Wanda Maximoff es una arquitecta heredera y CEO de Maximoff Corp, una mujer con un estatus muy alto, multimillonaria, sexy y con todo lo que alguien pudiera desear, una mujer bastante seria que le gusta controlar todos los aspectos de su vida pero...
-¡Wanda! ¿Sabes dónde deje el vestido para esta noche?-. Medio gritó mi novia mientras yo estaba recostada en el sofá leyendo un libro.
-Supongo que en tu clóset, te dije que era mejor que lo dejaras en mi departamento-. Insinúe yo con una leve sonrisa en mi rostro.
-Wanda... Sería aún peor en tu departamento, tienes mucha ropa sin contar con la que me compraste, tú padre Erik tiene razón... Tienes una obsesión con la ropa ya que muchas veces solo usas la prenda una vez en la vida-. Habló mi novia y yo dejé de leer para verla, alcé mi ceja derecha.
-¿Y que tiene de malo? Tú tienes una obsesión con los videojuegos y ahora me tienes viendo una serie que está basada en ese juego-. Le dije mientras mi pelirroja colocaba sus manos en su cintura.
-Tienes un punto-. Murmuró con un puchero para luego suspirar, camino hacía a mi quitándome el libro del regazo para luego subirse encima de mi.
-¿Sabes? Nunca pensé que pasaría este año nuevo con la mujer de mi vida-. Dije con una sonrisa acariciando su cabello.
-Bueno, a veces el destino o lo que sea que nos hizo encontrarnos es... Único, jamás he sentido por nadie lo que siento por ti, te amo Wanda-. Susurró ella dejando un beso en mi mandíbula.
-Te daré todo si me lo pides mi amor-. Susurré yo cerrando los ojos con una enorme sonrisa.
Ambas nos quedamos calladas por un momento, realmente disfrutando de este momento juntas, amaba sentirla contra mi cuerpo y me encantaba que mi Natasha escondiera su nariz en mi cuello diciendo que amaba mi loción a cítricos, la amaba demasiado y no era broma, le daría lo que pidiera, suspiré y no se en qué momento nos quedamos dormidas en su sofá. Cuándo volví abrir mis ojos me di cuenta que mi novia ya no estaba encima de mi, talle un poco mis ojos para luego observarla en el pequeño sofá invidual jugando con su xbox.
-¿Qué hora es?-. Pregunté acomodandome en la orilla del sofá.
-Las seis y media de la tarde-. Murmuró Natasha para luego soltar un gruñido seguido de disparos.
-Mierda... Debemos arreglarnos, deja de jugar si no llegaremos tarde-. Le dije acariciando su cabello y ella asintio con la cabeza.
Rápidamente pauso su juego y luego apagó su xbox, ambas fuimos directamente a sacar nuestros trajes que nos pondríamos en esta fiesta de año nuevo que la empresa hizo a petición de mis padres, los cuales querían "sentirse dueños" de nuevo y yo los deje, además Pietro estaría presente con Alisa haciendo que así la conociera por fin. Mi novia y yo tomamos un baño rápido aunque fue gracioso por qué su cuarto de baño era pequeño y la pasábamos muy pegadas hasta que salimos con toallas envueltas en nuestros cuerpos.
Al salir nos secamos y comenzamos a cambiar entre risas, había música de fondo y cuando terminamos de arreglarnos, yo giré para observer a mi novia, dejándome como siempre sin pensamientos coherentes, Natasha se veía simplemente hermosa con aquel vestido negro con puntitos brillosos que llegaba por encima de sus rodillas, además este tenía un pronunciado escote en "v" en la parte delantera dejando ver sus sensual cuello y clavículas, también tenía unos tacones de aguja color negro y su hermoso cabello estaba suelto, su mirada se veía más depredadora de lo normal ya que es maquillaje oscuro la hace ver sensual, que suerte tengo.
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