Wanda Maximoff es una arquitecta heredera y CEO de Maximoff Corp, una mujer con un estatus muy alto, multimillonaria, sexy y con todo lo que alguien pudiera desear, una mujer bastante seria que le gusta controlar todos los aspectos de su vida pero...
Mordí mi labio inferior por un segundo, luego suspiré admirando la belleza de Wanda Maximoff en la sala de reuniones, desde que comencé a trabajar aquí me he dado cuenta que casi la mayoría de los días se la pasa en la sala de reuniones trabajando con su equipo, aunque a veces si está en su oficina pero todo mundo sabe que cuando está ahí es por qué quiere estar a solas.
Maldita sea, ¿Por qué mi jefa tiene que ser sumamente atractiva pero tener una novia que cae bastante mal? Admito que Aubrey tiene un lado simpático pero con su posesión y celos no se deja ver, ¿Cómo es que ambas se hicieron novias? Huy no Natasha, no vayas por ahí, mejor admiró de lejos lo atractiva que está Wanda con ese traje blanco con escote bastante pronunciado, además su sonrisa es muy bella y casi no se ve que haga eso, debería sonreír mucho más.
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-Hola Natasha-. Escuché una voz detras de mi haciendo que girará todo mi cuerpo para ver quién era.
-Hola Maria, ¿Cómo estás? ¿Cómo te va en tu día de trabajo?-. Pregunté muy interesada acercándome para darle un beso en la mejilla que ella devolvió.
-Bastante bien, algunas pequeñas cosas que resolver pero ya sabes que primero todo tiene que pasar a manos de Aubrey y entre nosotras... Es demasiado recelosa con sus cosas, es muy buena en su trabajo pero es egoísta ya que siempre quiere resivir los aplausos, alzando el cuello y diciendo que ella lo hizo sola cuando tiene un equipo detrás-. Murmuró Maria cruzandose de brazos con una mueca.
Yo coloqué mi mano derecha en su hombro con simpatía, no debe ser fácil trabajar mano a mano con Aubrey, desde que llegué aquí todos han sido muy amables, Aubrey no tanto pero María me dijo que no era algo personal, que la mujer es celosa de cualquier mujer que se acerque a Maximoff, además siendo sincera... Maria se ha vuelto en una buena amiga en estas semanas trabajando aquí, me gusta su sonrisa, su humor y no era ciega, Maria es hermosa, atractiva y se que yo no soy indiferente ante sus ojos.
-Lamento oír eso, siendo sinceras tu eres mucho mejor arquitecta ambiental que ella pero... ¿Quiénes somos nosotras para juzgar verdad?-. Pregunté encogiendome de hombros haciendola reír.
-Tienes razón, ahora... ¿Tienes mucho trabajo?-. Preguntó un poco nerviosa mordiendo su labio inferior provocando que se viera más atractiva.
-No, de hecho ya voy de salida, los viernes no trabajo todo el día, ¿Y tú?-. Pregunté curiosa aunque desviando un poco la mirada para ver la sala de reuniones, trague en seco al darme cuenta que la mirada penetrante de Maximoff estaba en Maria y yo.
-Aún tengo un trabajo pendiente pero... Mira, se que nos conocemos de pocas semanas, hemos estado hablando y sinceramente me gusta tu forma de ser... Y eres muy bella tanto por fuera como por dentro, no quería evitar pasar la oportunidad que se me presenta... Así que... Lo que estoy tratando de decir es... ¿Puedo invitarte a salir? Quiero lograr que me veas más que una buena amiga por qué me gustas, me gustas mucho Natasha-. Habló Maria bastante nerviosa haciendo que dejara de ver a Maximoff y me concentrará en Maria.
