Capítulo 65 - Sunday

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Capítulo 65 - Domingo.

Domingo.

Domingo. 4.475 días desde que Camila me habló por primera vez. Después de tantos días, comencé a perderme en los días y siempre necesitaba revisar mis notas. Una vez escuché de alguien que ni siquiera recuerdo, cómo cambian los recuerdos cada vez que los recordamos. Cosas buenas y cosas malas. Cada vez que se recuerdan, ganan y pierden detalles. La mente humana simplemente cuenta, por el momento, la versión que mejor le sirve. Ahora piensa conmigo, si solo una mente puede engañarse a sí misma, ¿cómo varias mentes no podrían tener infinitas versiones de un mismo hecho? Fue con esto en mente que comencé a recopilar versiones de algunos hechos pasados. Versiones de todas las personas que me pasaron y que se quedaron. Dinah fue la más impaciente por relatar y Alexa la más interesante de escuchar. ya que ella tenía una versión completamente opuesta a todas nosotras. Camila ya me lo dijo de una manera que me hizo sentir mal por un tiempo, era insoportable con ella.

Solía ​​hacer esta colección cuando estábamos juntas y casi siempre terminaba en una pelea. Un tema que rara vez se podía mencionar era Lucy, la antigua novia de Veronica. A Alexa no le gustaba oír hablar de las ex de su mujer y no son pocas las ex. Nunca di mi versión, solo pregunté y dejé que las demás hablaran. Fue en uno de los momentos que decidí parar, analizar todas las versiones recopiladas y sacar lo mejor de ellas. Pero luego Camila decidió hacer una videollamada con su mamá y me dio vergüenza cambiar de habitación.

—Mamá, mira esta foto de Lauren con los lémures. Creo que nunca la había visto tan emocionada por nada.

Escuché a Sinuhe reír y escondí mi rostro en el hombro de mi esposa. Nada más regresar de nuestro viaje, nos fuimos directamente a nuestro apartamento en Nueva York sin parar en Miami. Camila dijo que el álbum de bodas lo haría ella misma, pero que le vendrían bien algunas opiniones y Sinuhe estaba dispuesta a ver algunas.

—¡Está linda! Dijiste que tenías una que era la mejor. ¿Dónde está?

Camila seleccionó otra foto y quería pedir que no la enviara, no tuve tiempo, simplemente me rendí y observé su interacción.

—Le negó comida a la jirafa y cuando fui a intentar conseguir una manzana, ¡la jirafa ya se había servido sola!

Era la imagen de una jirafa con mi manzana en la boca y mi mano también. Camila al costado sonriendo a la cámara con su cabeza pegada a la de la jirafa.

—¡Mamá, esta es genial!

Y había otra imagen vergonzosa. Sería el peor álbum de bodas. Las fotos de la ceremonia fueron de Dinah, así que se podrán imaginar que sí, será el peor álbum de bodas.

—¿No tienes fotos normales, Kaki? ¿Cómo vas a llenar el álbum?

Sinuhe entrecerró los ojos detrás de sus lentes y me reí.

—Tenemos algunas, pero estas son mejores. ¡Ni siquiera lo sabes! El primer día que llegamos Lauren fue a hablar con el mesero y...

Dejé que las dos tuvieran una conversación más larga y les dije que iba a salir con Sparky a dar un paseo. Camila estaba emocionada con su madre y ni siquiera quería acompañarla.

Caminé por el edificio con Sparky y caminé con calma, al ritmo que ahora era suyo. Fue lento en comparación con años atrás, pero sacar la lengua y mover la cola todavía formaban parte de la escena de animación del cachorro. Pasamos por la cafetería de la esquina, que seguía igual, pero ya no la frecuentábamos mucho. Puede parecer una exageración mía, pero en los últimos años que han pasado, el volumen de autos en las calles ha logrado ser aún mayor. Antes podía cruzarme con Sparky sin esperar tanto. Ahora, tenemos que esperar fielmente a que el semáforo se ponga rojo. El otro lado era mejor, había menos tiendas y puntos comerciales, el animalito no se estresaba tanto. Solíamos ir a Central Park todo el tiempo, así que esta caminata comenzó a ser demasiado larga para Sparky. Un taburete cerca de una farmacia se convirtió en nuestro punto límite.

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