otra vez cada vez más rápido y más profundas eran mis estocadas y él solo pedía más y más, casi a gritos de tanto placer.

sentí como llegaba su orgasmos cuando su esencia manchó mi abdomen, su liberación había llegado, ahora entre espasmos empecé a darle más rápido y duro, su boca entre abierta sin emitir sonido eran la evidencia de lo bien que lo estaba pasando, sentí la presión en mi pene y nuevamente se corrió, él empezó a jadear tratando de llevar aire a sus pulmones mientras yo podía sentir como el nudo se empezaba a formar, tome sus brazos para levantarlo y rodeara mi cuello con sus brazos, así tener mejor acceso a su cuello donde iría la marca, mis embestidas fueron más profundas por la posición en la que lo tenía.

cuando mi orgasmo llegó, mordí su cuello clavando mis colmillos en él, mientras que el nudo nos había convertido en un solo ser y nuestro lazo apareció segundos después; sentí como mi esencia le llenaba por completo, despacio me acosté con él sobre mi pecho teniendo el cuidado de no lastimarlo ya que el nudo estaba lejos de desaparecer.

Jimin se quedó dormido inmediatamente, dejando frente a mí el rostro de mi hermoso y dulce omega, no sé cuánto tiempo estuve contemplándole ya que creo que también caí dormido.

Horas más tarde un movimiento sobre mi abdomen me despertó obteniendo una hermosa vista de mi omega teniendo nuevamente un orgasmo con solo sentir mi miembro aún dentro de él, con sus espasmos de su reciente orgasmo, me di a la tarea de volver a embestir de manera desenfrenada robándole el aliento con cada embestida, hasta que nuevamente el nudo se formó y mi esencia lo llenó nuevamente; sin fuerzas se dejó caer sobre mí pecho, su corazón estaba a mil, igual que el mío y así pasamos la semana entera hasta que su celo acabó.