Flynn sabe muchas palabras extrañas y sus definiciones pero a pesar de eso no sabe definir la razón por la cual ella y su mejor amigo rompieron su amistad. Su abuelo con la intención de ayudar la inscribe como voluntaria en un programa de autoayuda...
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—Ya no iras al centro de ayuda con nosotros.
—¿Por qué? —pregunto la abuela antes que pudiese decir algo.
—Creo que ya fue suficiente tortura para ella.
—No, no es cierto. Estas celoso de Eliot.
—¿Que? Claro que no.
—Claro que si.
—No, no es así. Además Flynn ya no tiene tanto tiempo libre para estar con Bennet.
—Abuelo de hecho yo...
—No cambies la conversación—continuó hablando la abuela interrumpiendo—no puedo creer que este celoso de un muchacho.
—No es celos, él solo no es el indicado para Flynn.
—La verdad es que concuerdo con el abuelo pero...
—¿Y como estas seguro de ello? Ni siquiera lo conoces bien, además Flynn es quien va a definir eso.
—Si sobre eso, ni siquiera somos amigos....
—No necesito conocerlo además esta en el centro por alguna razón—continuo el abuelo ignorandome también.
—Exacto, decidió ir y cambiar para bien. Además, ¿tienes algún problema con las personas que van a un centro de ayuda?
—¡Están locas! En especial el tipo lo puedo ver en su mirada.
—Creo que deberíamos hablar con más calma y...
—Osea que soy una loca.
—¿Que? No.
—Entonces, ¿por qué dijiste eso? Te recuerdo que me conociste en un centro de ayuda.
—Esto no va bien.
—Pero eso es diferente.
—Di algo mejor abuelo.
—¿Por qué es diferente?
—Él es un chico.
—Esa no es una buena respuesta abuelo.
—¿Y?
—Tan solo mira como terminó tu hija.
Hubo un silencio y pude notar la mirada de miedo del abuelo el sabía que lo había arruinado y cuando la abuela tomó sus cosas sin decir y salió de casa azotando la puerta supe que está noche el abuelo dormiría con los perros de la calle. Había muy pocos temas de los cuales no se hablaban en esta casa pero entre ellas se encontraban mis padres o al menos era algo que no se menciona cerca de mi.
—Creo que deberías ir detrás de ella y pedir perdón.
—En eso estoy —el abuelo tomo las flores artificial del jarrón para ir corriendo detrás de la abuela. Me levante para ver por la ventana como el abuelo le pedía perdón siguiendo el auto pero la abuela estaba tan molesta que ni siquiera lo miraba, tan solo arrancó el auto y se fue mientras que el abuelo iba corriendo detrás de ella. Salí de casa para saludar a la vecina quien fingía regar su césped con la pura manguera sin agua, vaya que estas personas habían contemplado algo importante por la mañana.
