EUPHORIA II, jjk

T W O

[Jungkook]

Esto de mudarse es una mierda. Me alegra mucho poder irme por fin de casa y poder volver a vivir solo durante una temporada. Ya extrañaba mi pequeña habitación del campus, desde que tuve que abandonarlo, después de la graduación, no he tenido ni un minuto de tranquilidad.

El verano se me ha hecho largo, compartir casa con mi madre ha hecho que contara los días y las horas para poder irme de aquí. Por fin ha llegado el día de abandonar Busán.

Voy a extrañar mucho a mi hermana, pero como hemos acordado llamarnos al menos una vez por semana, me quedo más tranquilo.

Parece que mi destino sea ir de residencia en residencia y vivir siempre en una minúscula habitación. Me gustaría compartir un piso con algún compañero, sería una experiencia bastante guay, supongo.

Aunque no puedo quejarme de la habitación de la residencia de estudiantes en la que voy a vivir ahora. Es un poco más grande que la que tenía en Busán.

Mi antigua habitación estaba diseñada para ser compartida y solo contaba con dos camas, dos armarios, dos escritorios y un baño.

Esta es individual, no voy a contar con compañero de habitación. Solamente tiene una cama, un escritorio, un armario, una cocina y un baño.

Es como un pequeño estudio, me gusta.

Miro las cajas de la "mudanza" y las maletas y no puedo evitar empujarlas con el pie hacia una esquina de la habitación.

Me pongo enfrente del espejo y me peino un poco el pelo con los dedos, dándole un aire más descuidado a mi look. También me acomodo la chaqueta del uniforme y pillo mi mochila antes de salir.

Abro la puerta y me fijo en la puerta que tengo enfrente. Me vienen recuerdos a la mente de mis antiguas vecinas, bueno, de una en específico. Me daba mucho morbo tener a la chica que me gustaba viviendo delante de mi habitación.

Cierro con llave la puerta de mi habitación y me recoloco la mochila en el hombro antes de comenzar a caminar por el pasillo. Al igual que en mi antigua residencia, mi habitación también se encuentra en el final del pasillo de la segunda planta.

Es el primer día de curso y la verdad estoy un poco nervioso por el tema compañeros, aunque no debería, ya que soy bastante sociable y me resulta fácil hablar con la gente.

Veinte minutos después, los pasillos de la universidad se tiñen de color amarillo mostaza debido al uniforme que llevan los alumnos, que todos se encuentran en busca del aula de exposiciones, donde los profesores pretenden dar el discurso motivacional de inicio del curso escolar. Como yo no tengo ni idea de donde queda eso, me limito a seguir a la marea de gente.

Llegamos a dicha sala que, como me imaginaba, es enorme. Pillo asiento en el fondo, junto a un grupo de chicos que se encuentran hablando entre ellos animadamente. Aprovecho la ocasión para socializar un poco.

- Buenas. - saludo alegre.

Los chicos me devuelven el saludo y se presentan diciéndome sus nombres y su carrera.

- ¿Comunicación audiovisual? - repite uno cuando les digo lo que voy a estudiar. - Hermano, qué guay. Tiene pinta de que vas a estar rodeado de chicas. Yo voy a Criminología.

- Yo hago filología. - sonríe otro, orgulloso. - Eso sí que va a estar plagado de chicas. Lo siento muchachos.

- Tú con esa cara no vas a hacerte a ninguna. - se ríe otro.

- Podéis haceros a tantas como queráis, pero la rubia que he fichado, ni la miréis.

- Sí hombre, la rubia es mía.