Dolía, le dolía en el alma, las cosas no estaban bien con Jungkook, Junghyun había desaparecido, pero era como si nada hubiera cambiado, como si los tuviera aún aprisionados, de distintas formas, pero aún así, encadenados.
Taehyung había ido a visitar al rubio, la escuela ya había terminado, por lo que Jimin no se preocupó en ir siquiera a la ceremonia, el chico había entendido, sabía que no la estaba pasando bien y que necesitaba tiempo, un tiempo que sentía no lo estaba obteniendo.
— Jimin — Los ojos cansados del mayor lo miraron — Has intentado hablar con él de nuevo?
El rubio sólo bajó la cabeza posándola sobre la barra, su piel haciendo contacto con aquel frío material y el castaño entendió.
— No puedes simplemente darte por vencido.
— No lo hago Tae — Suspiró y observó al alto — Es sólo que Jungkook me pidió tiempo.
Podría jurar que era la enésima vez que veía al castaño rodar los ojos, sentía su aura furiosa emanar, pero qué podía hacer?
— Y vas a darle más tiempo? Han pasado 3 meses Jimin — Exclamó comenzando a dar vueltas en círculos — Tres meses, estuvieron separados el mes que planearon todo y luego le has dado estos dos meses, que más tiempo necesita?
Taehyung se frustró y suspiró al ver el rostro lleno de dolor del rubio.
— Mira yo entiendo si? Él estuvo encerrado por miles de años, bajo hechizos que lo debilitaban día a día, viviendo con un loco, que encima es su hermano y con el dolor de que su esposo lo haya "traicionado" — Tomó aire — Pero tú también la has pasado para la mierda, yo viví todo eso, te vi morir, volver a nacer y cuidarte, escuchaba tus llantos en sueños, porque tu inconsciente sí recordaba todo, para luego verte a la mañana siguiente tan normal pero con ese vacío en los ojos — Apretó los labios mordiendo el inferior — Me hice tu amigo y te cuidé, vi a Jeon estar cerca de ti, y esa mala espina que siempre tuve acerca de él, viví cada maldito día de sufrimiento en el que estabas y del cual eras consciente en el fondo sin saberlo externamente — Tomó las manos del menor que ya traía los ojos empañados — Así que no, si de verdad lo amas, y si él te ama, ambos van a hablar y solucionar toda esta mierda, ya fue suficiente tiempo, 3 meses son más que suficientes para aclarar la mente, así que — Lo hizo levantar del asiento — Vas a ir a bañarte e ir a buscar a tu hombre y recuperar 500 años perdidos, ahora.
Jimin sorbió sintiendo la congestión por las lágrimas parar, y asintió con una pequeña sonrisa, adoraba a Taehyung, era el tipo de persona que sabía ponerse serio cuando la situación lo ameritaba, por lo que corrió escaleras arriba, sabía que debía hacerlo y además quería, amaba a Jungkook, nunca dejó de hacerlo y se lo iba a demostrar, iba a luchar por el amor que le tenía a aquel pelinegro.
Habían pasado ya 2 meses desde aquella conversación con Jimin, nunca quise que creyera que no lo amé, sólo tenía demasiadas dudas, mi cabeza necesitaba aclararse y mi corazón recuperarse, había estado quedándome en lo de Jin, sabía que no era su culpa, él y Yongsun sólo hacían lo que debían para sobrevivir, ambos hermanos se habían estado protegiendo todo el tiempo.
— Llegué — Aquel cabello rubio cenizo apareció dejando unas bolsas sobre una silla y sacándose el saco — Y Jin? Aún no llega?
Negué bebiendo un café sin despegar mi vista de la tostada intacta en el plato.
— Kook — Llamó a lo que volteé a verla — Deja toda esta absurda melancolía y ve a buscar a Jimin, no te estuve lanzando ese hechizo de mierda por 500 años para que cuando seas libre te la pases encerrado aquí lamentándote como un tonto cuando tienes al amor de tu vida a tan sólo metros y prefieras en su lugar vivir sufriendo.
Su postura era seria, tenía los brazos en jarra y la mirada totalmente segura de lo que decía.
— Sun no es fácil — Tragué saliva bajando la cabeza — Tú sabes por lo que pasé, todo lo que sufrí, lo amo, como no tienes idea, lo adoro con mi vida, pero no puedo estar a su lado, no mientras mi hermano siga suelto, no cuando sé que Junghyun hará hasta lo imposible por de nuevo separarnos, si estando lejos puedo protegerlo es lo que haré.
