𝙏𝙧𝙖𝙞𝙩𝙤𝙧 | Draco Malfoy (EN PROCESO)

CAPÍTULO 28

𝓥𝓮𝓷𝓾𝓼 𝓢𝓪𝔂𝓻𝓮

Los días parecían ir demasiado lento, en cada pestañeo venía a su mente todas las cuestiones que estaban pendientes.

No había vuelto a ver a Draco, desapareció del cuartel, dejando toda decisión en boca de Venus.

Era algo que le molestaba bastante, desde que eran jóvenes, Draco Malfoy tenía el temple de sobre llevar situaciones pesadas, era la primer persona en sugerir pensar dos veces antes de actuar, asegurarse de no tomar la decisión equivocada.

Lo opuesto a Venus, aunque los años le dieron la madurez para comenzar a tener paciencia, aún había momentos de inestabilidad en dónde le salía mandar al carajo todo y arrepentirse dos segundos después.

Su beso, por ejemplo.

Pero a pesar de esto, cuando se trataba de sentir, demostrar, Draco inmediatamente desaparecía sin explicación.

Constantemente dejaba a Venus confundida, porque ella no lograba comprender como para él era tan sencillo mantener distancia, como si su ausencia no lo estuviera matando.

Porque ante esto, Venus quería entender, pero no lograba hacerlo, ¿No habían pasado ya el suficiente tiempo alejados?

Esto solo provocaba una pelea de orgullos, porque al tiempo, cuando Draco regresaba, Sayre le daba la espalda. Prolongando aún más la separación.

Esto disgustaba a Malfoy, ya que no era capaz de ver, que sus acciones tenían consecuencias. Cómo ganarse la indiferencia de su mujer.

La misma mujer que lo había rechazado y alejado incontables veces.

Ambos tenían razón y a la vez no.

Sayre no había tenido oportunidad de regresar a Grimmuld Place en las últimas semanas, por lo que aquella tarde, dispuso de su tiempo y se tomó la libertad de visitar a La Orden.

Al salir de aquella chimenea, el salón principal se observaba vacío, por lo que decidió esperar a que alguien apareciera, no se sentía con la confianza de deambular por los pasillos.

A los pocos segundos apareció Ginny Weasley, sin molestarse en dirigir un rostro amable, giro sus ojos en una muestra de desagrado y llamó.

— ¡Harry! Te están esperando.

Sayre se limitó a observarla sin expresión y en seguida ingresó aquel azabache por la puerta.

— Demoraste.

— Se complicaron las cosas.

— ¿Devolviste sus memorias? .— preguntó Harry con un rostro, que más allá de demostrar empatía, se veía demandante.

— No.

— ¿No?, ¿Y eso es todo? Supuse que para este punto tendríamos a Malfoy de regreso.

— Aunque así fuera, ¿Que crees? Que entregarle sus memorias hará que venga corriendo a ayudarnos, no seas imbécil Potter...

— Entonces porque no hemos sabido nada de Luna.

Sayre sostuvo la mirada en el rostro de Harry, tratando de buscar una respuesta obvia a lo que él estaba preguntando, pero la realidad es, que no comprendía a qué se refería.

Esos cortos segundos de silencio hicieron comprender a Harry, que Venus no estaba enterada, provocando que abriera los ojos de par en par, demostrando su preocupación mezclada con ira.

— Tu no llevaste el proceso de la captura de Luna... Maldita seas Sayre, ¿En dónde has tenido la puta cabeza?

La captura de Luna.