ᴜɴᴇxᴘᴇᴄᴛᴇᴅ ꜱᴜʀᴘʀɪꜱᴇ
𝓓𝓻𝓪𝓬𝓸 𝓜𝓪𝓵𝓯𝓸𝔂
Draco recién había llegado de viaje, donde se reunió con el ministro muggle, le parecía absurdo tener que fingir que el mundo mágico y su mundo tenían un tipo de convenio. Si a la larga el Lord tomaría esas tierras, asesinandolos consigo y proclamandose así mismo el nuevo tirano.
Apareció en la entrada de la mansión Malfoy. En seguida se escucho un "Pop", y un elfo doméstico se encontraba recibiendolo con una reverencia.
- Amo Malfoy, Dipsy esta muy contenta de tenerlo aquí de nuevo. ¿El amo necesita algo?
- Puedes irte, Dipsy.
- Si señor, lo que usted diga, señor.
Draco se dirigía hacia su habitación a descansar de su propia existencia, cada día sentía más frustración. Las investigaciones sobre los rebeldes y la Orden del Fénix no parecían tener avance. Llegó a creer que tras la muerte de Hermione Granger, la orden ya no sabría cómo esconderse. Pues si Harry Potter seguía vivo, era por la supervivencia de su soldado más leal. Aún después de 4 años en busca y captura han sabido mantenerse ocultos.
Se detuvo en seco al escuchar el sonido de alguien apareciendose en la chimenea del salón principal, a lo que regresó sus pasos sobre las escaleras y pudo divisar la figura de Theodore Nott de pie frente al enorme vestíbulo.
- Se puede saber, ¿Quién te hizo la invit...
- La liberó.
- ¿Qué?
- ¡Sayre fue absuelta! La dejó libre.
Malfoy comenzó a sentir de inmediato el enojo subir por sus venas acumulándose en su cabeza, provocando que una capa le nublara la vista.
- Tienes que ir al ministerio, ya.
Y la marca tenebrosa comenzó arder, le estaba indicando aparecerse de inmediato.
Ambos hombres se aparecieron en el ministerio donde ya se encontraba bastante gente movilizándose, pero su marca seguía ardiendo como doce infiernos y Draco sólo quería que terminará.
Es un chiste, es una broma de mal gusto. No puede ser que liberaran a una traidora de ese calibre, ella tendría que estarse pudriendo en los calabozos. ¿No es así?.
Al abrir la puerta se encontraba gran parte de los mortifagos más renombrados, cada uno sentado en silencio y con la mirada hacia el suelo. Tomaron asiento junto a Dolohov y Yaxley, ninguno le dirigió la mirada a Malfoy.
Al frente de ellos se encontraba el Lord junto a su estúpida serpiente, paseándose entre las piernas de su señor.
Hubo una pequeña risa de su parte y comenzó el mayor circo que alguna vez pudo presenciar.
- Mis más leales sirvientes, tienen el honor de presenciar una de mis muchas y acertadas decisiones. Todos y cada uno de ustedes me han demostrado una lealtad inquebrantable, y el día de hoy, se a de sumar otro soldado más a mis filas.
Por una esquina comenzó a hacerse presente la figura de la azabache. A pesar de estar usando una enorme capa negra y su respectivo uniforme, su porte destilaba pura elegancia, cargaba con un aire de grandeza.
Como si se burlara en mi cara, gritandome que ella se había ganado el perdón del Lord.
Ni si quiera había rastro de aquella mujer que estuvo encerrada en un calabozo, encadenada de pies y manos, siendo maldecida por la imperdonable.
Bastante cuerda para haber sufrido tanto daño, inclusive le daba una pizca de familiaridad. De manera irónica, le recordaba a Bellatrix Lestrenge.
Elegante y consumida por la demencia.Parecía que había absorbido toda su esencia. Después de todo, Sayre fue quien mutiló a su tía en el 98.
- Es de mi gracia, notificarles que a partir de esta fecha, la señorita Sayre, es nombrada General Oficial en las instalaciones de Sussex. Atribuido a su gran aportación a esta sociedad. Ella salió de cacería y trajo consigo la cabeza del indeseable no. 1
En un abrir y cerrar de ojos, la cabeza de Potter rodo a los pies de Sayre dejando a todos los presentes pasmados.
Rápidamente sus miradas se encontraron, toda su espina dorsal se sintió tensa al sentir un frío desgarrador y Draco pudo percibir un ligero susurro salir de sus labios carmesí.
Gané.
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𝙏𝙧𝙖𝙞𝙩𝙤𝙧 | Draco Malfoy (EN PROCESO)
FanficEl amor siempre será una buena razón para que las cosas fallen. - Me destruiste. Fuiste estúpida y egoísta. © Contenido sensible.