Ella negó sentándose a su lado y apretando su mano en apoyo.
— Eres un tonto — Suspiró con una pequeña sonrisa — Jungkook, él también la pasó mal, y aún así apenas despertó nunca confió en Junghyun, siempre supo que no eras tú, sabía los riesgos que habría y aún así los corrió, porque estaba seguro que te quería a su lado, piensas que Jimin no correría todos los riesgos por ti?
— Por eso lo hago, porque estoy seguro que sería capaz de dar su vida y no quiero perderlo.
Se puso de pie avanzando unos pasos y quedando de espaldas con el alto.
— Es que ya lo estás perdiendo, y quieras o no, es mejor afrontar los riesgos juntos que verse morir y dar la vida por el otro, evita que termine en tragedia, deja ir el pasado y vive tu presente junto a la persona que ames — Apretó el hombro del chico — No dejes que la sombra de Junghyun sea como la cadena que te tuvo encerrado por 500 años, no te la coloques tú mismo.
Y salió dejando al castaño sabiendo qué hacer, porque ambos necesitaban eso, un pequeño empujón, alguien que les hiciera ver la realidad y lo equivocados que estaban, porque cuando aman a alguien de forma tan pura, lo mejor no es alejarse por el bien del otro, lo mejor es estar con el otro aún sabiendo los riesgos y siendo capaces de afrontarlos juntos, porque amar no significa creer hacerle un bien alejándote, significa estar ahí tratando de hacerlo bien.
Jimin se había alistado y bajaba los escalones cuando sintió tres toques desesperados en su puerta, nunca esperó ello, que al abrir se encontraría con aquellas orbes que tanto amaba, la persona que lo observaba agitado y transpirando era justo a quien estaba a punto de ir a ver, su Jungkook.
— Kook — Soltó en un susurro.
— Puedo pasar?
El rubio asintió dejándolo ingresar al pequeño hogar, ambos avanzaron unos pasos, pero se quedaron estáticos a sólo metros.
— Yo-
Jimin había intentado hablar, pero no supo cómo y cuando estaba dispuesto a soltar su miedo, sintió una mano acariciar su mejilla, al subir su mirada vio aquellos ojos que lo habían atrapado, la sensación de calidez invadiendo cada fibra de su cuerpo.
— No tengo mucho que decirte Jimin, sólo que siempre te he amado, que mi corazón late al mismo ritmo que el tuyo, y que todo mi ser quiere estar contigo — No pudo evitar acercarse sonriendo al ver aquellas orbes caramelo — Te amo y no quiero perderte, pienso luchar siempre por nosotros, lamento lo que pasó en el pasado, es algo que no podemos cambiar — El pequeño sorbió con una sonrisa empapada en lágrimas, mientras Jungkook acercaba sus rostros quedando a sólo centímetros — Y tampoco planeo hacerlo, quiero vivir mi presente, y mi presente eres tú, siempre fuiste tú.
Sus labios se rozaron con suavidad y ternura, se habían extrañado, sus corazones latían al mismo compás, bailaban aquella danza llamada amor y sus cuerpos vibraban con alegría, se amaban, siempre lo habían hecho y eso era algo que nada ni nadie podía cambiar, porque para Jimin siempre fue Jungkook el dueño de cada uno de sus pensamientos y para Jungkook siempre fue Jimin el dueño que cada una de sus alegrías.
Ninguno necesitaban más palabras, sus corazones y acciones lo decían todo, el beso lleno de cariño y anhelo era prueba más que suficiente para demostrar que ambos se habían extrañado, no necesitaban más, les estaba siendo otorgado una segunda oportunidad para amarse, y si de algo eran conscientes era de que la vida no suele dar segundas oportunidades tan fácilmente.
La iban a aprovechar, no importaba si los riesgos que debían tomar fueran tan altos, lo iban a hacer porque si de algo estaban más que seguros era de que juntos eran más fuertes y ni la fuerza del mal más oscura podía romper ello.
ESTÁS LEYENDO
Mine • kookmin •
Fiksi Penggemar«Porque fui suyo desde antes que lo supiera» Una historia que te dejará al límite 🐾 Historia completamente original 🐾 No se permiten copias ni adaptaciones 🐾 Se tocan temas sensibles! 🐾 Kookmin 🐾 Ligera mención del Taejin ~Iniciada: 31 de ago...