El Sabor de Venus

CAPÍTULO 16

CAPÍTULO 16

sin editar

Venus.

Stephanie: ¡Estoy contando las horas para verte, perra! Te amo.

—Aquí tiene, señorita Lewis. Que tenga una bonita navidad.

La mujer del counter en la farmacia lleva un gorro de Papá Noel y un collar de luces coloridas que prenden y apagan. Su sonrisa es mucho más presente, aunque es de costumbre que reciba a los clientes con alegria, parece que navidad es su temporada favorita. Me hace entrega de mis pastillas anticonceptivas y salgo de la farmacia viendo a James estacionado bajo un árbol en su Acura. Camino en su dirección y me monto en el auto notando que se encuentra viendo videos de un nuevo videojuego, y la música del radio a un volumen medio alto. Lleva unos jeans oscuros del estilo de cortes abiertos, y su camisa de Hunter x Hunter negra resalta con sus colores llamativos en el centro. Su cabello está suelto dándole ese toque que a muchas le gustan.

—¿Qué tal el videojuego?

Le pregunto tras abrocharme el cinturón.

—Definitivamente lo voy a comprar. — me asegura ahora poniendo el auto en marcha.

—Seguramente Ezra también lo esté pensando. — murmuro reconociendo que el juego es del estilo que mi novio juega.

Algo que me emociona es poder conversar con James sin tener miedo a lo que pueda decirme. Él no me juzga por mi relación con mi hermanastro en cambio, me entiende cuando le hablo sobre las cosas que siento. Entiende cuando me quejo y me ayuda a ver las cosas de una perspectiva diferente y, a no cerrarme en lo que yo pienso y veo porque Ezra también es una persona con sus propios sentimientos.

—Anoche vi que estaba jugando God of War.

Menciona él, le asiento con la cabeza. Anoche estabamos en su habitacion y mientras el jugaba, yo tenia el partido de los Astros y los Yankee en el portatil. Estuvimos despiertos hasta tarde aprovechando que nuestros padres llegaron tarde y se durmieron poco después. Para nosotros las noches se han convertido en nuestro momento preferido en el cual podemos tener encuentros amorosos sin preocuparnos mucho, ya que nuestros padres duermen la noche entera sin salir de la habitación.

—Si. Jugaba mientras escuchaba el partido de béisbol conmigo.

—Luego estuvo en Netflix, por un largo tiempo.

Su insinuación me hace sonreír, él tiene una sonrisa divertida en su rostro. Comienza a reír a carcajadas y yo le pego un golpe en el brazo. Nos dirigimos al aeropuerto para buscar a Stephanie que llega dentro de poco. Puesto a que mamá y papá están ocupados, y Ezra se encuentra trabajando, le pedí a James el favor. A pesar de que nosotros aún no tenemos vacaciones escolares, mi amiga afortunadamente si. Llevo semanas hablándole a James de lo bien que se llevará con mi mejor amiga, pero en este momento comienzo a dudar si eso funcionará, Stephanie es una chica muy intensa y le gusta dar su opinión, sin reprimirse cuán fuerte y cruda suene.  Algo que siempre me ha gustado y por lo que comenzó nuestra amistad en primer lugar.

—Realmente espero que Stephanie te guste. Son mis dos amigos mas cercanos y no quisiera que se lleven mal.

—No pienses en eso ahora, Gatita. Soy un pan de Dios y todos me aman— canturrea haciendo una mueca.

Blanqueo los ojos y sonrio. Es difícil creer que James sea amigo de todos porque honestamente, muchos en la escuela lo detestan. Aunque todos sabemos la razon.

—Dallas y Blake no cuentan en tu "todos me aman" — le menciono a las gemelas preferidas. El hace un puchero.

Una nueva notificación me hace mirar mi celular pensando qué tal vez se trata de Stephanie, en cambio encuentro un mensaje de Diana, con quien desafortunadamente llevo tiempo alejado desde el espontáneo almuerzo al que tuve que asistir sin quererlo. Ella ha cambiado, ahora todos la conocen como la otra chica de los Armstrong. Popular y si antes podía pasar por diva, ahora su personalidad llega a ser tan irritante que solo puede blanquear los ojos e intentar ignorar cuán superficial se ha vuelto. Ya no le importa saltarse algunas clases porque Killian se lo pida, después de todo, la directora puede hacer los cambios pertinentes para que eso desaparezca de su récord estudiantil. Su mundo se rodea de los famosos hermanos y su Dios Killian, mientras que yo opté por alejarme de ese par lo más que puedo. Las clases de avanzada se vuelven complicadas y el profesor gruñón no repara en darte una calificación baja por cualquier motivo. Killian intenta acercarse cada viernes con pláticas que no les doy importancia y sonrisas juguetonas que no me sorprenden.