—Dile a Bennet que prometemos ir a su próximo partido.
—Eso haré abuela.
—Dile que vaya a casa a cenar, debemos celebrar su triunfo con pizza aunque si pierde aún así debemos cenar algo.
—De acuerdo, yo le daré el mensaje.
—Divierte cariño.
—Pero no demasiado —mencionó el abuelo a lo cual mi abuelo golpeo su hombro de una manera nada sutil.
—Los quiero, adiós —dije bajando del auto para poder dirigirme a la cancha. Aunque era temprano los alumnos siempre llegaban con anticipación pero no por los mismos motivos, mientras las chicas querían más tiempo para ver a los jugadores, había fanáticos de todo corazón, locos por los postres que vendían y otros aprovechaban este momento para bueno tener encuentros.
—Ratoncito, nunca pensé que fueras del tipo de persona que tiene el espíritu escolar deportivo—Eliot se acercó a mí lado me miró de pies a cabeza antes de comer un poco de palomitas.
—La verdad es que no pero mi abuela lo preparo—admití pues según sus palabras es una linda manera de dar apoyo utilizar los colores del equipo.
—Te ves bien pero en definitiva el azul es tu color.
—No vas a olvidar ese día, ¿verdad?
—No todos los días tu compañera de cena se desmaya tras a verte dado una paliza.
—Es el único hecho que no lamento.
Eliot comenzó a reír me extendió su bolso de palomitas pero negué. Nos acercamos a las gradas, tomamos a siento y lo vi observar con atención toda la cancha.
—¿Y cuál de todos es?
—¿De qué hablas?
—De tu antiguo amigo, Bennet.
—El jugador diez.
—Ja, pero que estafa.
—¿Que?
—Esperaba algo más no se, ¿impresionante? Por lo menos que fuese más atractivo que yo.
—Es el chico mas cotizado en toda mi escuela.
—Pero que estándares tan bajos tienes las chicas aquí.
—Oh vaya, pues gracias por el halago.
—Obviamente no me refiero a ti, es decir si nunca te gustó ese idiota tu estándar está bien, incluso tienes el privilegio de rechazarme.
—Tus bromas malas nunca tiene que faltar.
—Es parte de mi encanto... Dile hola a Alex.
Mire al frente para ver a la mascota de la escuela bailar, me señaló lanzando un par de besos para girar saludando sin parar, vaya que tenía buenos pasos de baile, levante la mano para saludar a lo cual ella nuevamente me lanzó un beso, seguí mirando alrededor para ver a Julia entre la banda con una trompeta quien me saludo a lo lejos junto con Hugo.
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Un Termino Difícil de Traducir
Novela JuvenilFlynn sabe muchas palabras extrañas y sus definiciones pero a pesar de eso no sabe definir la razón por la cual ella y su mejor amigo rompieron su amistad. Su abuelo con la intención de ayudar la inscribe como voluntaria en un programa de autoayuda...