Flynn sabe muchas palabras extrañas y sus definiciones pero a pesar de eso no sabe definir la razón por la cual ella y su mejor amigo rompieron su amistad. Su abuelo con la intención de ayudar la inscribe como voluntaria en un programa de autoayuda...
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De un día para otro me volví el centro de atención en toda la escuela, de ser alguien invisible a alguien a quien voltean dos veces tan solo para comprobar si realmente era yo la persona de los rumores, yo Flynn Can, era la chica la cual tubo una de las declaraciones más románticas del año la cual también fue arruinando por el chico más popular de la escuela para tan solo también declarar su amor y al final ser rechazado de una manera cruel, por un lado soy mala, cruel y egoísta por el otro la víctima, la soñadora, la creída, de hecho nunca había tenido tantas definiciones pero sin importar cuantas etiquetas me cubran no presto atención a ello, es más ni me incomoda del todo los rumores más bien lo más difícil es tener que verlo a él. Entre al salón de clases y lo primero que mi mirada se encontró fue con la de Bennet, debo aclarar que ese rostro bonito había desaparecido, hasta cierto punto sentía lástima, su cara estaba cubierta por moretones y con su nariz rota solo lo hacía lucir peor de lo que parecía, escuche como todos empezaron a murmurar y fue entonces cuando me dirigí a mi asiento.
—Ni siquiera es tan bonita.
—No hay dicho que dice que la suerte de la fea la bonita la desea, tan solo mira la cara de envidia de Judith.
Las chicas a mis espaldas comenzaron a reír, sabía que lo decían a propósito pues mas que hablar sobre aquel incidente también hablaban sobre la reacción de Judith, lo único que querían provocar era una pelea que nunca iba a ser. Yo no estaba interesada y estaba segura que Judith tampoco lo estaba.
—Buenos días muchachos—la profesora Vega entró para vernos con una sonrisa—espero que hayan tenido un excelente fin de semana porque vamos a empezar esta semana con un pequeño proyecto. Es algo que voy a denominar como Onism. Esta palabra danes hace referencia sobre la conciencia de lo poco que uno hará en este mundo. Y se preguntaran, ¿que es lo quiero que hagan? Bueno muchachos quiero que piensen en sus sueños, metas, todo eso que les encantaría hacer mientras aún existen en este mundo, será una exposición lleno de experiencias el cual deberán compartir con un compañero —la profesora Vega sacó una pequeña caja la cual agitó —los compañeros serán al azar y no, no habrá cambios. Señorita Can, ¿le gustaría ser la primera?
Me puse de pie un tanto dudosa, metí mi mano en aquella caja para sacar un papel, lo extendí y mire a la profesora Vega.
—Bien, ya que tomaste el papel que tal si vas y tomas asiento junto a tu...
—Me gustaría cambiar de compañero.
—Señorita Can, lo siento pero no hay cambios.
—Lo sé pero me gustaría que solo por esta ocasión hiciera una pequeña excepción.
—No, no lo hare. Por qué si lo hago con usted también lo tendré que hacer con otros.
Mire el papel, lo arrugue entre mis manos y mire a la profesora Vega, ciertamente me sentía tan molesta pero ella no tenía la culpa de esto así que solo me di la vuelta para tomar mis cosas e ir hasta donde e encontraba Bennet, todos en la clase comenzaron a murmurar sin parar y solo escuche a la profesora pedir silencio para poder con las demás indicaciones mientras todos continuaban tomando un papel. Al terminar la clase me levante de mi asiento con rapidez para salir, seguía molesta con la situación pero no había nada que pudiera hacer al respecto o al menos no respecto a él.
