Amárrame

capítulo 11

Leah

—¿Cómo que él sabe de nosotras?

Marie guarda silencio ante mi pregunta así que insisto.

—¿Tu le contaste?

Aunque no debería una parte de mi cosquilleó al saber que probablemente ella le hablo de mi a aquel que por lo visto la tiene en cautiverio.

Marie agacha la cabeza mientras frunce los labios y por fin decir hablar.

—no, el encontró una conversación nuestra y ahí se enteró.

—¿Por eso te trato así? ¿Eso fue ahora?

—no, fue cuando recién nos conocimos y no sabe que eres tu.—hace una pausa mirándome.—sabe que una chica se me estaba insinuando pero no sabe quien es.

Y tan pronto como mi entusiasmo apareció así mismo se desvaneció, aunque por una parte me alivia saber que ese loco no conoce mi cara.

—¿Y que te dijo cuando supo?—vuelvo a cuestionar.

—se burló de mi, me humilló, hizo lo que quiso conmigo...

En sus ojos puedo notar su dolor, además que me es fácil ponerme en sus zapatos, se muy bien como se siente algo así.

...

Lilith

Camino por los pasillos tratando de buscar a Sophie, después de la primera clase no la he visto y Leah no vino a clases, es una pena, siempre me divierto con su presencia.

A lo lejos puedo ver a Amanda quién está con la mirada perdida entre la multitud que avanza por el lugar.

—hola, ¿Que miras tanto?—me acerco a saludarla.

—hola, solo estoy viendo algo.

—¿Que cosa?—pregunto parándome a su lado viendo hacia el lugar a donde ella mira, pero no veo nada interesante.

—tratando de ver al chico que me gusta, está entremedio de ese grupito de allá.—señala un grupo de personas mientras trata de ponerse de puntitas para ver.

—¿Quien es?

—el de camisa blanca que tiene un moño, aveces pareciera que tiene rulos.

Trato de buscar entre las personas que están ahí pero no veo nada.

—¿Y como sabes que te gusta?—sigo preguntando.

—Pues... Me gusta verlo aunque sea de lejos y cuando lo tengo cerca me pongo nerviosa, me sudan las manos y trato de hacer todo bien para no quedar como tonta enfrente de el.

—¿Y por qué te gusta?

—no lo sé, no hay una razón en específico, ¡solo me gusta y ya!— responde sin dejar de ponerse de puntitas mientras pone una mano en mi hombro para mantener equilibrio.

—¿Así de simple?

—Si, cuando te guste alguien me entenderás.

—Pues no tendré que esperar mucho entonces.

—miralo, ahí está... ¡Es tan lindo!_exclama Amanda con la voz más aguda de lo normal.

Es tal como lo describió, el único problema es que se deja mechones de pelo en la cara por lo cual no se puede ver muy bien su rostro.

—no se le ven los ojos.

—¡claro que si!

...