Natasha Pov.
-Estas hermosa-. Me susurró Wanda al oído mientras besaba mi mandíbula.
-Siempre me lo dices-. Dije con una risita sintiendo su mano colocarse en mi abdomen.
-Por que es cierto... ¿Por qué mentiría? Además, ya estamos aquí mi amor... Estamos en Milo-. Dijo mi esposa haciendo que abriera los ojos para mirar alrededor.
El lugar era majestuoso, el agua era bastante clara, note algunas casas pintadas de diferentes colores que lo hacían ver muy atractivo como también noté a algunas personas ya en lanchas o siemplemente en la orilla tomando el sol.
-¿Sabías que a Milo también se le conoce cómo Milos o Melos?-. Le pregunté a mi esposa quién me miraba fijamente, un pequeño escalofrío paso por mi espalda pero de buena manera.
-Tenia una idea, si-. Aseguró encogiendose de hombros.
-Bueno, por qué Milo es una pequeña isla volcánica griega del mar Egeo-. Dije yo haciéndola reír para luego ser abrazada por mi esposa seguido de muchos besos en mi rostro.
-A mi no me importaría quedarme contigo varada en una isla, de hecho sería genial por qué serías toda mía y de nadie más-. Aseguró cuando coloque ambas manos dentro de sudadera delgada.
-¿Si fuera por ti me tendrías encerrada?-. Pregunté alzando mi ceja derecha con diversión.
-Si y no... Una parte egoísta de mi te quiere solo para mí pero la otra que es coherente, sabe que amas tu independencia, salir con tus amigos y jamás te quitaría algo como eso, te amo demasiado mi esposa... Y como ya te lo he dicho, te daré todo lo que pidas-. Aseguró y yo sonreí para luego juntar nuestros labios en un beso suave.
Amar a Wanda es sencillo, amarla sin condición también, lo que fue más difícil es comprender su estado maniaco por el trabajo, sabía que trabajar lo era todo para ella pero nunca visualice que fuera una adicción, aún así aprendimos a lidiar con eso, Wanda me ha demostrado una y otra vez la manera en que me ama, jamás alguien me había amado así o me había puesto como su prioridad ante todo, incluida su familia, Wanda es... La mujer de mi vida, la mujer con la que quiero pasar mis días y noches.
-Espera... Espera, Wanda-. Solté un gemido cuando sus besos húmedos fueron a mi cuello.
-¿Qué? Déjate querer-. Gruñó adentrando su mano en mi blusa, acariciando mi espalda.
-Si, pero no enfrente de todos, además espera... Espera, quiero darte algo-. Le dije empujandola de los hombros para que se hiciera para atrás.
-¿Qué?-. Preguntó haciendo puchero como niña pequeña, yo rode los ojos y me acerque al bolso que había traído conmigo.
-Lo vi ayer cuando fui a dar un paseo mientras tenías una llamada de trabajo, digamos que... Lo vi y sabía que era para ti, solo espero que te guste-. Dije un poco nerviosa dándole una cajita blanca en forma de rectángulo.
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You Are My Destiny (Scarletwidow)
Fiksi PenggemarWanda Maximoff es una arquitecta heredera y CEO de Maximoff Corp, una mujer con un estatus muy alto, multimillonaria, sexy y con todo lo que alguien pudiera desear, una mujer bastante seria que le gusta controlar todos los aspectos de su vida pero...