Capitulo 19

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Al llegar a mi casa le mostré los papeles que me habían dado en la guardería a mi madre, ella me dijo que le habían llamado para decirle, ella se veía un poco confundida pero también más calmada, yo me sentía muy bien, ya que ahora sabía más sobre mi, y los papeles que me dieron si resultaron ser muy útiles, tenían información sobre como la gente con el espectro autista procesan la información, como perciben el mundo, y cosas que pueden resultar molestas.

El resto del día fue muy bueno, la tarde estuvo calmada, cuando mi padre llego de trabajar empezamos a comer, mi madre me preparo Hot dogs para mí, eso me gustó mucho, es una de mis comidas favoritas. Luego vino una charla que ya la veía venir.

Hija, tu madre ya me platico lo que te dijeron en el centro, y queremos que nos digas si hay que necesites, no sabemos que es lo que te produce malestar, pero haremos lo posible por qué tengas una vida cómoda.
Dijo mi padre mientras mi madre también me observababa.

Gracias, de verdad lo aprecio, algo que me ayuda mucho son mis fidgets y mi chupón pero me da pena ese, y también si me ven haciendo movimientos raros o dándome golpes en las piernas o en el cuello, no me estoy haciendo daño, es solo algo que siento el impulso de hacer.
Dije sintiendo que podía quitarme una mascara que había traído desde hace años.

No te preocupes, es normal que las niñas pequeñas usen chupón, y tú padre y yo te ayudaremos a sentirte bien.
Dijo mi madre con una mirada empática.

Y si algo te molesta dinos y veremos qué hacer.
Dijo mi padre dándome una sonrisa.

Después de eso mis padres me abrazaron y me dijeron que siempre me apoyarían.

El resto del día fue muy bueno, mis padres estaban con un animo calmado y yo me puse a pensar que tantos rasgos de autismo tuve a lo largo de mi vida, y la verdad fueron muchos, solo que los confundía con ansiedad o algo que era "normal".

Lo que más me llamó la atención es que recordando a mis compañeros en la universidad yo era mucho menos independiente que ellos, en eso surgió un pensamiento en mi mente, "supongo que entonces si que soy una niña pequeña jejeje". Eso la verdad si me dio risa, pero sabía que el autismo no es igual a ser infantil.

El fin de semana fue bueno en su mayoría.

El sábado en la mañana mientras desayunábamos mi madre recibió una invitación sorpresa de ir a una reunión de su lado de la familia, yo la verdad no quería ir, ya que tenía otros planes y no me gusta que cambien las cosas tan repentinamente, pero sabía que a mí madre si le gustaría ir, y sentí que era lo mejor decir que si.

Kat, como vas a salir por mucho tiempo, está vez si mejor usa ropa interior de niña grande, ya cuando regresemos puedes volver a los pañales.
Dijo mi madre mientras yo elegía mi ropa.

Yo obedecí, y en mi cuarto me quite el pañal el cual me sorprendió que estuviera mojado, así que me limpie y me puse mi ropa interior, la verdad es que me sentía muy rara sin los pañales, sentía como si algo me faltará.

Hija, solo porfavor no olvides que hoy tienes que recordar ir al baño, si sientes la necesidad ve enseguida, porfavor.
Dijo mi madre con un tono serio.

Sip, tendre mucho cuidado.
Lo prometo.
Le dije a mi madre.

El camino hacia allá fue tranquilo, me gusta mucho ver pasar los autos y ver si pasa alguno raro o muy bonito, pero al parecer ese no era mi día de suerte, no hubo ninguno que fuera destacable.

Cuando llegamos a la casa donde era la reunión saludamos a todos, eso es algo que me causa conflicto a veces, ya que debo saludar a toda la familia y la verdad no todos me agradan, solo que ese día tuve suerte y no había nadie que no me agradará, mientras mis padres se ponían al día platicando con todos los demás yo decidí ir a la mesa donde todos estaban agarrando comida, soy muy selectiva con la comida, por lo que solo me servi de lo que estaba segura que me iba a gustar, y en ese momento me di cuenta de que no había cubiertos y vi a mi alrededor y entendí porque, todo eso era solo para hacer tacos, los tacos me gustan siempre y cuando sean simples y no muy elaborados, pero yo no quería tacos, yo solo quería comer carne o pollo, así que decidí que no tenía otra opción que usar las manos, la verdad disfrute mucho de la comida, mis padres no me dijeron nada así que supongo que no estaba mal, luego mis familiares empezaron a hacerme preguntas sobre mi vida, sobre todo querían saber cómo me iba en la universidad, en ese momento mi madre me miró con una expresión muy seria, así que les mentí y les dije que me era muy difícil pero que seguía adelante, al parecer ellos lo entendieron y me dijeron que solo debía seguir esforzándome, pero yo por dentro solo pensaba "ya no voy a la universidad, ahora soy feliz en una guardería con más bebés como yo".

Una nueva infanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora