Capitulo A-01

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***Este capítulo es diferente, en este la historia está desde la perspectiva de la hermana mayor de Kat, Ana.***

Después de que mi hermana fue con los demás bebés de la guardería al acuario y al zoológico se ve mucho más feliz y como si todas las cicatrices que tiene dentro de ella ya estuvieran sanando correctamente.

Después de que la recogí de la guardería, el día que fue a la excursión del zoológico, me di cuenta de que ella estaba totalmente en su "little space" era verdaderamente una niña pequeña, cuando la miraba ella solo se quedaba jugando con Cristal o viendo a lo lejos. Y se mostraba interesada y feliz en las cosas de su alrededor, eso me hizo sentir muy feliz, no por mi sino por ella, ya que hacía años que no la veía así de feliz, y eso en gran parte había sido mi culpa.

Hace años cuando ella iba en primero de primaria y yo en tercero de primaria empecé a hacerle lo que yo creía eran bromas inofensivas, solo la molestaba con cosas sobre ella que le daban pena o le cambiaba sus cosas por otras, antes nuestra relación no era así nos llevábamos mejor pero no quería que ella se sintiera superior a mi, así que tome malas decisiones, hasta que unos años después hice algo muy malo, revele a la escuela que ella estaba buscando haber la transición de chico a chica, no sé porque lo hice solo pensé que sería una buena broma, pero no fue para nada así.

La empezaron a molestar mucho y sus amigos la dejaron sola, ese mismo año tuvo si primer ataque de ansiedad o de pánico, la verdad no lo recuerdo bien, solo que ese día nos padres fueron por ella a la escuela y luego por mi.

Hasta ese entonces ella jamás les había dicho a mis padres que yo había iniciado todo eso, pero ese día ella estaba tan nerviosa y asustada que les dijo todo, mis padres estaban muy enojados conmigo, me castigaron quitándome varias de mis cosas, pero aunque al principio yo me enoje con Kat por haberles dicho todo eso a mis padres luego ví el gran daño que le había hecho, ella ya no era la misma, ahora era una chica muy tímida y asustadiza, ya no confiaba en nadie y ahora tenía que tomar medicamentos contra la ansiedad y la depresión, y aunque la ayudaban un poco la apagaban.

Durante la secundaria tuvo un poco de mejora, ella se cambió de escuela por todo lo que pasó, pero el bullying no paró, solo cambiaron los motivos y los agresores.

En ese tiempo yo me propuse mostrarles a mis padres que había cambiado, me esforcé mucho en mis estudios, conseguí una beca y fui de las mejores de mi generación, al mismo tiempo busque ser una hermana confiable para Kat, pero eso era muy difícil, ella casi no me hablaba y se mostraba desconfiada de mi.

Luego ella entro a la preparatoria y las cosas mejoraron para ella, hizo amigos y sus calificaciones mejoraron mucho, al parecer empezaba a superar lo ocurrido, incluso logro graduarse de la preparatoria con un buen promedio, y empezó a hablar mas conmigo.

Pero todo cambio cuando día fue a visitar a la que iba a ser su universidad, en menos de media hora de estar en el campus se puso muy mal, y empezó a llorar y a pedir que mis padres la sacarán de ahí, mis padres la llevaron a casa, cómo eran vacaciones yo estaba sin nada que hacer así que cuando regresaron a casa mis padres con mi hermana me pidieron que la cuidara mientras iban a hablar con un especialista.

Ella se encerró en su cuarto, al principio no hacía ningún ruido pero luego me acerque a la puerta y pude escuchar que estaba llorando, y decidí entrar, toque la puerta pero no me respondió así que abrí la puerta que no tenía seguro, y encontré a mi hermana abrazando a su almohada y llorando en voz baja, Yo me acerque a ella.

Kat, que pasa? Cómo te puedo ayudar?
Dije yo mientras me sentaba en el pie de la cama.

Ella no respondió y solo siguió igual, en eso decidí poner mi mano sobre su hombro y luego sobre su cabeza para acarrearle el pelo, en eso ella se volteo hacia mi, y pude ver qué su rostro tenía la misma expresión que cuando comenzó todo, y ella fue hacía mi y yo la abrace, ella empezó a llorar mucho más fuerte y yo solo la seguí abrazando, en ese momento me di cuenta de que ella seguía muy lastimada por lo que le hice, yo quería ayudarla pero no sabía que hacer.

Una nueva infanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora